Capítulo 4 CAPITULO 3

¿PORQUE YO? 

han pasado  2 horas  el camino cada vez se volvia mas oscuro, el silencio dentro de la limusina se apodera de mis oídos cierro mis ojos dejando salir mis lágrimas, tenía unas ganas de llorar  me sentía tan impontente en ni hacer nada por salvar mi vida, si tan solo hubiera sido diferente, la limusina se detiene  se acerca 2 hombre abriendo la puerta para tomarme de las muñecas. 

-señor whua por seguridad debemos  atarle los ojos a la chica. 

- ella no es ninguna amenaza, podemos saltar ese anillo de contro chicos no quiero que la señorita se sienta incómoda-  

-¡SEÑOR WHUA SE UN ORDEN DEL SEÑOR ZHAO!   

 muerdo mi labio algo fuerte para luego empuñar mis manos - mira señores, estoy casada que todos quieran pasar sobre mí y te exijo imbécil que no te atrevas a tocarme ningún cabello- miró al señor whua- adicional este señor él me está observando en todo el viaje aun así soy una amenaza, montón de basura me tienen harta y dile ese viejo asqueroso que lo detesto zhao es una basura 

-¡QUIÉN CREES QUE ERES PARA FALTARLE AL RESPETO AL GRAN SEÑOR ZHAO! 

veo que sacan sus armas apuntando haciendo que mi corazón se saliera, me quedo nerviosa mirándolos fijamente hasta que el señor mayordomo paso, mi mano por mi brazo para exclamar 

-bajen sus armas ella no es ninguna amenaza, ella es la protegida del señor zhao  es solo una chica joven por favor vamos a ponernos en marcha, unas de reglas es que no podemos hablar con esta señorita y mucho menos verla fijamente tal vez ella sea la futura mujer de nuestro señor mathew, señorita cordialmente te pido que no hagas ruido ya muy pronto llegaremos  

 asiento para voltear mi rostro hacia enfrente mirando aquel camino que era un camino rural, un camino lleno de tanto peligro si fuera por ellos me matan y me dejan tirada, si no fuera por este anciano. 

1 hora después  

suspiro hondo al ver ya no podía ver nada del camino, hasta que veo unas luces a lo largo era la entrada de la mansión  al paso que íbamos entrado salían miles de hombre de cada esquina con armas en las manos, incluso tenían perros grandes y agresivos que no dejaban de latir hasta que la limusina empieza bajar la velocidad lentamente hasta detenerse 2 hombres abren la puerta, el señor que estaba adentro de la limusina se baja para luego dar la vuelta - 

señorita baje de la limusina por favor- 

asiento con la boca abierta mirando alrededor  sorprendida  para así bajarme de la limusina, me pongo la capucha de la chaqueta para  taparme no quería que nadie me viera, el anciano mayordomo se acerca y me da una tarjeta 

-señorita ellos la llevaran a ver al señor mathew jungs  por favor ve con ellos y evite problemas, si sucede algo no dudes en mostrar la tarjeta-  

ruedo mis ojos tomando la tarjeta dejándome llevar por estos hombres al entrar a la mansión no puedo dejar de ver lo lujosa que es, uno de esos hombre me habla de manera estricta. 

- sube las escaleras a mano derecha hay va estar el señor jungs que te está esperando 

 suspiro enojada- con que hay esta ese idiota- al llegar a la habitación, toco la puerta una voz muy grave y escalofriante exclama entre el cuarto  

 – pasa, quítate los zapatos antes de entrar odio el ruido- dice aquella voz que salía de la habitación  

suelto una risa para negar varias veces, apoco crees que voy hacer eso maldito enfermo- tiro  la manilla de la habitación, entrando de un solo golpe mis ojos se agrandaron al ver un tipo, grande musculoso de espalda mirando hacia el balcón, me doy la vuelta para alzar la voz- ¡SI ESTABAS DENUDO PARA QUE ME DIJISTE QUE PASARA IDIOTA- sentía mis mejillas  calurosas- en mi mente solo pensaba es la primera vez que veo alguien sin camisa, y tenía que ser este idiota - ¡MALDITASEA! al decir esto escuchó una fuerte risa sale de sus labios ante el silencio de la habitación escuchó unos pasos detrás de mí. 

