Capítulo 5 Todavía me debes dos millones

Amy estaba muy entusiasmada con este tipo de escena de guerra. Ella sostuvo la cámara y tomó las fotos.

"Bastardo, no esperaba que todavía me persigas después de dejarte escapar la última vez".

El hombre con collar de oro quedó deslumbrado por la linterna frente a la cámara. Entonces, levantó la mano para cubrirla inconscientemente. Cuando el hombre con collar de oro se dio la vuelta, descubrió que el periodista de pie junto a Amy fue quien lo siguió a la corte imperial y le tomó una foto con ropa de hombre la última vez. El hombre con collar de oro estaba furioso y aprovechó la oportunidad para acercarse a Joy.

Sabiendo que algo malo iba a suceder, Joy inmediatamente fue a tirar de Amy.

"Darse prisa. Es demasiado tarde."

"¿Te quieres marchar? ¡Es demasiado tarde!"

En este momento, se colocó una daga en el cuello de Joy.

Joy levantó la cabeza y vio la cara torcida del hombre con collar de oro.

"¡Cálmese! ¡Cálmese!"

"¡Maldición! Si no me hubieras seguido todo el tiempo, ¿cómo podría suceder que la policía inútil conozca este lugar? Siempre te has puesto en mi contra, ¡debo matarte ahora mismo!

Joy estaba realmente asustada. En este momento, el hombre con collar de oro se estaba quedando sin sus caminos. Joy creía que podía hacer cualquier cosa.

Bastante seguro.

Su mano sosteniendo la daga ligeramente inclinada.

"¡Explosión!"! Con un fuerte sonido, asustada, Joy cerró los ojos de inmediato.

Sin embargo, después de un disparo, el dolor esperado no llegó. Joy abrió los ojos y vio un gran agujero de sangre en medio de las cejas del hombre, que estaba parado frente a ella.

El hombre con collar de oro se detuvo en el suelo, revelando a Jimmy que estaba parado detrás de él.

En este momento, la policía también terminó la pelea y arrestó a todos los sospechosos.

Al ver que Jimmy llevaba un chubasquero negro y un suéter gris, las frías cejas de Joy eran asesinas, y el arma en su mano todavía humeaba. Echó un vistazo a Joy y devolvió el arma a la policía, Bill, el director del equipo de control de drogas.

Bill guardó su arma y saludó a Jimmy.

"Señor. Ve, gracias por tu ayuda con los guardias del Comandante Go ".

Jimmy apartó la vista del rostro de Joy y dijo con una sonrisa: "No digas eso. Es responsabilidad de todos protegerse mutuamente. Todos han estado trabajando duro hoy. Si no le importa, he preparado una cena en la corte imperial. Espero que tú y Joy puedan venir ".

Jimmy dijo cortésmente. ¿Cómo podría negarse Bill?

"Pero yo..."

Cuando Joy estaba a punto de negarse, Bill puso su brazo alrededor del hombro de Joy y la palmeó a un lado. Bajó la voz y le susurró al oído: "Alegría, es por tu bien que el Sr. Ir puede tratarte. ¡No puedes rechazarlo! "

Joy trabajaba como periodista y a menudo tenía que tratar con la policía. A medida que pasaba el tiempo, estaban familiarizados entre sí.

"Alegría, adelante, pero volveré y escribiré el informe".

Amy dijo con indiferencia, jugueteando con su cámara.

Joy no tuvo más remedio que seguir a Bill al auto.

"Ronald, ¿no dijiste que tienes algo que discutir con Bill? ¡Discutámoslo mientras caminas! "

Jimmy se quitó el abrigo y se apoyó contra su auto negro. Al ver que Joy siguió a Bill al auto de la policía, de repente le dijo a su asistente, Ronald, que lo había estado siguiendo todo el tiempo.

"¿Qué? Ah, por cierto, Bill, tengo algo que decirte ". Aturdido por un momento, Ronald entendió lo que sucedió. Se acercó a Bill, separó a Joy de él y subió al auto con Bill en su hombro.

