-Damián, nunca me había dicho tal cosa ¿por qué siento que algo cambio entre nosotros?-pensó Alessandra tragando sus lágrimas para que nadie viera tal humillación.
-mira quien tenemos aquí es la señorita Alessandra ¿cómo has estado?-dijo la voz arrogante.
-Alex eres tú-sonrio Alessandra mirando hacia donde se encuentra.
Alex que está vestido de azul miro con indiferencia a Alessandra, su rostro es guapo pero muy inferior al rostro de Damián-Alessandra has cambiado mucho ¿porque no saludas a la pequeña sol?-dijo con frialdad.
-Alex tú-dijo Alessandra mirando con incredulidad la expresión indiferente es como si todos a su alrededor la odiaran.
-hermano Alex ¿cómo puedes ser así con tu primer amor de infancia?-preguntó sol con ira.
-Pequeña sol no te enojes, Alessandra es solo una vieja amiga-hablo con ternura.
Alessandra miro a las tres personas que se reían de manera tan unida-Desde cuando sean vuelto grandes amigos ¿qué pasó después de un año?-pensó sintiendo tanta tristeza.
La fiesta continua de manera alegre solo Alessandra sostuvo una copa mirando a su amado sonreír contra mujer aceptando todas las críticas de las personas a su alrededor.
Al terminar la fiesta Alessandra se fue a su casa sosteniendo su almohada comenzó a gritar para después calmarse.
-¡Todo es un sueño extraño! Cuando despierte todos estará normal, si debe ser-Pensó Alessandra sosteniendo la medalla de su pecho.
Al día siguiente
Alessandra que estaba bebiendo un té con sus padres fue rodeada por guardias que apuntaron con sus armas.
El duque Carson se levantó usando su poder del elemento de agua, todos los guardias fueron derribos.
El poder de agua al instante fue destruido por el elemento de fuego provocando que el duque Carson cayera al suelo sin piedad.
-¡Padre!-Gritó Alessandra corriendo ayudarlo.
-¡esposo! ¿Por qué están haciendo esto? Este poder de elemento de fuego poderoso es del nuevo duque Luan-dijo la madre de Alessandra mirando a su hija con nervios.
Alessandra al escuchar las palabras de su madre se levantó de manera abrupta mirando la figura frente a ella-¡Damián! Realmente lastimaste a mi padre ¿por qué te has vuelto tan cruel?-dijo con tristeza mirando la figura que se mantiene fría.
-Hermano ya atrapaste a la bruja-dijo Alex caminando al frente mirando con crueldad a Alessandra.
-Una bruja ¿yo no soy una bruja que te pasa Alex? Soy yo tu amiga-dijo mirando con incredulidad.
Alex caminando al frente mirando con desdén a Alessandra utilizando su poder teletransporto a todos al palacio de los santos.
-¡Alessandra nunca pensé que serías una persona tan cruel!-Gritó el líder de los santos usando su poder.
Alessandra fue derribada por el poder provocando que vomitara sangre en el suelo miro con incredulidad las miradas de odio de todos con incredulidad.
-¿qué es lo que he hecho?-preguntó con incredulidad.
-Aún no sabes lo que has hecho-dijo una voz llena de frialdad.
Los pasos resonaron haciéndose más cercas hasta revelar la figura de un hombre de 30 años él lleva un traje negro.
-Es hora de que pagues el precio por robar lo que no te pertenece-dijo el hombre de traje negro mirando de enfrente a Alessandra.
-¡yo no robe nada! Nunca lo haría-Hablo negando con la cabeza.
-Alessandra solo acepta tu pecado-susurro Damián mirándola con decepción.
-Damián, realmente no hice nada-susurro tratando de tomar la mano de Damián, pero él la apartó fríamente.
En ese momento el líder santo bajo abofeteando al rostro de Alessandra-¡Has envenenado a sol! Que más puede decir tu sirvienta lo ha contado todo ¡traigan a la sirvienta!-gritó.
Los guardias trajeron a una mujer que estaba toda golpeada al ponerla de rodillas comenzó a llorar con desesperación.
-¡lo siento maestra! Les he contado todo-hablo sollozando.
-Miya de que está hablando, yo jamás te he dicho y ni te he obligado a nada-hablo Alessandra con pánico.
La sirvienta miró con tristeza a Alessandra-Maestras tú robaste el poder de la verdadera santa, la encerraste y como no murió me pediste que la matara ese día que terminara el baile real, mi señorita no permita que muera acepte la verdad-gritó colocando sus manos sobre su rostro.
Todos los presentes se sorprendieron que no podían esperar a matar a Alessandra.
Damián se acercó mirando con desprecio a Alessandra-¡nunca pensé que serías tan cruel! No puedes aceptar tampoco tu pecado-gritó.
Las lágrimas de Alessandra se deslizaron con tristeza mirando a la persona que ama tratarla como si fuera un monstruo sin corazón-Yo no lo hice ¡te lo juro!
El líder de los santos avanzo mirando con indiferencia a Alessandra que está en el suelo implorando-por las súplicas de Damián no serás sentenciada a muerte, ¡tu castigo será devolverle sus ojos a sol!
-¡Mis ojos! Estos son mis ojos, nací con ellos fueron otorgados por la diosa de las flores ¡no pueden quitarme mis ojos!-hablo Alessandra tocando sus ojos con miedo.
-¡Atrevida! Esos son los ojos de mi hija sol, yo como el duque yue no permitiré que te quedes con lo que le pertenece-gritó el duque yue tratando de usar su poder de madera.
Cuando el poder estaba por lastimar su cuerpo fue protegida por una barrera de fuego.
-Duque Damián Luan ¿Realmente vas a proteger a esta bruja?-gritó señalando a Alessandra.
-Hermano no te dejes engañar, Alessandra no es la misma niña de la infancia-dijo Alex mirándola con odio.
Damián miró con frialdad a los presentes como si no les importara sus palabras en ese momento se volteó a ver a Alessandra-¡Acepta tu castigo! Alessandra devuelve los ojos de sol sin importar que no puedas ver aun asi me casare contigo.
Alessandra sintió tanto dolor en su pecho deseando poder llorar, pero aguanto las lágrimas mirando la expresión indiferente de Damián-¡Te he amado durante 16 años! Al final mi amor ni mis palabras no son nada comparado lo que te han dicho los demás ¿quieres casarte conmigo? Es solo tú lástima-pensó apretando los puños con fuerza levantó la mirada cerrando los ojos.
-ya que has aceptado yo te quitaré los ojos-dijo Damián estirando su brazo al colocar su palma sobre los ojos de Alessandra una fuerza de poder entro en sus ojos arrancando sin piedad los ojos.
Alessandra aguanto las ganas de gritar de dolor al momento de que Damián quitó su palma uso su poder curando sus ojos mientras coloca un velo blanco sobre ellos.
El duque yue miro con una luz de codicia los ojos con brillo rosa en las manos ensangrentadas de Damián.