- Chicas, hoy vamos a tener un examen sorpresa y cuando termine daremos por terminada nuestra clase - advierte mientras se mueve de silla en silla con pasos lentos y decididos, dejando un sobre cerrado en cada mesa. Incómoda, me muevo en mi silla y llevo mis manos a mis ojos, frotándolos para despertarme mejor. No puedo permitirme perder puntaje en esta prueba, esta escuela es muy estricta con nuestras boletas de calificaciones y si sacamos una nota roja implica la presencia de nuestro tutor, en mi caso, Julie, mi madrastra. No la he visto desde que me dejaste en ese lugar, y no tengo intención de verla pronto. Mis escasos periodos de vacaciones o cumpleaños los paso con mis abuelos y no creo que haya sido mi elección, las mujeres siempre estamos viajando por el mundo. Cuando llega a mi escritorio, Lisy pone el sobre boca abajo y me mira a los ojos. Trago saliva. Parece querer desentrañar mis secretos más oscuros.
- No te ves bien hoy, Lilian, ¿no dormiste bien anoche? - Me muevo en mi silla y sin apartar la vista de sus valoraciones, me obligo a hablar:
-Oh, no mucho, señorita Gregory, tuve un poco de insomnio anoche -miento. Ella arquea las cejas.
"Oh, espero que esto no te moleste durante la evaluación", dice en su tono profesional. Sin embargo, fuerzo una sonrisa hacia ella.
"No te preocupes, no se interpondrá en mi camino en absoluto". Ella asiente muy lentamente, le da a mi amigo a su lado una mirada rápida, luego pasa a la mesa de al lado. Libero automáticamente el aire que estaba conteniendo haciendo un sonido sutil. Miro a Alice sentada en la silla a mi lado, pero ella solo se encoge de hombros.
Y hablando de mi amiga traviesa, todavía no hemos tenido la oportunidad de hablar de lo que pasó anoche y no sé por qué pero siento que no me va a gustar mucho lo que tiene que decirme. Los minutos pasan y estos se convierten en largas y agotadoras horas de pruebas, actividades, ejercicios, trabajo y más ejercicios, algo muy común en nuestro día a día, pero hoy daría mi vida por una cama suave y calentita! Una hora después del almuerzo, nos sumergimos en algunas actividades deportivas, clases de teatro y música también, y al final de la tarde, el merecido descanso. Me siento en uno de los bancos de madera en medio del enorme jardín de flores y observo las hermosas mariposas de colores que vuelan sobre las delicadas flores, que se balancean con su peso. Abro una pequeña canasta de vinilo cuadrada a mi lado y saco una deliciosa rebanada de pastel de vainilla. ¿Mencioné que me encanta el pastel de vainilla? Este snack me recuerda un poco a mi infancia con mi padre. Alice se sienta a mi lado y a pesar del cansancio de no dormir bien durante la noche, la criatura aún derrocha una amplia y soñadora sonrisa.
- ¡Aff, pensé que nunca estaríamos solos! ella murmura, dejando escapar un suspiro audible. En silencio, tomo otro trozo de pastel y se lo entrego.
-Me tenías preocupada anoche -comento, pero ella solo sonríe. Y créeme, no es cualquier sonrisa, es esa maldita sonrisa soñadora otra vez. Una sonrisa como nunca antes la había tenido. -¿Qué te poseyó para dejarme solo en ese lugar y desaparecer así en casa de un extraño? Alice, esos jóvenes parecían animales que nunca habían tenido libertad en sus vidas y sé lo que es no tener libertad.
"¡Lo siento, Lili!" ella sisea dulcemente. "Es solo que... me dejé llevar. ¡Maldita sea, era una fiesta y sabes que estoy loca por las fiestas! Tomo aire y miro hacia atrás al ballet de mariposas batiendo sus alas lenta y elegantemente.
"¿Dónde estabas realmente?" Porque caminé toda esa casa buscándote y no te vi por ninguna parte - insisto en la pregunta.
"Te voy a contar todo, todo. - Se acomoda en el banco doblando las piernas debajo de su cuerpo y me mira. Una narración inusual comienza a salir de su boca y no puedo evitar quedarme atónita con cada palabra. - Tan pronto como puse un pie en esa casa y vi a toda esa gente gritando animadamente y bailando, me mezclé con ellos. Bailé como nunca lo había hecho en mi vida. El ritmo era tan emocionante y atractivo. Luego conocí a July Anderson, una chica maravillosa. Charlamos en medio del baile y en un momento ella me ofreció su bebida.
"¿Dime que no lo hiciste, Alice?"
"¡Por supuesto que acepté!" Ella deja escapar un pequeño chillido emocionado y pongo los ojos en blanco.
- ¡¿Estás loco, criatura?! - La regaño.
- Lili, fue divertido, ¡relájate! pregunta tan casualmente que me molesta. "Ahora déjame decirte todo lo demás". La miro con el debido asombro.
"¡¿Aún hay más?! Ella agitó su mano y continuó.
-Bailamos como tres canciones y después de cansarnos nos fuimos a un balcón en el segundo piso de la casa, que diré de paso, tenía una hermosa vista al parque central. Arriba había un grupo animado y fue allí donde descubrí Dante Travel. ¡Oh amigo, Dante es un pedazo de mala manera literalmente hablando! Una hermosa pelirroja de piel clara con cabello cobrizo oscuro. De esos que te dan ganas de cogerlo y acariciarlo, ¿sabes? ¡Lo sé, porque los compré y son tan fragantes y tan suaves! Así que minutos después charlamos un poco, pero lejos de los demás y mientras hablábamos me tomé una especie de cóctel rojo con una espuma suave y cremosa, que flotaba en el borde de la copa. ¡Una delicia!
- ¿Me estás diciendo que te tomaste más de un vaso y que mezclaste las bebidas? ¿Es eso lo que me estás diciendo? - La regaño de nuevo y esta vez me pone los ojos en blanco.