Después de llorar un rato, Valeria se secó las lágrimas y se fue al baño. Enseguida, miró su reflejo y, tras notar que todo su cuerpo, incluido su cuello, estaba lleno de rasguños, se sintió tan repugnante que se lavó el cuerpo una y otra vez con la finalidad de sentirse limpia. No obstante, ¡imposible borrar lo que ha sido tatuado en el alma!
Tras recordar que toda esta pesadilla se originó por culpa de Ashley, Valeria salió del hotel con prisa y se dirigió a la casa de su "amiga" para pedirle una explicación.
Al llegar, fue Julie Evans, madre de Ashley, quien abrió la puerta. La mujer vestía una camisa grande y tenía el cabello desordenado. Tan pronto como vio a Valeria, pareció sorprenderse mucho y dijo: "Valeria, ¿viniste por Ashley? Ella no está en casa ahora".
No obstante, Valeria no le creyó en absoluto. Enseguida, empujó a Julie y entró.
"¡Valeria! ¡Ashley no está aquí! ¡Regresa otro día, por favor!" gritó Julie mientras intentaba detenerla. Sin embargo, al mismo tiempo, miraba hacia el dormitorio.
Tras notar su mirada sospechosa, Valeria supuso que Ashley estaba escondida en el dormitorio, así que se dirigió hacia allí. No obstante, tan pronto como abrió la puerta, vio a un hombre con pecho descubierto sentado sobre la cama. En este momento, fue tanta la sorpresa que sus ojos se sacudieron e instintivamente, exclamó: "¿Papá?"
Al no poder creer lo que veía, Valeria se frotó los ojos, pero nuevamente vio la figura de su padre, Ronald Brown. Al instante, su mente se quedó en blanco y tartamudeó: "Papá... tú... ¿Qué haces aquí?"
"¡Fuera!" gritó Ronald furioso.
Valeria salió con la mente hecha un lío, pero luego de tantas incógnitas, se convenció de que la única explicación era que su padre tenía un romance con Julie. Enseguida, miró a esta última y apreció una sombra fría en sus ojos.
Con la finalidad de dejar la reputación de Valeria por los suelos, el plan original de Julie era conseguir que el proxeneta de la discoteca se acostara con Valeria. No obstante, dado que alguien entró corriendo y dejó inconsciente al hombre, no pasó nada entre ellos, así que no había forma de denigrarla. Sin embargo, ¡no podía quedarse con los brazos cruzados! En ese momento, se le ocurrió la idea de dejar al descubierto la relación entre Ronald y ella. De esta manera, Valeria se enojaría mucho y ella disfrutaría ver su cara enfadada. Además, este plan era perfecto para que su hija y ella estén más próximas a formar parte de la familia Brown.
"Valeria, no es lo que piensas. Tu padre y yo no tenemos nada... Simplemente..." dijo Julie fingiendo sentirse agraviada.
"Entonces, ¿por qué mi padre estaba en tu cama?" preguntó Valeria mirándola fijamente. Al final de cuentas, ella estaba segura de que esta desvergonzada había seducido a su padre. Evidentemente, ¡eran tal para cual con la hija! Una sedujo a su padre, mientras que la otra codiciaba a su prometido. Tras pensar en esto, continuó: "¡P*ta! ¡Tú y tu hija son unas descaradas!"
"Valeria, ¿qué dijiste? ¿Cómo te atreves a insultar a mi madre?" preguntó Ashley, mientras se acercaba como si nada.
Juego de ambición
-¿Cuánto tiempo? -escupe Katherine, con los ojos llenos de odio. -No importa -susurra Alexander, con el rostro tenso. -Por supuesto que importa -Lya se pone de pie, con el labio partido temblando, el corazón desbocado, sin importarle que está desnuda-. Porque estoy embarazada. El silencio cae como un trueno en la habitación, haciendo que el aire se vuelva más pesado. Alexander la mira fijamente, frunciendo el ceño, incapaz de creerlo. Katherine jadea, como si le hubieran arrancado el aire de los pulmones. -¿Qué acabas de decir? -murmura él con un tono frío. Lya coloca una mano temblorosa sobre su vientre. Era ahora o nunca. -Voy a tener un hijo tuyo... y es un niño. Katherine se queda inmóvil. Ella y Alexander nunca habían podido concebir. Y ahora, la otra mujer, la amante, le había dado lo único que siempre había deseado. -No... eso no es posible -susurra Katherine, negando la realidad, relajándose visiblemente en los brazos de su esposo. Pero la verdad está justo frente a ella, y el veneno en su mirada se vuelve letal. -Si crees que te dejaré quedártelo... estás equivocada -la voz de Katherine es letal-. No tendrás nada. Lya mira a Alexander, buscando algo... cualquier cosa... pero él solo aparta la mirada. -Vístete y lárgate -fue lo único que dijo.
