Capítulo 5 DESCUBRIENDO EL AMOR

CAPÍTULO 05

Los niños corrían sin parar, el repentino cambio de clima estaba afectando a todos, pero sobre todo a ellos; las estimaciones eran malas, con tanta luz solar activa la estimación era que en el campo el agua se secaba más rápido, lo que venía causando pánico en muchos.

Otros, sin embargo, comenzaron a adaptarse a la etapa por la que atravesaban y pronto el país volvió a la normalidad con la reanudación de sus rutinas. Muchos no aguantaron la tensión y se quitaron la vida, con la luz constante se empezó a observar más a los que actuaban de noche, la sensación era que todo lo que estaba oculto empezaba a aparecer generando grandes revelaciones en todo momento. Los ancianos sufrieron mucho con ese clima, aumentaron las enfermedades y las estimaciones de muerte, comenzaron a surgir nuevas enfermedades, el país que estaba generando dinero con el turismo por el sol comenzó a ser visto desde afuera con malos ojos, quebrando la economía de exportación. .

Nadie sabía lo que iba a pasar, era imposible predecir el futuro, pero en ese momento los pensamientos de Rose eran distantes, no entendía como en tres meses que el sol no se ponía su esposo no llamaba ni para saber cómo estaban sus hijas, el único contacto que tuvo durante este período fue la gran cantidad de dinero que depositó en la cuenta, con la intención de apoyar a su esposa para que no causara ningún escándalo que pudiera afectarlo profesionalmente, Rose. nunca lo había amenazado con hacer algo así, pero su amante prefería que se lo impidiese suministrándoselo, pues no podía perder otro contrato por mala reputación.

Rose estaba sentada en la silla de su área pensando en su esposo, les dijo a las hijas que él viajaba por trabajo, en su corazón se sentía mal por mentir, sabía que la verdad siempre era la mejor opción y que ella pagaría por ella. encubriendo las traiciones del padre, sabía que una hora las hijas descubrirían el carácter del padre, pero siempre pidió a Dios que lo cambiara antes de ese día y que volviera a amar no solo a la familia como amó en un principio, sino también a Cristo, recordando el día que lo aceptaron como Salvador, por eso no lo soltó, prefirió creer que todo saldría bien algún día y que despertaría, no solo por su familia, pero principalmente para Cristo. Respiró hondo, apoyó la cabeza en la silla y cerró los ojos, la responsabilidad de cuidar a los tres niños en ese momento sola era demasiado pesada, quería que él estuviera allí para al menos tomar su mano o recostar su cabeza. en su hombro y se relajo, aún sabiendo que si él estuviera allí, estaría encerrado en la oficina hablando con su amante y haciendo cosas absurdas por internet, sintió que una tristeza se apoderaba de ella, sabía que esa carga solo era soportable por ella. fe en Cristo, estaba segura que su fuerza venia de el y que el lo ayudaba a no ceder a la tristeza y seguir en el camino de la vida, Rose no dejo de luchar, si tenia que trabajar lo hacia, tomo cuidado de los niños, hizo su parte en la iglesia donde asistía, sentía si realmente era feliz, lo único que le faltaba era su esposo, se sentía egoísta por eso, también extrañaba el contacto físico, ser amada, cuidada y tocada como una mujer. Rose se pasó la mano por el cabello, se dio cuenta que la dirección de sus pensamientos no era buena y decidió luchar contra su mente leyendo la biblia, pensó en pedirle a una de las chicas que la trajera, pero decidió no interrumpir su juego yendo a Consíguelo. Cuando regresó, notó que Bruno pasaba caminando con él en ropa deportiva y sus guardias de seguridad en ropa social, lo que la hizo reír.

Ella hizo un gesto con la mano y él le devolvió el saludo, sin saber si detenerse a hablar o no, Bruno no era de los que salían a caminar a esa hora, pero su intención era conocerla, tenía tantas preguntas que hacerle. simplemente no tenía el coraje de acercarse a ella Al igual que ella, había estado con muchas mujeres, pero nunca había pensado en ninguna de ellas tan intensamente como en ella. Vio a los niños jugando en el patio trasero y pensó lo loco que estaba por querer conocer más a esa mujer, sin saber cómo describirse a sí mismo lo que sentía y mucho menos lo que quería, en ese momento sabía de la ausencia de su marido y dónde estaba. fue, no conocí mujeres que soportaron esa situación, todo lo contrario, se lucran con pleitos con este tipo de situaciones.

