Un sentimiento escondido
Cuando era una niña de once años mi papá fue promovido en su trabajo y nos mudamos a los Ángeles. Vivíamos cerca de una familia de italianos. Sus hijos mayores Paolo y Jan junto a sus padres Marita y Marco tenían un restaurante de comida italiana. A mis padres les gustaba mucho la pasta que ellos preparaban y a mi hermano y a mí, su pizza..
Eran personas ¡tan agradables! Que pronto se creo entre nosotros una gran amistad..
Mi hermano Frank y el hijo de Paolo, Harry se hicieron grandes amigos. Iban al mismo Instituto y jugaban los fines de semana al baloncesto. Luego pasaban al restaurante y lo acompañaba a casa para juntos hacer la tarea. Si me permiten ser honesta mi hermano Frank se aprovechaba de Harry y con la excusa de que le ayudara con su tarea, Harry terminaba haciéndola por Frank.
A Harry no le importaba, se sonreía al entender que mi sabiondo hermanito sacaba buenas calificaciones por él.
Frank tenía 17 y yo 14 cuando la primera novia de Harry apareció. Recuerdo que cuando la conocí sentí un nudo en mi estómago. Algo raro porque yo veía a Harry solo como un amigo ..
¿Por que me sentía así?
Lo esquive una y otra vez. Hasta que me aleje de él por completo..
Al llegar la navidad, como cada año había un regalo bajo mi arbol de navidad con mi nombre escrito, Harry no lo había olvidado.
Me pregunté ¿porque lo había hecho? Los regalos debían ser para su novia y no para mí. Además yo ya no le hablaba, desde que Elsa se convirtió en su novia, yo no quise saber más de él..
Sabía que no tenía razón y que estaba mal.. Pero no podía evitarlo..
Antes de Elsa, él y yo pasábamos mucho tiempo juntos.. sólo como amigos.. Reíamos, hablábamos de todo e incluso compartíamos música y juegos, no éramos como Frank y yo, sino más bien como.. No sé..
Era algo especial..
Pero desde que la linda y popular chica nueva llegó, Frank se la metió a Harry por los ojos, para poder salir con su amiguita, Laura..
Cumplí mis 15 años y yo soñaba que él fuera mi compañero en mi fiesta, en mi primer baile y.. Creo que fui una tonta y deje llevar muy lejos mis pensamientos..
Estuvo en mi fiesta, y su noviecita, la que nunca se despegaba de él también.. Mi hermano invitó a toda la familia de su novia y a la de Elsa también..
Harry y yo habíamos elegido la canción que bailariamos en mi fiesta de 15 años y hasta la habíamos practicado. Nos reíamos montones al imaginar lo tontos que nos veríamos y esa fue la razón por la que practicabamos como bailaríamos la canción, lo hacíamos muy a menudo.. Deje de oírla y la odie, cuando Elsa apareció..
Me invito a bailar en mi fiesta y la canción que íbamos a bailar, él pidió que la pusieran..
¡No! -- le respondí con enojo -- Baila con tu novia Harry.. Yo no quiero bailar contigo..
Me miró con tristeza y se fue. Pero no bailo esa canción con ella..
Ahora a mas de un mes de mi cumpleaños y siendo la mañana de navidad, estaba ante mí la caja de regalo con la letra de Harry en la tarjeta con mi nombre..
"Para mi Sophi"
Quise tirarlo, yo no era su Sophi, su novia era Elsa. Me levanté y lo miré. Yo estaba sola y me sentí más sola mirando su regalo y pensando en Harry..
Recordé que yo le había comprado su regalo hacía meses, como lo solía hacer lo ponía al pie del árbol que estaba en el restaurante.. Donde sus padre ponían sus regalos como tradición. En la pequeña salita que frecuentaban solo la familia..
Lo busqué y lo puse en mi bolso, tome mi bicicleta y me marché rumbo al restaurante. Como pensé allí estaba Paolo el padre de Harry, le pedí permiso para poner el regalo y me abrió la puerta como siempre, amable y sonriente..
Lo puse y me fui..
Cuando llegue a mi casa subí a mi cuarto y me recoste en mi cama.. Me sentí tan triste, que me quedé inmóvil y me estaba quedando dormida cuando el teléfono sonó..
¡Tenemos que hablar!
Perdón Harry, sino te gustó mi regalo, puedes dárselo a alguien.. Tirarlo a la basura o dáselo a Frank para que me lo regrese.. Y colgué..
Estaba dolida, molesta e indignada. Podía al menos decir: ¡Gracias Sophi! Aunque fuera mentira..
Volvió nuevamente mi teléfono a sonar.. - No Harry, no te dejaré herirme otra vez - dije y no le contesté, aunque me llamó cinco veces
Tomé mi teléfono y llame a mi tía: Tía Hanny, me invitas a pasar estos días contigo. Quiero ayudarte a repartir comida en los albergues. Además papá y mamá ya tienen planes y Frank y su novia también.. ¿Puedo?
¡Claro! Es más.. Voy de camino a visitar el primer albergue..
¿Pasas por mí?
Por supuesto.. Estaré ahí en 5 minutos..
Al escuchar a mi tía, corrí y preparé mi maleta. Salí de mi habitación y sin dejar que mis padres me dijeran un no, les di la noticia de que me quedaría con la tía Hanny y que volvería el próximo año..
Sonreí y les dije: Ahora podrán salir al teatro o de viaje sin preocuparse por mí o pueden pasarla con la familia de la novia de Frank.. ¡Yo no seré un mal tercio!
El auto de la tía llegó y sono el claxon para que yo saliera. Antes de irme, mire el regalo de Harry, lo tomé y le dije a mi hermano: Dáselo a Harry, se equivocó de árbol. Debió ponerlo en el de su novia..
Salí tan rápido de mi casa que nadie comprendió mi repentina decisión. Nadie se fijo en que habia llorando, ni tampoco en mi tristeza..
Me fui en el auto de mi tía y no quise mirar atrás..