Capítulo 4 El prestigio de la abuela

Belinda se dio la vuelta para evitar los pedazos de porcelana que Arvin le arrojó, y rápidamente pateó a Arvin varias veces tan pronto como se levantó.

Al no tener tiempo para esquivar las patadas de Belinda, Arvin tropezó varios pasos hacia atrás. Pero fue lo suficientemente rápido como para agarrar la pierna oscilante de Belinda y tirar de ella con gran fuerza. La larga pierna de Belinda se enderezó en el aire. Ella hizo todo lo posible para recuperarlo, pero falló.

Arvin sonrió fríamente y empujó a Belinda con gran fuerza. Sin duda, Belinda no pudo ponerse de pie y cayó pesadamente después de varios tropiezos. Cuando Belinda se dio vuelta y se puso de pie nuevamente, Arvin la empujó hacia la esquina de la barra con un pedazo de porcelana puntiaguda en la mano.

Arvin se presionó sobre el cuerpo de Belinda con un arma afilada. Como resultado, Belinda no pudo hacer nada más que rendirse, parada inmóvil.

Sin embargo, ella seguía mirando a Arvin enojada.

Los dos mantuvieron una distancia muy cercana, manteniendo posturas íntimas como dos amantes calientes. Arvin presionó su rostro contra el de Belinda, sus labios casi besando el lóbulo de la oreja de Belinda y preguntó con voz profunda: "¿Qué tal ahora? ¿Listo para rendirse?

Belinda apretó los dientes y dijo: "No".

Tan pronto como Arvin terminó sus palabras, Belinda levantó una de sus piernas para patearlo. Pero Arvin reaccionó rápidamente y empujó su pierna hacia atrás con su rodilla. Luego metió una de sus piernas entre las piernas de Belinda, la reprimió y se burló, "¿Todavía quieres pelear?"

Cuando Belinda abrió la boca y estaba a punto de decir algo, apareció un hombre detrás de Arvin.

Belinda trató de alejarse de Arvin, avergonzada por su situación actual. Pero ese hombre ni siquiera levantó los ojos para mirarlos y dijo con calma: "Sr. Xue ".

Arvin soltó su cuerpo y se dio la vuelta bruscamente. Levantó las cejas y preguntó: "¿Está la abuela aquí?"

Belinda aprovechó esta oportunidad y rápidamente retiró su cuerpo de Arvin. Rápidamente se arregló la ropa como si nada hubiera pasado.

"No, ella no está aquí. Pero madame. Xue me pidió que te llevara a casa. "

Mirándose, Arvin y Belinda tiraron los pedazos y dijeron: "vámonos".

Pero no iban a la vieja casa de Madame Xue para ver a su abuela. El auto dio algunas vueltas y pronto llegó a la mansión donde vivía la pareja de recién casados. También era su casa de bodas.

Belinda sabía que podría ser porque su abuela vino a verlos y sabía que no estaban allí. Ella envió a alguien para preguntar sobre ellos y fue directamente al bar a buscarlos.

Y, por supuesto, su pelea en el bar también debe haberse extendido a los oídos de la abuela.

Como Belinda había esperado, vio a la abuela sentada allí con una cara enojada.

Con una cara tranquila, Arvin se quitó la chaqueta, se aflojó la corbata, se acercó y gritó: "Abuela".

"¡No me llames abuela!"

Mandame Xue golpeó el piso con su bastón y lo regañó, "¿Te preocupas por mí?"

No queriendo molestar a Madame Xue, Belinda también se acercó a ella y le dijo suavemente: "Abuela, déjame explicarte".

Mirando a Belinda, madame. Xue se suavizó. Inmediatamente sostuvo su mano y la palmeó amorosamente como para consolarla. Luego se volvió hacia Arvin y le gritó fríamente: "Acabas de casarte. ¿Cómo puedes golpear a tu esposa en el bar? ¿No te sientes avergonzado de ti mismo? "

Arvin estaba tan enojado que respondió de inmediato: "Abuela, es esta mujer la que bailó descaradamente en un bar. ¡Ella había destruido la reputación de la familia Xue! "

"¿Hay algo malo en bailar?"

Belinda se puso de pie de inmediato y se enfrentó a Arvin: "Desde que nos casamos por estos días, me hiciste la vista gorda". Puedo bailar para ganarme la vida. No te robo nada. ¿Crees que te está molestando?

