Capítulo 3 Sospechaba

Miranda y Genoveva se acercan con un sencillo vestido de color azul claro, así que Camila se levanta de mi lado a buscar en las cosas que han traído, telas y alcohol para limpiar las heridas que tengo en las manos, abdomen y piernas.

Me levanto de la cama para poder quitarme el camisón con el cual tape mi cuerpo desnudo antes de salir del cuarto de baño, pero me arrepiento al segundo; ya que, aunque muchas veces me han visto desnuda. En estos momentos no quiero que vean mi cuerpo, ya que no quiero que vean la marca de mi vientre, así que miro a mi nana y ella al instante entiende la mirada porque les pide a las chicas que salgan por un momento, Camila deja las cosas para limpiar las heridas en una pequeña mesa al lado de la cama.

Cuando ya están fuera y la puerta se ha cerrado de nuevo quito por completo el camisón quedando desnuda delante de mi nana.

Me siento en la cama mientras veo como ella toma las cosas y una silla se sienta comenzando a limpiar los golpes de mis piernas Cuando termina pasa a la de los brazos donde tengo una cortada que no ha sanado del todo; en ocasiones me quejo cuando pasa el trapo con alcohol por la herida abierta lo peor viene cuando pasa a la marca del estómago esa está horrible la destapa y pone mucho más cuidado.

- En unos días - empieza hablar - tendremos visitantes en el Palacio - sé que está tratando de distraerme.

- ¿Para qué vienen?

- Bueno, en una semana comienzan las presentaciones a sociedad - me dice.

- ¿Por qué lo adelantaron? - Esas presentaciones estaban previstas para el próximo mes.

- No lo sé - Habla - el rey lo decidió así y hace un tiempo empezó a mandar invitaciones.

Con algunos esclavos tenemos planeado una fuga desde hace meses, los barcos en los que escaparan ya se han pagado, solo se está esperando el momento adecuado; sin embargo, con este adelanto de planes por parte del rey, todo se puede ir por la borda y muchos de ellos morirán.

- Supongo que no voy a debutar.

- Supones mal.

- No soy virgen nana- le recuerdo por si le está fallando la memoria - y es muy posible que esté en cinta.

Ella suspira para de limpiar y mirarme a los ojos.

- Encontrarás a alguien que no le interese nada de eso.

- ¿Encontrar? - pregunto con sorna.

La mayoría de matrimonios son arreglados así que si me caso con alguien muy probable sea por medio de una dote muy grande.

- Los sueños de casarme por amor ya se han esfumado - sigo hablando.

- O probablemente no.

Me quedo callada es mejor no discutir con ella.

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Un rato después mi nana ya termino de limpiar mi vientre con hierbas medicinales. Me levanto poniéndome el chemise para que me tape de la cintura para abajo.

Voy así al espejo viendo aún mi cuerpo desnudo desde la cintura para arriba, pero prestándole más atención a una parte en general mi barriga ahí está esa marca que solamente es tapada por las hierbas que mi nana le puso.

La marca que ellos me hicieron, es la que le hacen a los esclavos cuando son recién comprados. Ahora comprendo su dolor. La que tengo es un ocho es la marca representativa que del reino Alasquia. Hicieron esa en general para que siempre que la vea recuerde que aunque sea una princesa siempre seré la hija de una ex esclava.

- Ya nadie me verá atractiva - me digo mirándome al espejo.

Subo la mirada mirando mis brazos dándome cuenta de que ya no podré usar vestidos con mangas cortas o tendré que usar guantes más largos.

- Eres hermosa estas marcas no te definen - sonríe mi nana acercándose a mí.

- No es cierto.

- si lo es.

- Nana se a lo que me enfrentó y van a hacer muchas críticas si alguien fuera de nuestra confianza se entera.

- Su Majestad se encargará si se oyen rumores mal intencionados - suspira - Además pensé que no te importaban las opiniones de los demás. Así que no te preocupes por eso.

- No es que en realidad no es lo que me preocupa - digo suspirando mirándola a través del espejo - y si estoy cinta que voy a hacer. No quería casarme tan temprano, solo... -sollozo.

- Eres más que un cuerpo bonito, eres inteligente sabrás utilizarla como un arma ya lo verás - asegura mirándome con el ceño fruncido.

Suspiro caminando hacia la cama para ponerme la parte de arriba de mi ropa interior mientras le respondo.

- De que me sirve en estos momentos la inteligencia si lo que necesito es un esposo y te aseguro que no lo conseguiré siendo inteligente - afirmó mientras las lágrimas salen de mis ojos.

Pero seamos realistas las cicatrices en mi cuerpo dañan todo para poder conseguir a un hombre -

- ¿sabes que tu padre podría conseguirte un esposo?

- prefiero buscar un esposo por mi propia cuenta - digo ignorando lo anterior que dijo y es que no quiero que mi padre consiga un esposo por mí quiero poder elegir aunque sea eso - ¿Crees que las marcas se borren a través de los años?

- que importan las marcas, tú eres hermosa sin ellas o con ellas, te vi crecer y sé perfectamente quien eres dentro de ti. Estas marcas solo son superficiales, estarán hay para siempre, pero cada vez que las veas te darás cuenta de lo fuerte que eres y que puedes superar cualquier cosa que se te presenté en la vida.

Eso que dice me saca una sonrisa por unos segundos.

- Ya las chicas pueden entrar - aviso - nana, gracias por siempre estar conmigo en las buenas y en las malas.

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Cuando las chicas ya me han ayudado a ponerme el vestido traen la comida que consiste en sopa y unas frutas. Empiezo a comer sin ánimos, es como si me fuera quedado sin paladar, ya que no siento ni un poco el sabor de la comida.

Después de un rato siento como todo lo que he comido sube por mi garganta así que me levanto tan rápido que todo me da vuelta y termino devolviendo todo lo que había comido ahí mismo en el piso.