Joy se sorprendió. ¿Qué demonios está pasando? ¿Dejarla sola así?

"¡Entrar en el coche!"

El coche negro, como un guepardo dormido a medianoche, rugió y se detuvo frente a Joy. El dueño del auto puso una mano en el volante y extendió la cabeza hacia la ventana. Su rostro guapo y firme mostraba un poco de impaciencia, y su tono era tan frío y duro como siempre.

"Bueno." Joy se tocó la nariz y se metió en el coche obedientemente.

El lugar llamado ciudad imperial también era propiedad del Grupo Go. Como el gran jefe aquí, Jimmy tenía una sala VIP especial.

Bill y Ronald llegaron primero, y algunos miembros importantes de la estación de policía también asistieron al banquete. Amy no vino porque tenía que escribir un informe, pero Joy sintió que Amy parecía evitar deliberadamente a Jimmy.

Se dijo que cuán poderoso era Jimmy en una ciudad. Cualquiera que viera su rostro real querría mirarlo de cerca, pero Amy no. Ella incluso quería echar un vistazo a Jimmy. ¿Odiaba al chico rico?

"Señor. Ve, llegas tarde. Deberías beber como castigo ".

Cuando Jimmy apareció en la habitación con Joy, todos estaban alborotados, y Bill incluso clamó dejar que Jimmy bebiera tres copas de vino como castigo.

El asiento del anfitrión todavía estaba reservado para Jimmy. Jimmy tomó asiento con una sonrisa y Joy se sentó frente a él.

"Llego tarde para acompañar a la reportera Joy. Bill quiere castigarme con vino. Reportero Joy, tiene que defender la justicia para mí ".

Jimmy señaló a Joy. Todas las personas en la mesa eran inteligentes. No se atrevieron a causar problemas frente a Jimmy, por lo que comenzaron a recurrir a Joy.

"Ven aca. ¿Qué tal si Joy lo bebe para el Sr. ¿Vamos? señor. Go es el benefactor de Joy. "

Alegría reunió su coraje y se puso de pie. Maldijo en su corazón que Jimmy era un hombre de negocios deshonesto. ¿Cómo podía dejar que una mujer tomara el vino por él? ¿Era su asistente un cargador libre?

Bill llenó una botella de Moutai para Joy.

"Me gustaría proponerle un brindis. Haz lo que quieras, Joy ".

Como Bill había bebido todo el vino, ¿cómo podía Joy beber solo un poco? Sosteniendo el vaso, levantó el cuello y se lo bebió todo.

"¡Ejem!"

El alcohol era tan picante que Joy se atragantó y tosió violentamente.

A media noche, Joy había sido borracha por una mesa de gente. Se puso de pie y dijo que quería ir al baño, salió a trompicones de la habitación.

La luz en el pasillo era tenue. Joy se apoyó contra la pared y lentamente se deslizó hacia el suelo.

El buen piso de mármol estaba frío y perforaba los huesos. Joy enterró su cabeza en sus brazos y sintió como si fuera a morir.

"¿Estás bien?"

Jimmy casi siguió a Joy fuera. Al verla así, de repente se sintió un poco angustiado. No esperaba que ella fuera tan mala bebiendo. Quizás debería dejar de beber con ella.

Levantando su cabeza esponjosa del brazo, Joy miró a Jimmy, cuyos grandes ojos blancos y negros eran tan brillantes como piedras preciosas lavadas.

"Jimmy, ¡todavía me debes dos millones!"

Aunque Joy estaba borracha, todavía estaba pensando en el dinero.

Jimmy se burló y maldijo en voz baja: "¡Miser!" Luego se dio la vuelta y se fue.

"¡Palanqueta!"

De repente, Joy se levantó del suelo, agarró la manga de Jimmy y tiró de él hacia atrás.

Jimmy pensó que ella tenía algo que decir, así que se dio la vuelta para cooperar. Inesperadamente, Joy lo agarró del cuello y bajó la cabeza. "Em ... .! " Ella lo escupió en el pecho de Jimmy.