Theo
Y así paso por una semana, le daba comida a Abey mientras iba y venía de la universidad. Ya me empezaba a acostumbrar, pero hoy estoy en la iglesia ¿Quién le dará comida? ¿Podrá aguantar un día sin mí? He estado pensando... no quiero dejarla sola en esa calle oscura y fría. Aunque no sé cómo le haré.
⸺Hey, jamás te había visto tan pensativo, Theo⸺ Liz tocó mi hombro, su cabello negro y su sonrisa alegre me hicieron sonreír. Era una señora de 45 años, que se veía más joven. Es una ternura
Era como mi madre adoptiva, en cuanto llegue aquí ella me acogió con su esposo y me oriento de cómo es esta ciudad.
⸺Tranquila Liz, no estaba pensando en nada fuera de lo normal⸺ sonreí.
⸺Vámonos⸺ dijo Mateo, su esposo. Un señor de la misma edad de ella, pero con canas, aunque se ve igual de joven.
No me había dado cuenta que el culto ya termino, ahora yo iría a comer con los Sánchez (ese era el apellido de Liz y Mateo) de verdad me siento afortunado, ellos me quieren como su hijo, aunque no tienen hijos en realidad. Le había preguntado a Liz una vez por qué no tuvieron, más ella se echó a llorar... no pregunte más después de ahí. Nos fuimos en el auto y llegamos rápido a su casa. Liz es muy buena cocinera y solo basto una oración corta para que Mateo y yo devoráramos los platos como animales.
⸺Ustedes sí que son un caso⸺ se rio Liz⸺ Theo ¿me puedes decir porque estabas como perdido en el culto?
⸺Bueno, es que...⸺vacile un poco al decirlo ¿era prudente decir lo que estaba haciendo con esa chica? No quiero que me malentiendan.
⸺ ¿Ya tienes novia?⸺ vi ilusión en la cara de ella ¿Por qué siempre molestan con eso? ¿Es malo ser soltero a los 21?
⸺Liz por favor⸺ se rio Mateo⸺ aún está estudiando, es ilógico.
Vaya alguien que tiene cultura.
⸺Bien⸺ Proseguí⸺ es que estoy ayudando a una mendiga y me preocupa que tal vez no haya comido hoy.
Ella me miro sorprendida y Mateo también. Liz salió por un momento y Mateo empezó a hablarme.
⸺Estás haciendo un gran bien, Dios te recompensará eso, hijo.
⸺Es bueno ayudar a los demás, es lo que más le gustaba hacer a Jesús ⸺sonreí, que bueno que no pensaron raro.
Vi a Liz volver con una pequeña maleta.
⸺Mira, para que puedas donárselo en cuanto la veas⸺ sonrió⸺ saque esta ropa porque no me sirve, pero no tenía motivación para darla, hasta ahora. No pierdas tiempo, ve.
Y no perderé tiempo, me preocupa el que no haya comido Abey. Tomé las cosas y las lleve bien agarradas, me di cuenta que estaba empezando a caer gotas de lluvia, tendría que llegar pronto a casa.
⸺Nos vemos⸺ me despedí.
Tomé el autobús más cercano, solo había tres personas en él. Me senté mirando la lluvia caer, calles pasaban, calles venían, Abey estaba sentada debajo de un árbol.
¿Qué? ¡Abey!
⸺ ¡Chofer deténgase! ¡Se lo suplico! ⸺grité de repente.
⸺Niño no me hagas perder mi tiempo⸺ Me miró mal.
⸺Le pagaré el doble, solo necesito montar un pasajero más⸺ lo miré implorándole piedad.
Él solo bufo y se detuvo. Le pagué y sin importarme nada, corrí debajo de la lluvia, estaré más mojado que un pollito. Abey me miro, estaba tiritando de frio aferrándose al abrigo que le di el otro día. La miré con una sonrisa, aunque salió más que una sonrisa débil, también estaba entrando en frio.
⸺Oye, no quiero que duermas aquí hoy⸺ le dije seguro⸺ por favor, ven conmigo, esta lluvia te enfermará.
