El Angel que Vino del Infierno
img img El Angel que Vino del Infierno img Capítulo 1 DANNA DAVE I
1
Capítulo 6 ¡FOLLADA! II img
Capítulo 7 MÁS QUE DIOS I img
Capítulo 8 MÁS QUE DIOS II img
Capítulo 9 ESTO NO ES UNA BROMA I img
Capítulo 10 ESTO NO ES UNA BROMA II img
Capítulo 11 KILLIAN, AÑOS ANTES I img
Capítulo 12 KILLIAN, AÑOS ANTES II img
Capítulo 13 DANNA, AÑOS ANTERIOR I img
Capítulo 14 DANNA, AÑOS ANTERIOR II img
Capítulo 15 Luciérnagas I img
Capítulo 16 Luciérnagas II img
Capítulo 17 LE GUSTA NO HACER NADA CON ELLA I img
Capítulo 18 LE GUSTA NO HACER NADA CON ELLA II img
Capítulo 19 ¡BASTA! I img
Capítulo 20 ¡BASTA! II img
Capítulo 21 LUCÍA I img
Capítulo 22 LUCÍA II img
Capítulo 23 ISLA I img
Capítulo 24 ISLA II img
Capítulo 25 VANESSA I img
Capítulo 26 VANESSA II img
Capítulo 27 EL PINTOR I img
Capítulo 28 EL PINTOR II img
Capítulo 29 UN TRABAJO I img
Capítulo 30 UN TRABAJO II img
Capítulo 31 LA HISTORIA DE KILLIAN I img
Capítulo 32 LA HISTORIA DE KILLIAN II img
Capítulo 33 LA APUESTA I img
Capítulo 34 LA APUESTA II img
Capítulo 35 PECADOS DE LA CARNE I img
Capítulo 36 PECADOS DE LA CARNE II img
Capítulo 37 LOURENÇO I img
Capítulo 38 LOURENÇO II img
Capítulo 39 FIESTA EN EL BOSQUE I img
Capítulo 40 FIESTA EN EL BOSQUE II img
Capítulo 41 LAS PALABRAS DE VANESSA I img
Capítulo 42 LAS PALABRAS DE VANESSA II img
Capítulo 43 ¿QUIÉN MIERDA ERES TÚ PARA PERDONARME I img
Capítulo 44 ¿QUIÉN MIERDA ERES TÚ PARA PERDONARME II img
Capítulo 45 SAUCE llorón I img
Capítulo 46 SAUCE llorón II img
Capítulo 47 ME PREOCUPO POR TI I img
Capítulo 48 ME PREOCUPO POR TI II img
Capítulo 49 LA CONFESIÓN ES... I img
Capítulo 50 LA CONFESIÓN ES... II img
Capítulo 51 PENITENCIA I img
Capítulo 52 PENITENCIA II img
Capítulo 53 EN EL BANCO CUADRADO I img
Capítulo 54 EN EL BANCO CUADRADO II img
Capítulo 55 SOBRE CÓMO VEO A DANNA DAVE I img
Capítulo 56 SOBRE CÓMO VEO A DANNA DAVE II img
Capítulo 57 LA IGLESIA I img
Capítulo 58 LA IGLESIA II img
Capítulo 59 PENITENCIA Y CASTIGO I img
Capítulo 60 PENITENCIA Y CASTIGO II img
Capítulo 61 JULIANA STURMAN I img
Capítulo 62 JULIANA STURMAN II img
Capítulo 63 DEMUESTRA QUE TIENES SENTIMIENTOS I img
Capítulo 64 DEMUESTRA QUE TIENES SENTIMIENTOS II img
Capítulo 65 ALCALDE DE MACHÍA I img
Capítulo 66 ALCALDE DE MACHÍA II img
Capítulo 67 STURMAN I img
Capítulo 68 STURMAN II img
Capítulo 69 COCAÍNA I img
Capítulo 70 COCAÍNA II img
Capítulo 71 NICOLLE STURMAN I img
Capítulo 72 NICOLLE STURMAN II img
Capítulo 73 MI SOBRINA I img
Capítulo 74 MI SOBRINA II img
Capítulo 75 DEL PRESIDENTE DE LA CÁMARA I img
Capítulo 76 DEL PRESIDENTE DE LA CÁMARA II img
Capítulo 77 JUGO DE NARANJA I img
Capítulo 78 JUGO DE NARANJA II img
Capítulo 79 UNA DISCULPA I img
Capítulo 80 UNA DISCULPA II img
Capítulo 81 TENÍAMOS UNA HISTORIA I img
Capítulo 82 TENÍAMOS UNA HISTORIA II img
Capítulo 83 CORAZÓN SANGRANTE I img
Capítulo 84 CORAZÓN SANGRANTE II img
Capítulo 85 ¿MADRE I img
Capítulo 86 ¿MADRE II img
Capítulo 87 MI ÁNGEL I img
Capítulo 88 MI ÁNGEL II img
Capítulo 89 JORGE Y CALUM I img
Capítulo 90 JORGE Y CALUM II img
Capítulo 91 JULIO Y KILLIAN I img
Capítulo 92 JULIO Y KILLIAN II img
Capítulo 93 ME GUSTA, DANNA DAVE I img
Capítulo 94 ME GUSTA, DANNA DAVE II img
Capítulo 95 CAER EN LA TENTACIÓN I img
Capítulo 96 CAER EN LA TENTACIÓN II img
Capítulo 97 TE AMO I img
Capítulo 98 TE AMO II img
Capítulo 99 PADRE, NO ME DEJES EN LA TENTACIÓN I img
Capítulo 100 PADRE, NO ME DEJES EN LA TENTACIÓN II img
img
  /  3
img
img