- tengo que admitirlo cada día te ves más hermosa, pero tienes unos pésimos modales que marginal  

 -¿marginal? acaso soy la tipa acosadora que está desnuda por la casa invitado a entrar gente- niego varias veces- poco hombre- al terminar la frase siento como este mismo quita mi chaqueta de un solo jalón para susurrar en mi oreja 

- quiero que te des la vuelta ahora mismo -  

al escuchar sus palabras que salían de una voz tan egocéntrica y fría - suspiro hondo- dándome la vuelta alzo mi mirada encontrándome con la de él, su mirada era tan potente  en mi mente podía procesar este infeliz es un hijo de su madre, tenía miedo no puedo negarlo pero tampoco quería que él me viera con terror, alzo mi ceja para verlo fijamente- mira, espero que sea la última vez que trates de tocarme o quitarme algo imbécil- paso mi mano por mi cobro con asco- no sabemos qué tanta suciedad puedas tener en tus manos, al terminar la frase siento como toma mi mano con un agarre fuerte  

- ¿quién crees que eres? puedes venir a dar órdenes -  la miro sacando un leve sonrisa - yo puedo hacer contigo lo que yo quiera, tu vida está en mis manos entiende eso, estupida  si quiero matarte lo puedo hacer - suelto sus manos empujándola hacia la cama- no te atrevas hablarme de esa forma nuevamente  

al caer sobre la cama me levanto, lo mas rápido posible, lo miró fijamente mientras que suspiro hondo  para así tomar valentía, gritándole-  ¡PREFIERO MORIR QUE ESTAR CONTIGO!-  miro de reojo la puerta mi mente decía sal corriendo pero mi corazon solo sentía miedo escucho una risa escandalosa era el maldito loco  

-que miedo tengo de ti niñita- muevo mi cabeza a los costados- usualmente las mujerzuelas que compraron para mi son sumisas y obedientes, es más hasta se rodilla al verme con solo que yo las elija pero tu haces lo contrario es tan fascinante - me acerco hacia ella para pasar mi mano por su rostro- tu belleza es básica tengo mejores candidatas, pero te empeñas en algo  veo que quieres tu libertad pero  jamás la tendrás para ti   

al escucharlo lo empujó para salir corriendo al  terminar  de bajar las escaleras, puedo notar 4 hombres en la puerta de salida- suspiro hondo- carajo, ahora por dónde salgo de esta mierda- miro como unas chicas de servicio. se van por la parte de atrás, - pues claro tan ridícula obvio que debe haber otra salida- camino detrás de esas chicas, saliendo por la parte trasera  pero al salir siento como alguien toma mi brazo con fuerza era él. 

- eres muy mala escapando de verdad ¿tienes cerebro? - me acerco jalandola del brazo - mira princesa en este lugar hay cámaras-  lo digo mientras que susurro  en su oreja- aparte como ibas hacer algo tan estupido como eso, estas en mi mansión llena de los mejores asesinos  niñita eres estupida. 

me suelto de su agarre para ver a todos los lados gritando desesperada -¡DÉJAME SALIR!.- corro hacia una  puerta que estaba en un costado, pero esta no  quería abrir entre mi desesperación pateó la puerta - me quiero largar de acá no entiendes eso, no me interesa quien seas  chino asqueroso al voltearme el me toma por mi cuello pegandome a la puerta sus ojos era más oscuro que antes   

