_ Mierda - murmura - ¡Hey!, ¿amigo me puedes prestar tu gorra? - le pregunta al hombre de su lado, este lo mira raro, luego asiente y se lo da - Gracias -
Luego de eso trata de salir por la entrada pero un policía viene hacía el haciendo que este de la vuelta de manera disimulada y empezó a caminar para el centro cuando siente que alguien lo agarra del antebrazo y lo acerca quedando cara a cara.
_ Oye, ¿puedes ayudarme?, solo tienes que simular que nos estamos besando y ya - susurra cerca de sus labios, el se aleja un poco para ver su cara y se sorprende al ver que es la misma chica que estaba mirando hace rato.
_ No pued- calla al ser interrumpido por una voz grave haciendo que estos se tensaran al ver que era un policía.
_ Disculpen, solo quiero hacerles una pregunta - dijo serio, Ethan se quedó mirando a la chica sin darse vuelta, segundos después siente los labios de la chica sobre los suyos.
El beso fue tosco pero luego fue suavisando al sentir la calidez de sus lenguas haciendo una pequeña guerra, Ethan agarra las caderas de la chica para acercarla mas a el y la chica entrelaza sus dedos al cabello de este para profundizar el beso, beso que interrumpido por el estúpido oficial.
_ Em.. saben que iré a preguntar por otro lado - dijo incómodo por lo que acaba de pasar cosa que a los dos chicos no le importó.
El oficial se fue y estos soltaron un gran suspiro entrecortado para luego mirarse a los ojos, iban a seguir de no ser porque escucharon un grito que alertó a estos dos.
_ ¡Jefe!, ¡lo encontramos! - gritó señalandonos gesto que causó que todos miraran hacía nosotros.
_ Mierda - murmuraron al unísono para luego echarse a correr como si su vida dependiera de eso, que literalmente es así, si los llegan a atrapar los encerrarian de por vida.
Los oficiales al ver que comenzaron a correr lo echaron a seguir mientras se separaban, los dos chicos se separaron llendo por caminos opuestos.
Mientras Ethan corria por una calle vacía y sin luces mas que las que hay en algunas casas, la chica corria tratando de perder a los oficiales que la perseguían, así metiendose en un callejón sin salida haciendo que se alarmara pero luego se relajó al ver que los oficiales siguieron de largo.
La chica estaba descansando sobre sus rodillas hasta que escuchó el ruido de una bolsa moverse en ese oscuro y frio callejón, fue a revisar que era a paso lento, pero pegó un saltito cuando sintió una mano en su hombro.
_ ¡Mierda!, ¿¡pero que..- el chico la interrumpió poniendole un dedo en sus labios.
_ Tranquila, soy yo el del bar - habló y esta se calmó pero luego volvió a alarmarse al ver que al chico le sangraba su hombro.
_ ¿Pero que te pasó? - preguntó alterada.
_ Solo me roso un poco mucho una bala - ríe - ¿Como te llamas?, ¿por que empezaste a correr si era ami a quien buscaban? - habló serio .
_ Primero soy Emily Hunter, segundo..¡¿como que te buscan a vos?!, ¡¿corrí como siete cuadras para nada?! - grita alterada al enterarse que corrió por nada por que si, si no hubiese corrido ahora mismo estaría acostandose con unos de esos striper sexys, pero no, terminó en un estúpido callejón con un fugitivo además de ella y lo peor es que tiene hambre.
_ Ya calmate loca, no es mi culpa - Emily lo mira feo - bueno si es mi culpa pero yo que iba a saber que me iban a encontrar tan fácil, una pregunta, ¿porque te sigue la policía? - pregunta intrigado.
_ Por que... no te interesa, ahora vamos a encontrar un lugar digno para quedarnos a dormir ahí, comer y curarte esa herida para que no se te infecte, no vaya ser que te tenga que llevar al estúpido hospital por que un idiota como tú no pudo esquivar una bala - dijo para luego comenzar a caminar a la salida del callejón.
_ Oye, niña loca, estoy seguro que tu ni pegar sabes y solo te están persiguiendo por que robaste algo de tu vecina - dice riendo como loco pero luego para por unos quejidos que se escuchaban al final del callejón.
_ Oye, ve a fijarte que es - manda mirando de donde proviene el ruido.
_ Estas loca, mira si me violan, debe ser un gato, solo vamonos - susurró para luego darse vuelta.
_ Aish, que marica, iré yo - dijo para después ir a paso lento hasta este y divisar un chico apestoso y con la ropa echa un desastre.
_ A-ayudenme... por favor - murmuró casi inaudible mientras soltaba leves jadeos de dolor.
Mierda