El finalizar nuestro matrimonio ya era mi decisión, y no estaba dispuesta a seguir soportando más, las humillaciones como las que se me han impuesto durante estos tres años, con mi mano temblorosa y conteniendo mis lágrimas firmo el documento que se encuentra sobre su escritorio y tomando una gran bocada de aire procedo a retirarme de la oficina, a punto de girar la perilla de la puerta escucho su voz fuerte
Alisha Müller!
A lo que giro mi cabeza e indico,
-Me disculpas ya no soy Müller!
Y procedo a salir rápidamente de allí, sentía que me asfixiaba y con el poco aire en mis pulmones salgo y tomo un taxi al cual indico que me lleve Währing. Ya eran aproximadamente las nueve de la noche cuando llegue a la casa dónde había estado los últimos tres años viviendo en un matrimonio por contrato que había aceptado por amor unilateral de mi parte.
Desciendo rápidamente cuando escucho un gran estruendo avisándome que comenzará a llover pronto, ingreso a la mansión olvidando por completo indicarle al taxi que me espere gran error solo que no quería estar hay mucho tiempo y encontrarme nuevamente con él.
Ingreso a la que fue mi habitación y no puedo evitar que por mi rostro se deslicen lágrimas, e indicándome -Ali no vale la pena ya no más –
procedo a secarlas y tomar mi maleta y salir de allí, hay un silencio sepulcral en toda la casa que me agobia dejo las llaves en la entrada y salgo para darme cuenta de que el Taxi ya no se encontraba.
-Mierda*- iba a tener que caminar un par de kilómetros para poder tomar otro y para mí desgracia mi celular no tenía batería, inicio mi camino cuando en mi rostro siento gotas caer fuertemente. Logro llegar a la avenida principal cuando a lo lejos visualizo las luces de un auto a lo que realizo la señal para que por favor se detenga, cuando de repente siento en mi espalda como me empujan con gran fuerza a la avenida.