Capítulo 2 Rarezas

Tras el cierre de esa puerta casual y repentinamente todo el sentimiento de vacío y calma que Lia había experimentado segundos atrás ya se vieron reemplazados por el verdadero motivo de tanta angustia retorcida en su interior. Esta vez toda pena que sentía por ella misma ya se estaba volcando sobre la persona que cerró la puerta en su cara en forma de desprecio y decepción. Como fue capaz de perder tantos años a su lado sin nunca darse cuenta de los verdaderos pensamientos que Gio tenia hacia ella.

Pues resultó ser que en algún momento de su relación El había experimentado algúna etapa de aburrimiento hacia Lia y eso lo llevo a "explorar" nuevos valles como asi Gio prefería llamar a su infidelidad. La había traicionado en mas de una ocacion, y siempre termino de rodillas ante ella pidiendo perdon a súplicas.

Pero ahora las reglas de ese viejo juego habían cambiado. De hecho pareciera que ambos ya estaban artos de esa especie de rutina en la que habían caído. ' yo te engaño,pero te suplico y al final me perdonas'. Lia a estas alturas ya no sentía dolor. Sino humillación, sentimiento que ella misma se había hechado encima.

Se levantó a toda priza procurando no olvidar el poco orgullo que le quedaba. Y con la frente en alto azotó la puerta y miro cara a cara a quien ella consideraba su gran amor. Pero esta vez sus ojos reflejaban decepción. Lanzó un bufido como si fuera un toro apuntando a su blanco y castañando entre dientes dijo.

-¿Acaso no te interesa saber a que me refiero con recuperarme ?