Capítulo 9 9

Los ojos horrorizados de Brooke miran fijamente la pantalla, y me eché a reír por su expresión.

Realmente se lo está dando a esta chica, mientras sus piernas están sobre sus hombros. Se retira y se gira para mirar a la cámara. Está colgado como un puto caballo.

Me eché a reír. "¿Qué demonios?"

Jolie se ríe mucho. "¿Bien?"

El vídeo cambia a él en una playa, donde está tirando a dos chicas que están de rodillas frente a él. Está dando embestidas duras y profundas, e incluso golpea a uno de ellos en el trasero.

Los ojos de Brooke son del tamaño de platos mientras mira el teléfono. "¿Q-qué mierda siempre amorosa?" ella tartamudea. "¿Qué estoy viendo en este momento?"

Jolie inclina la cabeza hacia atrás y se ríe aún más fuerte. Ella está histérica.

Santiago toca la pantalla y pronto está en la oscuridad. Cada uno de nosotros nos inclinamos para tratar de concentrarnos, solo para ver que se está follando a otra chica en el maletero de un coche. El sonido de piel contra piel se puede escuchar a nuestro alrededor. Odio decirlo, pero en realidad es bastante caliente de ver.

Mis ojos se encuentran con mis amigos, y los tres nos echamos a reír de nuevo.

"¿Qué clase de monstruo eres?" Brooke suelta.

"El amante más grande del mundo", ronronea Santiago.

"¿Dónde conoces a estas mujeres?" Yo le pregunto.

"En bares, con tequila". Levanta la ceja. Él es completamente serio. Cree que es el mejor amante del mundo.

"Te encuentro repugnante", dice Brooke, indignada mientras apura su vaso. "Sin mencionar ofensivo".

"Y totalmente jodidamente caliente". Jolie se ríe. "Dijimos que queríamos probar algo diferente, chicas".

Me río con ella. "No tan diferente".

natan

"Y por aquí está el dormitorio principal", dice la agente de bienes raíces mientras me muestra el apartamento.

Observo las amplias vistas de San Francisco. Es un hermoso apartamento, el mejor que he visto hasta ahora, y he estado buscando durante mucho tiempo. Es la mejor parte de la ciudad, cerca de restaurantes y tiendas.

"Muy lindo." Camino hasta la gran suite principal, que es casi del tamaño de todo el apartamento de Eliza. Hay un gran baño privado fuera de él. No está decorado con los colores que me gustan, pero podemos trabajar con eso más tarde. También hay un enorme vestidor. Suficiente espacio para nuestras dos cosas.

Esto podría funcionar.

Miro a mi alrededor atentamente, esto es realmente muy agradable.

Regreso a la sala de estar y camino por el pasillo.

"Hay cinco dormitorios en total. Un loft como principal, dos salas de estar y una enorme cocina galera con otro baño en este nivel", continúa la inmobiliaria en su argumento de venta.

¿Y los garajes?

"Garaje doble con conserje veinticuatro horas."

"¿Y seguridad?"

"Vigilancia total".

Me dirijo al agente inmobiliario con una sonrisa. "Me gustaría hacer una oferta".

El bar está lleno de gente y estoy con Drew y Glen, mis dos mejores amigos. Actualmente estamos esperando a las chicas.

"¿Dónde diablos están?" Drew mira su reloj. "Se suponía que debían estar aquí hace una hora. Quiero comer."

No estamos seguros de si las chicas han comido o no, así que las estamos esperando. Saco mi teléfono y le envío un mensaje de texto a Eliza.

¿Dónde estás?

Dejo mi teléfono sobre la mesa y espero su respuesta.

Miro alrededor de la habitación, y en la esquina, veo una cara familiar.

Le sonrío a Glen. "Tu mejor amigo está aquí".

Miran a su alrededor. "¿OMS?"

"Por la esquina." Inclino mi cerveza en la dirección general, y Glen ve al tipo del que estoy hablando, y pone los ojos en blanco.

"En serio, un maldito idiota. No dejes que nos vea".

Me río mientras tomo un trago de mi cerveza. Samuel Phillips es el archienemigo de Glen. Es anestesista como Glen, ya menudo se ven en los hospitales en los que trabajan. Samuel es apuesto y confiado, y le encanta decirte lo bueno que es en cada oportunidad que tiene. Vuelve a Glen completamente loco.

"Voy a noquear a ese idiota uno de estos malditos días", murmura Glen mientras toma un sorbo.

"¿Por qué se mete debajo de tu piel tanto de nuevo?" Pregunto.

"No lo sé, simplemente lo hace. Es coqueto y tiene a las enfermeras riéndose como colegialas. Estás en el trabajo, cabrón, guarda tu pene y haz tu maldito trabajo".

Drew sonríe. "Entonces, ¿estás celoso?"

Glen se burla. "¿De él? Como si."

Drew y yo nos reímos. Cojo mi teléfono y compruebo si Eliza ha respondido. "¿Dónde diablos están?" Me froto el estómago. "Estoy a punto de desmayarme de hambre".

Me siento más yo ahora que estoy con los chicos. He estado sacudida todo el día por mi pequeña erección de bikini esta mañana.

Estaba cachondo. Un buen pajote arregló la situación, y ahora puedo, afortunadamente, volver a la normalidad.

Sonrío para mis adentros, y pensé que era Eliza...

Mierda estúpida.

Niego con la cabeza. ¿Qué estaba pensando? Por supuesto, no era ella. He visto a Eliza en casi nada la mayoría de los días durante los últimos diez años. No era su cuerpo... era el mío.

Solo fue un mal funcionamiento hormonal. Nada más y nada menos.

Mis pensamientos son interrumpidos por la voz de Glen. "Ya era hora. ¿Dónde diablos habéis estado, chicas?

"Viendo películas", dice Brooke mientras trata de mantener la cara seria.

"Más como documentales", agrega Jolie. "Realmente jodidamente interesantes".

Eliza se ríe. Levanto la vista y la veo y mi corazón da un vuelco. Lleva un vestido negro ajustado. Está fuera de los hombros y se sienta justo por encima de la rodilla. Su cabello largo y oscuro está suelto y su maquillaje es ahumado. Ella sonríe y se acerca para besarme en la mejilla, poniendo su mano en mi muslo.

"Hola, Nathe."

Ella está borracha; Puedo decir por su voz ronca.

"Hola." La miro de arriba abajo. "Te ves preciosa."

Siento una punzada en mi polla. ¡No!

No otra vez.

Ella sonríe seductoramente. "Gracias."

"¿Vamos a cenar?" Les pregunto.

"No, ya comimos. Tomamos canapés y tequila".

"Oh, muchas gracias. ¡Gracias por decírnoslo!" Drew chasquea. "Aquí los estamos esperando mucho mientras nos consumimos".

Eliza se ríe mientras Brooke finge tocar el violín.

"Tomemos unos cócteles", dice Eliza, mirando hacia la barra.

"Gran idea."

Las chicas se marchan cuando agarro un menú. "No voy a esperar a esas perras la próxima vez, voy a comer cuando tengo hambre. Al diablo con esto, lo estoy consiguiendo todo.