Siempre creí que esos sueños de ángeles y demonios eran partes de libros o de
películas. Pero quien me iba a decir que eran reales y que me enamoraría de uno.
Un chico disfrazado de ángel, pero si lo llegas a conocer mejor es el demonio en
persona.
Mi Lugar
Estaba en mi ligar de siempre, digo mi lugar porque ya nadie viene aquí. Es el lugar
mas hermoso en el que he estado, es un mirador bastante oxidado.
Tiene unas vistas increíbles a las montañas y al lago. Es tan tranquilo y lleno de paz
que me dan ganas de quedarme a vivir aquí por siempre.
Esta algo alejado de la ciudad pero vale la pena. Ya que es el único lugar donde puedo
escaparme unas horas de mis problemas, del lio que es mi vida en general.
Pero claro esta que mi tranquilidad acaba de terminar por el sonido de una
notificación de una llamada perdida en el móvil. Es de una compañera de trabajo y me
dejo también un mensaje de texto.
- Hi! Sam, te llame, pero veo que estas ocupada, quería decirte que el jefe
nos dio el día libre y quería saber si te apetece ir por un café y charlar?
Me lo pienso antes de enviarle una respuesta. No me vendría mal charlar con ella, se
nota que es una buena chica y esta haciendo lo posible por ganarse mi confianza.
-Hola Erika, acabo de ver tu mensaje, si, me gustaría ir. Nos vemos al rato.
Bien ya es hora de irme, tendré que ir por un abrigo ya que el clima cambio raramente
y ya esta haciendo fresquito.
Me subo a mi pequeña motocicleta y voy a mi departamento.
Ya dentro decido cambiarme por algo mas abrigado, no quiero pescar un resfriado.
Antes de subir a mi pequeña scooter le envío un mensaje a Erika que estoy de camino
y le pido la dirección del lugar donde me cito.
Me voy rumbo al café/bar, al llegar me estaciono y veo que es un poco elegante el
lugar, no es que no me agrade , pero no es mi estilo este tipo de lugar donde
seguramente viene gente de clase y mucho dinero. No es que sea pobre, pero la gente
así me da pena.
Me pregunto porque Erika eligió este lugar.
Entro al sitio e inmediatamente le encuentro con la mirada y voy a donde se
encuentra.
- ¡Hola! Sam, siéntate.
- me recibe gustosa y alegre?
Hola, no es por nada.. ¿pero porque me citaste en este lugar?- le pregunto
confundida.
Oh, lo siento es que este lugar es de un conocido de mi padre y
literalmente puedo venir cuando quiera gratis!!- me dice emocionada
No quiero arruinar su momento así que me trago cualquier comentario negativo para
mi.
No me puedo quejar fue una agradable tarde junto a Erika. No me acordaba lo que se
sentía estar en momentos así y olvidarse de todo por un momento.
Lastimosamente ya toca volver a casa ya que es un poco tarde y no quiero estar tanto
tiempo fuera. Soy un tanto paranoica.
Ya en el departamento voy directo a darme una ducha calentita para después ir a
dormir.
Hago el intento de dormir, pero veo que el insomnio hace presencia en mi y me obliga
a dar vueltas y vueltas sin resultado por conciliar el sueño.
Cansada de estar en lo mismo me levanto, me cambio ya no tiene caso que trate de
dormir si evidentemente no va a pasar. Así que me preparo un termito con bastante
café, me abrigo, tomo mi casco y salgo del departamento directo al estacionamiento
donde esta mi preciada scooter, regalo que me dio una persona muy importante para
mi. Ya se que no esta con vida en estos momentos, pero este donde este me va a guiar
esta noche en mi camino directo a mi lugar el mirador.