Destinados a estar juntos

Era diciembre, el clima frío ya era notorio en las calles Tiffany White estaba hermosa, con su abrigo de piel hasta las rodillas y unas botas altas que hacían juego, su pelo largo y castaño recién arreglado y un maquillaje natural que destacaba perfectamente los hermosos rasgos de su rostro, estaba lista para ir a la actividad en conjunto con todas las iglesia que había en Consvegil, su ciudad natal.

Tiffany era una chica cristiana, pero que a su corta edad había vivido mucho y le habían destrozado el corazón a tal punto que no creía en hombres ni en el amor.

Salió de su casa preparada para encontrarse con sus amigas Emily y Brimal, con las cuales iría a la actividad.

Llegaron juntas y rápidamente se incorporaron en sus asientos, Tiffany notó que había un joven que la miraba constantemente, pero que su ceño era fruncido y no tenía sonrisa en su rostro, ella no le prestó mucha atención y siguió hablando con sus amigas hasta que iniciara la actividad.

La noche fue avanzando y con ella la actividad, llegar el momento de la ministración, todos los que estaban en sus asientos bajaron de las gradas y se asentaron debajo, el Evangelista de la noche se acercó a las 3 chicas y les declaró profecías, lo que provocó que ellas se tomaran de las manos y alabaran a Dios.

Cuando Tiffany abrió sus ojos aturdida y extasiada por un rico aroma varonil miró a todos lado y se encontró con la mirada de Adbiel Tactuck, el mismo joven que la había mirando al inicio de la actividad, al tenerlo ahora tan cerca y embriagada por su olor pensó "Wow que guapo es".