Antes de que Arvin pudiera replicar, se volvió hacia su abuela y le dijo: "Abuela, no quiero ocultarte nada ahora. Arvin me ha obligado a firmar el acuerdo de divorcio con el pretexto de nuestro desacuerdo. Nuestro matrimonio ha sido una mentira por mucho tiempo "

"¡Qué!"

Al escuchar esto, Mandame Xue se enfureció, golpeó la mesa y se enfrentó a Arvin: "¡Arvin! Será mejor que expliques esto ahora mismo. ¿Realmente firmaste un acuerdo de divorcio? "

"YO..."

Aunque Arvin había mencionado sobre divorciarse de Belinda, no pudo tomar la decisión final dada la presencia de su abuela. En este momento, cuando Belinda lo calumnió deliberadamente con su abuela, Arvin estaba motivado. '¿Por qué no darle una oportunidad? Si le dijera a la abuela que habíamos firmado el acuerdo, ¿cómo reaccionaría la abuela?

Después de pensarlo en su mente, Arvin dijo: "Abuela, ella y yo no estamos hechos el uno para el otro, así que nos hemos divorciado".

"¡Bastardo!"

Madame Xue nunca había esperado descubrir su divorcio en esta visita. Con un rubor de rabia, se cayó sobre el sofá, casi sin aliento.

"¡Abuela!"

Arvin y Belinda gritaron al mismo tiempo y levantaron a su abuela para buscar la medicina.

Después de descansar un rato, se sintió mucho mejor. Apartó la píldora y dijo con voz débil y cruel: "Rompe el acuerdo de divorcio. De lo contrario, ya no tomaré medicamentos". "

Al ver que la cara de su abuela se volvía púrpura por la tristeza, Arvin sintió pena por ella. Prometió de inmediato: "No te preocupes, abuela. No me divorciaré de Belinda ".

Después de decir eso, echó otro vistazo a Belinda.

Belinda entendió su implicación y prometió: "Sí, eso es cierto. Abuela, no te enfades. Estábamos discutiendo entre nosotros. Nos llevaremos bien unos con otros en el futuro. Conseguir el divorcio fue una tontería impulsiva ".

Mandame Xue respiró con dificultad y juntó las manos.

Ella dijo con voz suave: "No digas tonterías nunca más. Ustedes dos son buenos niños. ¿Por qué no pueden vivir juntos? De ahora en adelante, debes cuidarte, ¿entiendes? "

Arvin no podría preocuparse menos por sus palabras. Él asintió con la cabeza repetidamente y dijo: "Lo sé, abuela. Por favor toma esta pastilla. Te hará sentir mejor ".

"Sí, tiene usted razón."

Tan pronto como Belinda terminó sus palabras, se levantó y fue a la cocina a traer una taza de agua tibia. "Abuela, vamos, toma este medicamento".

Habían persuadido a la abuela durante mucho tiempo y le prometieron que todo estaría bien. Luego tomó la medicina, se recostó en el sofá por un rato y dijo que era tarde en la noche, así que debería volver a casa.

Los dos no se atrevieron a detenerla. Después de todo, señora. Xue también era una persona poderosa.

Cuando la escoltaron hasta el auto, Mandame. Xue volvió a tomar las manos de Belinda y las palmeó ligeramente, "Belinda, deberías escucharme. El bar está muy sucio para una señorita. ¿Podrías prometerme que no volveré allí? ¿Qué pasa si te lastimas? Estoy en lo cierto? "

Belinda miró incómoda a la abuela preocupada y finalmente asintió, "Lo sé, abuela. No iré de nuevo ".

Arvin se burló.

"Y tú, no te rías de ella. Si te atreves a tratar a Belinda mal y le das el hombro frío en el futuro, te desollaré vivo ". ella amenazó a Arvin, sus ojos radiantes de ira.

Cada perro tiene su día. Belinda lo miró complaciente.

No fue sino hasta las 11 de la noche que la mansión finalmente se quedó en silencio.

Se quedaron en la sala mirándose el uno al otro durante mucho tiempo y ninguno de los dos quería comenzar a hablar primero.

Después de que la vergonzosa quietud duró un tiempo, Belinda dijo: "Oye, ¿podemos vivir en paz por un período de tiempo en el futuro?"

Arvin respondió: "Depende de usted".

Luego se dio la vuelta y subió las escaleras.

Belinda hizo una mueca detrás de él. "Qué hipócrita".