Capítulo 4 CAPITULO 3

Alejo

Quiero saber todo acerca de esta familia, algo en mi mente me dice que tengo que protegerlos, tengo que estar con ellos al ver que confían en mí, pero para que ellos me cuenten ese secreto familiar tenía estar más al pendiente, no tenía ninguna duda sobre ello.

- No pienses en ello, jefe - dice mi mano derecha sacándome de mis pensamientos.

- ¿En qué? - cuestiono haciéndome del desentendido.

No quiero que piense cosas que no son, aunque a el no le tiene que importar las decisiones que tomo. Son mis decisiones y yo soy el jefe. Por otro lado, prefiero por ahora mantener un bajo perfil sobre las relaciones amorosas y concentrarme en salir de las situaciones que me encuentro.

- Es mejor concentrarnos en nuestros problemas, es hora de irnos de la ciudad ¿No lo crees? - dice y asiento pensativo, nos quedamos callados por unos segundos.

- Tienes razón, Henry, pero tenemos que ser discretos y silenciosos a la vez, no podemos arriesgarnos a nada - comento y el concuerda conmigo.

- Creo que deberíamos de quedarnos por lo menos un mes más aquí, total nadie conoce nuestra verdadera identidad ¿Que dices? - sugiere Henry, miro a Henry como si fuera un loco porque el mismo me dijo para irnos de aquí y ahora cambia de parecer, el siempre fue raro, no tengo porque sorprenderme de nada.

- Solo un mes, Henry, un mes. Necesitamos volver para resolver nuestras cagadas - accedo con seriedad.

- Necesitamos un teléfono para contactarnos con tu hermano - cambia de tema al instante y niego varias veces mi cabeza.

- Ellos nos han ayudado mucho, no quiero que resuelvan mis problemas ahora. Es mejor que no contactar con ellos por ahora. Los policías estarán también investigándolos - expreso.

- Le pediré a la mujer del hotel que nos hospedemos unas semanas más y ... - interrumpo las palabras.

- No resolverá nada, necesitamos mantenernos alejados de ellos y sobre todo de la familia de la mujer, me da mala espina - dice Henry con dudas.

- Y yo tengo la necesidad de hacer algo por ellos ¿Por qué? Antes nunca había querido ayudar a alguien y ahora aparezco en este lugar y tengo la necesidad de ayudar a la chica - menciono. Mi mano derecha se queda pensativo y mirándome fijamente.

- ¿Por qué me miras así? - cuestiono asustado.

- jefe creo que tienes fiebre - dice en burla mientras toca mi frente con su mano y pone la otra mano en la suya, frunzo mi ceño y aparto la mano de Henry de un golpe.

- Deja de ser tan ridículo. No estoy enfermo - gruño enojado y bufa.

- Trataba de ser divertido, jefe. No sea tan amargado - dice en burla mientras se soba su mano y ruedo los ojos.

- Esta ciudad tiene que tener muchos cambios y nosotros lo haremos mientras nuestra estadía. Tenemos suficiente dinero para hacer un bar en esa ciudad - hablo pensativo y me observa como si estuviera loco.

- jefe ¿Quieres hacer negocios aquí? Pero no tenemos nada aquí - dice.

Perfecto para empezar de nuevo ¿No?

- No me entiendes, Henry. Quiero comenzar de nuevo nuestro negocio, y tener más personas para poder crecer mi imperio. En este lugar puedo comenzar de nuevo, de cero y tengo esa oportunidad ya que estoy aquí y tengo la plata suficiente para hacerlo - comento con una sonrisa siniestra.

- Comencemos con las investigaciones, Henry. Haremos esto rápido y sin distracciones - hablo y el asiente varias veces con la cabeza, saca la laptop que tiene en el maletín.

- jefe - me llama.

- ¿Qué pasa? - cuestiono levanto la vista para escucharlo, me observa con preocupación.

- Es tu hermano. Mijaíl está hospitalizado, sufrió un atentado y lo peor es que las autoridades te están culpando de ello - informa, trago saliva y me pongo pálido.

Tengo un mes para hacerlo; para tener la gente necesaria y tener pruebas para encerrar a mi padre en la cárcel. Se que el tiene la culpa de todo esto.