El Angel que Vino del Infierno

Roseana
img img

Capítulo 1 DANNA DAVE I

DANNA DAVE

- Señorita Dave, ¿podemos empezar a tirar los pétalos de rosa? – Escuché la voz del copiloto en el auricular que cubría mis oídos.

- Sí. – respondí ansiosamente.

Al confirmarlo, los otros dos tripulantes comenzaron a tirar los pétalos naturales que estaban organizados en bolsas de pura seda, provocando que una lluvia de pétalos rojos cayera sobre la casa de Jax Gatti, mi profesor de Bellas Artes en la Facultad de Bellas Artes. .

Sonreí satisfecho desde lo alto del helicóptero cuando noté que la gente salía de sus pequeñas y sencillas casas, completamente impresionadas por la escena.

- ¿Podemos acercarnos? – Pregunté por el micrófono, mientras mis ojos se posaban en el piloto que iba delante, quien se giró brevemente hacia mí.

- No, señorita Dave. Más cerca que esto no es seguro.

- Necesito ver mejor la reacción de... La persona que está dentro de la casa. – le expliqué.

- No hay manera, señorita.

- ¡Por supuesto que sí! – Impugné – Pago el doble de lo acordado. – propuse.

- ¡No es seguro! – El copiloto miró al piloto interviniendo en la conversación.

- Exijo que me acerquen a la casa. – Hablé claramente.

- No podemos hacer esto, señorita Dave.

Resoplé, seguro de que no se acercarían más, ni por todo el dinero del mundo. Odiaba a la gente en general ... Pero la gente que era ética y tenía sentido de responsabilidad me repugnaba. Aquellos que no son "comprables" entonces... Podrían extinguirse del mundo.

Cuando vacié la tercera bolsa y miré el techo rojo de pétalos así como parte del patio y la calle donde vivía Jax, pensé que podría haber invertido en más pétalos.

Finalmente, cuando vi que había hecho un verdadero espectáculo y llamado la atención de todos en el barrio de clase media baja donde vivía el hombre, quedé satisfecho y ordené al piloto que me llevara de regreso a la base.

Mientras subía a la limusina, llamé al concesionario:

- ¡Hola! Soy Danna Dave.

- Oh, señora Dave. Espera un segundo, le paso la llamada a nuestro gerente.

- Date prisa, por favor, que no tengo tiempo que perder. – Puse los ojos en blanco, aburrido.

Tan pronto como el gerente respondió, dijo:

- Señorita Dave, ya lo hemos arreglado todo.

- ¿Casi dos minutos para que alguien te traiga el teléfono? – Me quedé incrédulo – ¿Alguna vez has oído hablar de una extensión o línea directa?

- Ah, sí... Lamento haberle hecho perder su valioso tiempo, señorita Dave, pero estamos arreglando la línea mediante extensiones. ¿Quieres mi celular para facilitar nuestra comunicación la próxima vez?

- ¿La próxima vez? – Me reí – ¿De verdad crees que haré negocios contigo la próxima vez? Dos minutos de mi tiempo esperando a que alguien cogiera el teléfono... Esto es lo más absurdo que he visto en mi vida.

- Le pido humildemente disculpas, señorita. Y aprovecho para asegurar que el coche ya ha sido entregado en la dirección solicitada, con el lazo grande y la tarjeta.

- ¿Quién lo recibió?

- Una mujer.

- ¿Le entregaron la tarjeta en mano?

- Sí, según lo solicitado.