⸺Apenas te conozco ¿seguro que no intentarás hacerme daño?⸺ estaba en lo cierto, aun soy un simple desconocido. El señor me dio voces del autobús, solo tenía dos minutos.
⸺Sé que no confías aun en mí, pero hazme caso. Por favor, ven conmigo a un lugar mejor⸺ le pedí amablemente. Ella lo pensó.
Al final le extendí mi mano y camino conmigo hacia el bus. Abey lo miraba raro, le indique como sentarse y ella se sentó a mi lado, todos nos miraban raro y era de esperarse, estábamos mojados como pollitos y ni hablar en qué estado estaba Abey, su ropa toda andrajosa, marrón y rota. Su cabello maltratado largo y se notaba ¿rojizo? No se distinguía debido al maltrato. Ella me sonrió incomoda, más agarro mi brazo con desdén. El minibús había arrancado y seguro ella nunca tuvo la experiencia de montarse en uno.
⸺ ¿Así es estar en un bus? me dijo horrorizada.
⸺Si, es el bus, tranquila, no morirás aquí⸺ aguante mis ganas de reírme, aunque no valió, era divertido verla así.
Ella se dio cuenta de que me estaba riendo y me miro mal, subí los brazos en son de paz y seguimos el trayecto.
//
⸺Llegamos⸺ Exclamé en cuanto llegamos a mi casa, la lluvia estaba más recia y entramos de golpe.
Ambos nos tiramos al piso a respirar un poco de aire y reímos por nuestra acción.
⸺ ¿Esta es tu casa? Abey se levantó y observo todo el panorama. Estaba sorprendida.
⸺Bueno mi casa de alquiler diría, estoy aquí temporal, así que ya vez.
⸺Wow, es increíble⸺ dijo sorprendida.
Vi lo mojada que estaba y necesitaba bañarse pronto o si no se enfermaría.
⸺Bien Abey⸺ La llevé hacia el baño⸺ Este es el baño, dura el tiempo que desees. Date una buena ducha, te lo mereces. Estaré preparando tu habitación.
Ella asintió y le deje una toalla.
En esta casa hay tres habitaciones, dos las ocupaba yo, una para hacer clases y la otra para dormir. La tercera es para las visitas o en este caso, cuando a mi mama le da la gana de venir para ver si estoy aún vivo. Pero hay solo un viejo colchón, que es el que me traje por primera vez acá.
Aun servía, me fije. Revise lo que me dio Liz y en serio, eran muchas cosas, había desde sabanas hasta ropa de mujer y cosas que utilizan las mujeres. Vaya, ella si me preparo. Arreglé todo cómodo para que ella se sienta a gusto. Tomé la comida de Liz y la puse a recalentar en lo que hacía un té de jengibre.
⸺Disculpa⸺ oí la voz ronca de abey⸺ ¿La habitación...?
Me volteé y la vi en toallas, los rasgos de desnutrición estaban aún como cuando la conocí, pero su tez morena-clara estaba más brillante ahora. En serio necesita ayuda.
⸺Ven⸺ Dije y la llevé a su habitación⸺ Esta es tu habitación, hay ropa en la cama, siéntete a gusto de usar lo que quieras.
Ella estaba sorprendida, no la culpo. Se acercó a la cama y la tocó.
⸺Es muy suave y...⸺dijo, balbuceando ⸺me encanta.
⸺ Que bueno que te guste. Ven a la cocina cuando ya estés lista. Debes de comer.
La dejé en la habitación y preparé todo. Fui a cambiarme y ponerme algo más cómodo y no mojado claro. Me senté a la mesa mientras bebía el té y revisaba las redes sociales. Levanté mi vista y ahí estaba, con una pijama ancha azul, su cabello maltratado largo caía sobre sus hombros. Estaba tímida y la invite a sentarse.
⸺Gracias⸺ Murmuró⸺ espero no incomodarte con mi presencia.
⸺No, tranquila. Además, tener un poco de compañía no hace daño⸺ sonreí.
Ella asintió y se dispuso a comer. Oré disimuladamente y comí también. Pero ella me miraba extraño.