Capítulo 5 San Cristóbal

Después de un largo día de la reunión y el papeleo logré descansar un poco antes de volver a Miraflores, siendo sábado por la mañana me levanté de la cama a ducharme, mientras me duchaba se me venían tantas ideas a la cabeza de que poder regalarle a Jasmine ya sabía que le gustaban los peluches.

Podía llevarle alguno y algunas rosas y hasta lograría conseguir un recuerdo de esta ciudad, de entre tantas ideas que tenía decidí salir en busca de algo que me llamara la atención y que fuese con los gustos de ella.

Mientras me vestía llame a Jasmine para darle los buenos días y preguntar cómo había pasado la noche pues ya eran las 9:00 de la mañana. Empecé a marcar su número.

Su teléfono sonaba. -Hola buenos días Jasmine ¿Qué tal pasaste la noche? ¿No te mordió Shiro?

-Hola buenos días Jhosha. Pase una buena noche y no, ella se ha portado muy cariñosa.

-Me alegra escuchar eso Jasmine, eso es bueno significa que le has caído bien.

-Si tú lo dices te creeré Jhosha, pero ya se ha vuelto mi amiga.

-Me parece estupendo eso ya Shiro cuenta con una nueva amiga entonces.

-Claro que sí, y ¿cuéntame cuando pretendes volver?

-Creo que comprare el tiquete para hoy en la tarde o mañana en la mañana voy a aprovechar para hacer unas cosas ya que estoy en esta ciudad, Jasmine ya pronto volveré.

-Está bien Jhosha vuelve pronto, te dejo debo ir a trabajar, cuídate mucho vale

-Gracias Jasmine, que te valla de lo mejor, no te preocupes volveré a salvo.

Luego de esa charla con Jasmine, me dispuse a salir a buscar que podía desayunar mientras caminaba por las calles de San Cristóbal, luego de unos minutos caminando y observando el bello paisaje de esta ciudad, logre encontrar un restaurante muy lindo por cierto con algo estilo de los 80 con una de esas viejas máquinas toca discos que adornaba le daba una esencia mágica al restaurante, y con atención muy buena.

Pedí algo sencillo y liviano para la mañana, mientras le preguntaba a una de las camareras sobre algún lugar donde se pueda comprar recuerdos, me dio algunos lugares para visitar que por suerte no estaban muy lejos.

Minutos después de haber desayunado salí y seguí caminado de verdad que esta ciudad da ganas de caminar para ser maravillado con sus estructuras y su paisaje, realmente que es una ciudad hermosa, logrando llegar a uno de los lugares de los cuales mencionaba la camarera encontré un museo de la ciudad.

Donde había tantas cosas antiguas y maravillosas, también contaba con una tienda de regalos donde podías adquirir algunos de los objetos que se mostraban al público, me llamo la atención un objeto o más bien una pequeña maqueta de la ciudad donde se podían ver todos los lugares de esta.

Por suerte encontré una artesanía donde se mostraba en una escala aún más pequeña la ciudad y con un letrero que decía "Bienvenidos a San Cristóbal" decidí llevarme uno pues había quedado maravillado, seguí con mi incursión en la ciudad y quedé asombrado.

Con un local donde te personalizaban el peluche que comprarías al gusto que quisieras y si estaba a su alcance, al echarle un vistazo me lleve un panda que tenía un pequeño letrero entre sus manos al cual se le podía escribir lo que quieras siempre y cuando alcanzara el espacio.

Primero quise ponerle algunos accesorios mientras pensaba en que podía escribirle, el panda llevaría un chaleco de color blanco, un sombrero de color negro, mientras que en el letrero llevaría escrito "Jasmine eres preciosa".

Ya con este detalle en mis manos me dirigía a la terminal de transporte a comprar mi tiquete para volver a Miraflores, me encontré con un señor artesano tenía sus creaciones en una tela en el piso exhibiéndolas para que pudieran apreciarlas y comprarlas si a las personas les gustaban algunas de estas, me llamaron la atención dos objetos los cuales eran un par de pulseras negras con una piedra roja en la mitad, y un par de collares de cuarzo blanco.

Mientras los compraba este señor llamado Samuel me explicaba lo que significa cada cuarzo y que las piedras en las pulseras eran cuarzo rojo que se compone de unas propiedades curativas tanto físicas y mentales y que por su color rojo está relacionado con la fuerza, la pasión, el amor.

Quería volver antes a Miraflores ya que quería pasar tiempo con Jasmine y quería conocerla más, debido a que cuando estaba a su lado sentía una paz inmensa y todo era tan mágico, por suerte había un autobús que salía a las a las 11:00 de la mañana, me quedaba sin tiempo, pero me daba la oportunidad de volver al hotel recoger mis cosas y poder cancelar el tiempo que había estado en el hotel.

Después de haber terminado de recoger y pagar mi estancia en el hotel y me dirigí hacia la terminal de transporte ya en ella llame a Jasmine quería darle una sorpresa, no quería decirle que llegaría el mismo sábado.

Ya traía con que sorprenderla, también llevaba algunos juguetes para Shiro para que no se sintiera celosa, pretendía llegar y poder darle una cena algo especial y poder entregarle sus recuerdos de verdad que mis ojos se iluminaban cuando pensaba en ella, en el camino no paraba de pensar en cómo llegar a sorprenderla.