Bruno pensó que Rose era mucha información para él y había investigado toda su rutina e incluso sabía quiénes eran las personas con las que hablaba, su intención era provocar una reunión casual y preguntar más sobre esa noche y tal vez sentirse un poco más de el perfume de tu cabello.

Rose estuvo en constante oración por Bruno desde el día en el parque, creía que Dios lo tenía como hijo y se vio responsable de mostrarle este camino, al verlo pensó en anunciarle el evangelio, pero tuvo la sensación de que Bruno siempre pasaba muy rápido, parecía que se escapaba, sentía que si su esposo estaba en la fe, los dos juntos podían acercarse a ellos, siguiéndolo de cerca, pero en la situación en la que estaban las cosas, no era así. bueno que ella visitara sola, aun con la intención de evangelizar, no abandonó las enseñanzas bíblicas y siguió estrictamente el mandamiento de Jesús de caminar sobre dos pies; ella confiaba en su amiga y hermana en Cristo para estos emprendimientos, pero Bruno era demasiado grande y les costaba un poco mantenerlo en el parque, por lo que no continuaron con la inversión espiritual personalmente, pero en las madrugadas se peleaban por esa alma, por eso estaba segura de que era Cristo quien propiciaba estos encuentros casuales.

uber desde allí, ella vestía un vestido burdeos que le llegaba hasta las rodillas , su maquillaje era ligero, su cabello largo estaba suelto y sus tacones eran del color del vestido, las gemelas vestían un vestido blanco, una con un lazo rosa en la cintura y la otra un lazo lila para facilitar el reconocimiento, la hija mayor Llevaba un vestido del mismo modelo de las más pequeñas pero de color rosa claro.

Pasó un carro grande, entró, dio la vuelta y se fue, era uno de los carros de Bruno que no conducía por el estrés, abrió la ventana trasera del carro y preguntó:

- Rose quiere un paseo?

- Ay, Bruno, gracias, pero acabas de llegar, no te vamos a dar ese trabajo.

- No es trabajo para nada, no tengo nada que hacer de todos modos, así que aprovecho para dar otro paseo.

Rose pensó en negarse nuevamente, pero sintió una paz que le permitió aceptar el paseo, iba a la iglesia con los niños, como estaba acostumbrada, pronto el conductor se bajó y abrió la puerta del auto, los niños entraron primero en ese auto enorme y lujoso , auto y luego Rose, quien entró tranquilizándolos con una voz baja y suave y una amplia y leve sonrisa, no tardó en cambiar el olor del auto y Bruno se sintió avergonzado por ello.

- Que hermosa familia – dijo señalando a las niñas – Parecen muy tranquilas.

-Ah, son unos niños maravillosos, pero traviesos, a veces me vuelven loca, pero son la bendición de Dios en mi vida- respondió ella mirando a los tres y pasando su mano por la cabeza de uno- Gracias por llevarnos, nosotros van a la iglesia, sería un placer que se congreguen con nosotros.

Bruno no respondió de inmediato, esa podría ser la oportunidad que había estado esperando por tanto tiempo para hablar con ella, por otro lado varias excusas para no hacerlo rodearon sus pensamientos, entre ellas la más fuerte era que cada lugar al que iba estaba programado de antemano se visitó el lugar y se avisó con anticipación y se apartó un lugar para él y sus guardias de seguridad, irse sin hacer eso era insólito y aterrador, sintió una desesperación que gritaba en su mente que no aceptaba la invitación , que él no podía estar allí, pero cuando miró, supo que ella era la razón por la que debía ir a este lugar y quedarse y no correr como su mente le decía.

- Ahí - siguió hablando Rose- termina temprano, como dijiste estás desocupado, ya te invito a que te ocupes, siempre es una bendición recibir la palabra que Dios nos envía, creo que te gustará.

- Está bien - respondió sorprendido por su propia respuesta, llamando a los guardias de seguridad que cambiarían turnos para hacer extra.

