Capítulo 2 ¿Fui un idiota ... No lo creo

En el salón, todo era silencio.

El soldado invernal entró al lugar en el momento justo en el que la

pelirroja espía se acercaba a Tony y le daba un fuerte golpe en la mejilla, el

cual hizo que trastabillara;

- ¡acabas de comportarte como un gran idiota, Stark! - gritó con enojo

cuando fue detenida por Clint antes de que le lanzara otro fuerte golpe

- ¿Qué pasa? - preguntó Bucky sin ser escuchado

- ¡solo le dije lo que pienso! ¡era hora de que alguien lo pusiera en

su lugar! - exclamó el castaño mayor aun enfadado - ¡¿acaso ustedes no están

hartos de su juego de mamá gallina?! ¡¿de qué les diga que hacer?!

-esa no fue la forma, Stark- soltó Clint irritado sin soltar a la

espía. Tony rio

- ¿y qué? ¿ahora correrá hasta su habitación y llorará como colegiala

solo por decirle la verdad? - preguntó el castaño mientras que Bucky se

acercaba y le sostenía del cuello de la camisa con fuerza

-diste en una de sus heridas más profundas, Stark y esto... no te lo

perdonare- dijo el de pelo largo, después de que Thor le comentó rápidamente lo

que sucedió, y salió enseguida del lugar, dejando de nuevo el silencio.

Mientras tanto, Steve había llegado lo mi rápido que pudo a su

habitación intentando contenerse. Al entrar, cerró la puerta y se dejó caer en

el suelo soltando todas aquellas lagrimas que venía conteniendo durante el

camino mientras que las palabras de su compañero seguían resonando en su cabeza

como un bucle.

El chico estaba en el piso con su cabeza sobre sus rodillas cuando

escuchó que tocaron a la puerta;

- ¡Punk! - escuchó la voz de Bucky afuera mientras tocaba - ¡déjame

entrar!

- ¡vete! - gritó el rubio desde dentro y con su voz quebrada - ¡quiero

estar solo!

- ¡te dije que nunca te dejaría solo, Stevie! ¡hasta el final de la línea!

¡déjame entrar ahora!

- ¡vete, Bucky!

- ¡botare tu puerta si no me abres, joder! ¡Stevie, abre! - el rubio se

puso de pie con dificultad y se acercó al pomo de la puerta, si algo bien

sabia, es que lo que Bucky decía lo cumplía y él no quería quedarse sin puerta,

el menos no hoy.

Suavemente abrió la puerta y fue cuando vio a su amigo castaño listo

para golpearla. Bucky lo vio e inmediatamente entró tomando al rubio entre sus

brazos mientras cerraba la puerta con el pie;

-Stevie...- susurró cuando sintió las lágrimas de su mejor amigo sobre su

hombro -Stevie... ¿Qué fue lo que paso exactamente? Llegue tarde y no escuche

-él desea que este muerto. - susurró el otro cuando jaló a su amigo

hasta la cama y sentándose en el borde se acomodó mejor continuando con sus lágrimas

- ¿Por qué duele tanto, Buck?

-has guardado mucho, Steve y además... sientes cosas por él. Te quebró...

-quiero morir, Bucky... quiero morir

-sshhh no digas eso- dijo el castaño en voz baja mientras que tocaba

suavemente el cabello de su amigo, a quien no había soltado de su abrazo.

Unas horas más tarde, nuevamente estaban tocando a la puerta del Capitán;

- ¡Steve! - se escuchó una voz femenina que hacía feliz al soldado

invernal

- ¡pasa! - dijo una voz desde dentro. La espía rusa entró en la

habitación y se acercó a la cama, donde Bucky estaba recostado a la parte de

arriba con un Steve con los ojos hinchados y completamente dormido sobre sus

piernas

- ¿Cómo esta? - preguntó la mujer acercándose y tocándole levemente los

cabellos

-agotado. Fue demasiado

- ¿sabes lo que sucedió?

-me contó lo que pudo... Stark... fue muy cruel y más hoy que no era un

buen día para Steve

-lo sé. - suspiró la pelirroja mientras veía a su amigo dormir -Venia a

ver cómo estaba y si iba a comer algo

-no creo que despierte hasta mañana. Cuando era niño y lloraba como lo

hizo ahora, dormía hasta el día siguiente

- ¿te traigo algo de comer a ti? - el castaño le dio una sonrisa

coqueta ante la pregunta

-me harías muy feliz, Romanoff- soltó el chico cuando esta le guiño el

ojo y salió por la puerta.

Por otro lado, Tony se encontraba en su taller revisando unos

documentos mientras que Bruce lo miraba con desaprobación desde el sillón del

lugar;

- ¿ya vas a decir algo o me juzgaras en silencio? - soltó el hombre de

hierro mirando a su compañero quien suspiró con fuerza

-creo que fuiste bastante grosero con el Capitán... él solo quería

arreglar tu falla con Fury. Ha estado llamando y siendo un dolor de muelas. -

dijo el científico acercándose y sentándose frente al otro -Además, - continuó

antes de que su amigo abrirá la boca -usaste un ataque bastante bajo diciéndole

todo eso. ¿Acaso sabes cómo era Steve antes de ser el Capitán América?