 -te enseñare cuidar esa hermosa boca que tienes-  aprieto más el agarre  frunciendo el ceño -  eres tan estúpida, te dije que cuidara tus palabras y no entiendes, no quiero que me veas molesto eso sería muy mal para ti, por cierto  no soy chino mujer ignorante 

 como este toma mi cuello de manera brusca sentía, que no podía respirar entre jadeos susurro- suéltame que no puedo respirar- trato de soltarme pero mis fuerzas eran débiles, él era muy fuerte  -lo miró fijamente mientras que mis lágrimas salían - por favor suéltame, ese momento mis plegarias fueron escuchadas me soltó cayendo al suelo pasando mis manos en mi cuello diciendo en voz alta-¡ERES UN ANIMAL! 

  será mejor que no me hables más de esa forma- lo digo mientras acaricio su cabello- no te quiero lastimar, pero debes entender quién es el que manda en este lugar,  tu no eres nada. golpeó su cabeza varias veces- usa tu cerebro niñita estupida- tomo su rostro mirándola fijamente puedo notar los moretones y las marcas sobre su cuello, debido como ella es blanca se sobresalen los  moretones y las marcas-  por tu culpa lastime  mi propia mercancía, eres tu en este momento ya me perteneces, te quiero a ti felicidades ganaste- saco de mi bolsillo una  fotografía de sus padres- mira princesa  tus papás  estarán felices de nuestra  boda  creo que me debes un gracias por mantenerlos con  vida, aunque  tengo el poder de matarlos en caso que te escapes o algas algo que no esté permitido. 

al escuchar cada palabra de él sentía fuerte, dolor en mi pecho pero en tanta porqueria sentí felicidad al saber que mis papás están vivos pero él los puede lastimar- bajo la mirada y puedo notar que este tiene un revólver en su cintura tal vez esta era mi señal de poder- paso mi mano por sus pies tal cual como lo hacía la puta de mi tia subiendo mis manos a sus piernas exclamando con  una voz suave- tienes razón señor mathew, te juro seré una buena esposa- al decir esto extiendo mi mano  quitándole rápidamente  el revólver para así  apuntarlo mientras que me levanto del suelo-déjame en paz y sabes te odio con todo mi corazón,por tu culpa no crecí con mis padres y nunca pude tener una juventud normal por tu culpa, así que déjame por favor yo solo quiero ser feliz  

 -  la miro riendo mientras que me abro de brazos - adelante dispararme total eso nunca pasara, eres una malagradecida deje a los traidores vivos y así me pagas - me acercó unos pasos a ella riendo- tu nunca te iras porque eres tú eres mi maldita propiedad, eres buena actuando  por un momento pense que habias entendido bien el mensaje, pero  eres un arma de doble filo, las tipas como tu son las primeras que terminan muertas. 

lo miró sin hacer ningún gesto - no soy una cosa, además soy muy joven para casarme con alguien que solo conocí hoy, me tienen contra mi voluntad yo no quiero nada de ti, señor mathew jamás me gustaras solo puedo sentir asco de personas como tu, porque me quieres si tienes más chicas que darían todo por ti. Podía sentir la mirada de ese hobre tan fuerte y imponente que me daba miedo con solo verlo. 

- paso mis dedos sobre mis labios- ¡QUE TE DIJE MALDITA SEA!- cierro mis ojos sonriendo- me tienes  que respetar   además cumplirás 18 años, en 7 días ya eres una adulta actúa bien tu papel, sabes tú  no eres una cosa porque serás mi mujer, eso quiere decir que tienes propiedad y debes obedecerme, si tengo mejores opciones que tu solo que ya puse mi mirada en ti,  nadie hará que cambie de parecer igual puedo tener las mujeres que quiera, no seas ridícula a poco creíste que me quedaría solo contigo, sobre el asco que siente por mi tranquila que yo te lo quito a las buenas o a las malas tú decides.- chocó mis manos mirándola- ya me estás haciendo enojar, baja eso ya maldita sea unas de las cosas que más detesto es que me apunten y no me maten, me acerco mirándola fijamente-  no seas ridícula no serias capaz de hacerme daño, no eres una asesina