- ¡Excelente!

- Pero tenemos un problema, señorita Dave...

- ¿Un problema? – Levanté una ceja, furiosa – No trabajo con problemas.

- La mujer nos dijo que recogiéramos el coche y lo trajéramos. Esto fue minutos después del parto.

Me reí, pensando que era perfecto. Entonces pregunté:

- Pero no aceptaron devoluciones, ¿verdad?

- Por supuesto que no, señorita Dave. El coche está pagado y les dejamos claro que si no lo querían debían deshacerse de él de otra manera, ya que no aceptamos devoluciones.

- ¡Excelente!

Terminé la llamada y recosté la cabeza en el asiento de cuero de la limusina, finalmente descansando un poco. Sorprendentemente mi profesor me había tomado mucho tiempo, sobre todo a la hora de conseguir flores frescas, alguien dispuesto a arrojar pétalos en un lugar tan urbanizado y concurrido, además de entregar el flamante auto, provocando un verdadero ruido en el lugar.

Todavía con los ojos cerrados, sonrió satisfecha. Si no fuera para armar un escándalo, no sería yo, Danna Dave.

Recordé lo que había escrito en la tarjeta regalo al lado del auto: " El regalo perfecto para decir gracias por la noche perfecta".

No había manera de que su esposa no lo creyera. Nadie renunciaría a un coche y haría llover del cielo pétalos de rosas rojas si no se hubiera acostado con el hombre perfecto, que les proporcionó el orgasmo más intenso y duradero de sus vidas.

Al menos así me imaginaba que sería correrme con Jax... Sintiendo mi cuerpo estremecerse en sus brazos mientras él todavía me follaba hasta que le rogué que parara, porque no podía soportar tantos orgasmos en tan poco tiempo.

Llamé al celular de Moana por la noche, pero no contestó. Por teléfono de casa le informaron que había salido con unos "amigos". ¿Qué quieres decir con que saliste con "amigos"? ¿No era yo su amiga?

Como no tuve clase con Jax esa noche, no fui a la universidad. No me importaban mucho las clases aburridas que me perdería, impartidas por profesores sin vanidad, intelectuales feos, ridículos y cuyas voces me aburrían.

Como a las ocho de la noche bajé al primer piso y le pregunté a una de las criadas:

- ¿Dónde está mi padre?

- El señor Dave no está en casa, señorita.

Me reí burlonamente:

- ¿Crees que no sé esto? ¿Te imaginas que soy ciego?

- No, señorita. Perdóname por la forma en que hablé... No quise ofenderte... Él simplemente... No ha llegado... Aún.

Respiré hondo, no estaba dispuesto a despedir a otro empleado esa semana. Mi día no había sido tan malo como para destrozarle la vida a una pobre que se creía capaz de trabajar en mi casa. Le daría otra oportunidad, ya que era una buena persona. Pero si volviera a tratarme como a un enfermo mental, ya que era obvio que sabía que mi padre no estaba en casa y si lo hubiera sabido, no me habría molestado en preguntar, desperdiciando mi preciosa voz.

Regresé a mi habitación y cogí mi móvil, marcándole directamente:

- Papá, ¿dónde estás?

- Hola Danna. Hoy voy a cenar con Nadine.

- ¿Qué quieres decir con que vas a cenar con Nadine?

- Sí, es cierto. La invité a cenar solo nosotros dos. ¿O vas a decir que querías cenar con nosotros? Sepa que tuve que salir de mi casa para cenar con mi novia porque ya no soporto la forma en que la trato.

- Trato a Nadine como merece ser tratada: pistolera, viuda.

- ¿ Estás en casa?

- ¿Cómo lo sabes?

- Rastreé tu teléfono.

- Eso es ilegal. No soy menor de edad. Puedo demandarte por invasión de la privacidad.

Él se rió:

- Bueno, hazlo. Y la próxima vez que llames a Nadine pistolera o viuda, tendré que tomar medidas más estrictas contigo.

- Estoy temblando de miedo.

- ¡ Y estoy cansado de ti!

- ¿Cómo puedes decir eso de tu propia hija? ¿Qué padre se cansa de hablar con su hija? Cualquier juez ganaría mi caso... Estoy profundamente afectado psicológicamente por la forma en que me trata.

- Cualquier juez se daría cuenta de que usted padece graves trastornos psicológicos que se niega a tratar. Sobre no ir a la universidad... ¿Quieres volver a reprobar este semestre?

- ¡ Esto me importa un carajo! – Terminé la llamada y tiré el teléfono.

            
            

COPYRIGHT(©) 2022