- ¡claro que lo sé! ¡papá no dejaba de hablar de eso! - soltó el otro

con enojo

-no hablo de eso, Tony... dijiste cosas muy hirientes, cosas de su

pasado. Sé que hay cosas que sabemos de él por el museo y eso, pero... ¿realmente

sabes cómo era Steve? ¿Cómo era su vida? Él sufrió mucho, Tony

-yo... - el genio se quedó callado y miró al otro -Fui un idiota ¿verdad?

Aunque tuve mi punto

-sí, si... piensa en lo que te dije- terminó el otro saliendo por la

puerta.

Tony se quedó solo, mirando hacia donde había salido su amigo algo

enfurruñado;

- ¡VIERNES! - soltó al aire

- ¿sí, señor Stark! - preguntó la agradable voz femenina de su I.A

- ¿Qué opinas de lo que sucedió?

-fue un poco duro con el Capitán Rogers...

-bien... quizá así se le bajen un poco los humos

-lo que usted diga, señor.

. . .

La mañana había llegado.

Bucky se levantó algo desorientado buscando a su compañero cuando

escuchó el sonido de la ducha. El castaño se estiró hasta donde pudo y cuando

se disponía a levantarse, vio como su rubio amigo salió del baño con solo una

toalla amarrada a su cintura;

-buenos días. - exclamó James cuando el otro asintió mientras buscaba y

sacaba un traje de su ropero - ¿Vas a salir?

-debo ir a verlos- susurró con voz ronca Steve comenzando a vestirse.

El soldado se puso de pie recordando lo que estaba pasando

-déjame y me alisto rápido. Iré contigo

-gracias, Buck

-vuelvo en diez- concluyó el castaño y salió por la puerta dejando a su

compañero arreglarse.

Cuando ya estuvieron listos, ambos comenzaron a bajar hasta la cocina

para tomar un poco de café antes de salir cuando encontraron a un pequeño

castaño con una taza de cereal sobre la isla de la cocina;

-Peter- soltó el Capitán acercándose rápidamente al menor quien le sonreía

de oreja a oreja

- ¡Cap! - dijo el menor levantando los brazos en un abrazo cuando el

mayor llegó frente a él

- ¿Qué estás haciendo aquí? Deberías estar descansando- le regañó el Capitán

aun sin soltar al menor

-tenía hambre y pues... estaba cansado de estar en la enfermería

-ayer estabas con respirador, mocoso- soltó el del brazo metálico acercándose

también y quitándole el cereal para poner a comérselo. El otro solo rio y fue

cuando deparó en el rostro triste del mayor y en sus ropas;

- ¿estás bien? - le preguntó al rubio quien bajó la cabeza para mirarlo

- ¿Por qué tus ojos están hinchados Cap? ¿es por lo de ayer? - terminó con

tristeza cuando el rubio apretó su abrazo

-no tiene importancia- respondió en voz baja

- ¿Por qué vistes así?

-tengo un compromiso, es todo. Saldremos y volveremos en la tarde

-bien- el niño no quiso decir más y metió más su cara en el pecho del

otro cuando escucharon a Wanda y Visión entrar en la cocina

- ¡buenos días! - saludó la pequeña bruja con una sonrisa cuando ingresó

-Capitán le estaba buscando para ver si podía entrenar conmigo

-en este momento voy de salida, pero cuando regrese con mucho gusto-

contestó Steve con media sonrisa

-perfecto, eso me sería de ayuda

- ¡buenos días a todos! - saludó desde la puerta el ingeniero de

cabello castaño acercándose rápidamente a su hijo, quien seguía abrazado al Capitán

-Peter, deberías estar en tu cuarto

-aquí estoy bien- comentó el menor sacando su cara del pecho del rubio

-vete ahora mismo a tu habitación, lo que necesites VIERNES me

informara y te lo enviare

-estoy bien, papá- refunfuñó el otro cuando el Capitán aflojo su agarre

y tomó al otro de los hombros para encararlo

-ve y descansa Pete, escucha a tu padre- dijo en voz baja manteniendo

una sonrisa triste

-pero... bien, solo porque me lo pides así. Pero cuando vuelvas, ven a mi

habitación por favor

-claro

- ¿no tienes cosas que hacer, Rogers? - soltó con sarna Tony

colocándose detrás de su hijo

-nos vemos- soltó el rubio y comenzó a caminar hacia la puerta seguido

de su amigo.

La tensión se sentía dentro de la cocina, Tony se estaba sirviendo su café

en silencio mientras que su hijo, con ayuda de Visión, se fue hacia su cuarto

- ¿Por qué hay tanta tensión? - preguntó Wanda con inocencia viendo al

genio con una dona en la boca

-es solo un malentendido- respondió el otro

-espero que se arregle, porque el equipo no puede fracturarse por una

disputa

-lo sé muy bien, brujita... por cierto... ¿has visto a Legolas y la espía?

-no. Creo que aún están durmiendo

-perfecto... iré a mi taller, nos vemos

-adiós, Stark- terminó la otra viendo como el mayor se iba por la

puerta.