En la forma en que Bruno observaba a esa familia, no entendía cómo podían creer en un Dios tan benévolo cuando sufrían tanto por culpa de un hombre malo, se preguntaba si ese Dios no veía la situación en la que estaban y ese esposo. no estaba cuidando a esas mujeres, surgieron otros interrogantes hasta que llegaron a la iglesia, Bruno que hasta ese momento había vivido una vida sin pensar nada en Dios, ahora lo tenía como enemigo y no estaba de acuerdo con su forma de gobernar el mundo .

Faltaban diez minutos para que comenzara el servicio, Rose acomodó a Bruno en una de las primeras filas, sus guardias de seguridad se sentaron en la parte de atrás de la iglesia, para darle espacio, Rose se sentó a su lado y los niños fueron directo al ministerio de niños , pocas personas llegaban a saludarlo u ofrecerle algo, lo que para él era extraño, porque a donde quiera que iba la gente se lanzaba a adularlo, idolatrarlo por cuestiones sociales y económicas y ahí solo le daban la mano y se iban por Rose.

"Ah, hermosa Rose" pensó al escucharla hablar sobre la iglesia y la gente, esa para él era la oportunidad perfecta para preguntarle sobre ese día, pero no quería cortarlo, solo quería escucharlo porque era agradable a su alma, él sentía que la paz salía de ella y eso le gustaba.

Al poco tiempo comenzó el servicio y Rose dejó de hablar y comenzó a orar junto con la iglesia, Bruno se quedó quieto mirando a la gente porque pensaba que no tenía nada que hablar con Dios, no pasó mucho tiempo para que la alabanza comenzara a causar dolor de cabeza e impaciencia. en él que pensó en una forma de despedirse y marcharse, mirando hacia atrás pensando en señalar a sus guardias de seguridad que parecían estar envueltos con la música y todo el ambiente, sintió que era el único molesto allí, pero justificó su dolor de cabeza que sólo aumentó impidiéndole entender hasta las letras de las alabanzas.

Terminada otra alabanza Rosa fue llamada al altar dejándolo solo, habló con los músicos y dijo a la iglesia:

-A los hermanos les pido que cierren los ojos y se lleven las manos al corazón y mediten las letras de alabanza y adoración a nuestro Dios.

Dudó en cerrar los ojos, pero le dio vergüenza darse cuenta de que solo él no lo había hecho y se rindió haciendo lo que Rose le había dicho, conocía esa canción, hace unos años había tenido mucho éxito y sonaba en todos lados.

hijo te quiero mucho

Por qué me rescataste?

Por qué me trajiste aquí?

¿Por qué me quieres tanto Dios?

Si he pecado contra el cielo y contra ti también

mi vida la destruyo como erré...

porque me quieres tanto?

Hijo , quiero secar tus lágrimas, dejarte solo

mi

hijo quiero ser tu dios

Te amo tanto, tanto, tanto, tanto ...

hijo ven se mio

hijo yo quiero ser tu Dios....

porque me quieres tanto?

Quiero envolverte en mis misterios en el manto de

mi gloria

Desenrollaré el rollo sagrado y cambiaré tu historia

haré un vaso de honra

Avergonzaré a los que se burlan de ti, te daré la victoria.

porque me quieres tanto??

porque te amo....

Letra Hermano Lázaro.

Bruno incluso se encontró cantando algunos pasajes, casi no se dio cuenta, pero el dolor de cabeza se fue y sintió una emoción aulladora en su corazón, que se sentía como un desbordamiento de aguas que se convierte en alegría, eso era diferente a todo lo demás y ahí se dio cuenta. que Dios estaba allí, se sintió avergonzado por los malos pensamientos sobre Dios al comienzo del servicio y se encontró pidiendo perdón por sus palabras.

Cuando Rose volvió, Bruno se sintió más ligero, más accesible y feliz, ella sabía que se había quitado un lastre de su vida y estaba feliz con eso, ambos se sentaron, era hora de la palabra, él la tomó de la mano emocionado y dijo :

-¿Porque cuando estoy cerca de ti, solo experimento cosas extrañas pero deliciosas? ¿Quién es el raro tú o yo?