LA CHICA
"La chica": ella era una habitante de la calle, analfabeta, sin apellidos, cabello rubio, ojos con evidente heterocromía, muy delgada, sucia, con la ropa raída y edad incierta. Un día fue atropellada por el auto super lujoso de un hombre serio, calculador, amargado y despiadado que tuvo que detener su camino porque había muchos testigos alrededor y con sus teléfonos listos grabando todo, así que le ordenó a su chofer que saliera y se hiciera cargo de lo que fuera que hubieran golpeado. Al tenerla en el automóvil el olor nauseabundo que desprendía ella, lo asqueaba, pero solo fue una primera impresión, el tiempo lo hará desearla, anhelarla y buscarla con desesperación.
De Prosti a CEO
Miriam Douglas es la universitaria con mayor índice académico de la facultad de administración de empresas, es una mujer inteligente, ejemplar y admiradas por todos sus compañeros. Nadie podría imaginarse que, por las noches, esta prodigio de los negocios ensucia su cuerpo para poder pagar los gastos de sus estudios. No, no es que le entre a las luchas en lodo; por las noches, nuestra protagonista se gana la vida como trabajadora sexual en uno de los burdeles VIP más visitado del sur de Londres. Miriam es la ranita más solicitada del burdel que lleva de nombre: La rana que baila. Hay algo particular en el servicio que ofrece Miriam, ya que, como valor agregado, ella brinda a sus clientes consejos de negocios mientras está en pleno apogeo. ¿Será que Miriam logrará salir de aquel mundo sin ser reconocida como una trabajadora sexual en el sector empresarial? Esta es una precuela de la novela: De Monja a Mafiosa
La Escritora Del Diablo
Daphne Ávalos, una escritora en bancarrota, es secuestrada por Gael Devereux, un multimillonario y atractivo CEO con un ego imponente. Él le ofrece un contrato en el que debe escribir su biografía a cambio de su libertad, pero las condiciones son tan absurdas que, a pesar del peligro, Daphne se niega. Sin embargo, pronto descubre que no tiene escape. Atrapada en su mansión, entre lujo, secretos y cámaras ocultas, Daphne luchará por mantener el control sobre su vida, mientras una peligrosa atracción con Gael empieza a desbordar los límites de su voluntad. Pero detrás de esa fachada se esconde un oscuro secreto, un mafioso peligroso que busca venganza y Daphne es la única que sabe lo que realmente sucedió aquella fatídica noche. Él necesita su memoria y su vida y la obtendrá bajo cualquier costo.
Mi vecino, mi tormento
Ellos eran vecinos, sus casas estaban pagadas. Emanuel era engreído y hasta déspota en su manera de actuar, y le molestaba bastante que su vecinita prescindiera de su saludo y que con su hermano fuera pura simpatía. Hasta que coincidieron una madrugada, a la salida de una discoteca y terminaron teniendo relaciones sexuales. Al día siguiente él la humilló apenas la vio, es que estaba acompañado por su futura esposa y evitó problemas. Solange sintió que el mundo se le venía abajo, la noche anterior le había entregado su virginidad y creyó que habían comenzado una relación. Las consecuencias llegaron al mes siguiente, cuando a Solange le faltó la regla, ella, con odio hacia Emanuel, por las humillaciones recibidas, nunca confesó de quién era el bebé. Sus padres estaban avergonzados de que su hija adolescente estuviera embarazada y la enviaron a Italia, con una tía que nunca pudo tener hijos. La vida cambió para Solange, porque fue recibida con verdadero cariño. Años después, al fallecer su tía, ella se convirtió en la dueña de un imperio económico. Sus caminos se cruzaron nuevamente al tener negocios en común, en dónde ella tenía el poder. La vida para Emanuel, en el plano personal, había cambiado, descubrió que su esposa lo había engañado, que el que creía su hijo, no lo era y que el interés de la mujer que tenía a su lado, era lo que regía su vida. Sin embargo, él seguía siendo el arrogante como siempre. La atracción que sentía por Solange era tan fuerte, que se convirtió en una obsesión, pero al no reconocerlo, solamente planeaba hacerla pasar malos ratos, desatando momentos desopilantes, porque Sol siempre lograba dar vuelta la situación y dejarlo mal parado. Hasta que descubrió que tenían un hijo en común y dejó de lado su infantil comportamiento, dando paso a un amor pocas veces visto.
Enamórate de mi
Una chica que trabaja como mesera confunde a el vocalista de una banda con un empleado de utilería y tiene una cita con ese chico entre la fiesta y la diversión, despierta al lado de el con un certificado de matrimonio. Después de eso tienen que fingir su matrimonio mientras ambos poco a poco se enamoran el uno del otro, pero sin saber los sentimientos que esconden ella anhela con el corazón el se enamore de ella