Capítulo 10 Parte 9

Laia

La ida a una piscina había sido muy divertida, hacía mucho tiempo no hacía estos planes y estuve demasiado en el agua, más de lo que debería decir, simplemente jugando y hablé con gente desconocida, una señora mayor que sí se atrevió a preguntar si estaba embarazada.

-Sí, aunque tengo pocos meses.

-Entonces debe venir muy grande o varios -Asiento.

-Es gemelar -La señora abre la boca sorprendida.

-Yo tengo dos, pero no como tú, el mayor -Señala a uno de los chicos que estuvo jodiendo hace un rato al muchacho sonrojado -Tiene 18 años recién cumplidos, por eso sigue saliendo con nosotros, aunque esta vez invitó a sus amigos para pasarla con nosotros también -Asiento, escuchando la vida de la señora -El menor tiene 8 años.

-¿no es mucho tiempo de diferencia?

-Claro, fue comenzar de uno, sumado que el mayor entraba en la adolescencia, y el otro pequeño también necesitaba mi atención de una forma diferente -Asiento escuchando atentamente lo que dice la señora, cuando me giro a buscar a Pol, lo encontré con sus lentes de sol, haciendo fotosíntesis, suelto una risa al verlo de ese modo -¿Es tu esposo? -Pregunta la señora.

-Perdón, me distraje.

-No te preocupes, ¿si es tu esposo?

-No, es el padre de los bebés -Ella asiente.

-No parece que sea de aquí.

-No, es español -La señora vuelve abrir su boca sorprendida.

-¿Cómo se conocieron?

-Es complicado -Suelto una risa incómoda, era raro decir que fue por Tinder, de Tinder a Instagram, luego nos dejamos de hablar, después quedamos con un quieto, apareció de la nada, me acosté con él, y salí preñada.

-Si no están juntos, ¿no le gustaría que le presentará a mi hijo? -Me empiezo a reír nerviosa.

-Soy mayor que él y tengo hijos.

-No importa, te podría ayudar, es un muchacho salido adelante -Me sonrojo un poco -Y padre no es el que engendra, es que cría.

-No creo que su hijo sepa que estoy de esa forma, además tengo bastantes problemas -Trato de salir del agua, pero la fuerza no me da.

-Solo deberías pensarlo, si quieres ahorita te doy su número -Lo dice tan fuerte que todas las personas se giran y yo me sonrojo fuertemente mientras nado para salir de forma cómoda, cuando llegaba a las últimas escaleras, siento la ayuda de alguien, Pol estaba ayudándome a salir y me da la toalla para cubrirme.

-¿Todo bien? -Asiento un poco tímida por las miradas de los demás, me agarra de la cintura, un poco más abajo, casi llegando a mis glúteos, esta vez no me siento mal, tal vez de esa forma me iban a dejar de ver tanto.

-Sí, solo tengo hambre -Él asiente y salimos del lugar para ir a la zona de comidas.

-¿De qué tienes antojo? -Miro todas las opciones, pero mi cabeza se llena de un solo pensamiento.

-Carne con papas -Digo tímida, él ríe y asiente para dejarme sentada en una de las mesas que estaba libre, estaba bastante lleno, pero no importaba, primero era la comida, saco mi celular del bolso que teníamos para andar con él para todas partes y lo otro estaba guardado, Nicole me había escrito, había llegado a la casa y se preocupó al no verme, le conteste que había salido y estaba en unos de los municipios en piscina, que volvíamos en la tarde, ella se tranquilizó.

-¿Con quién hablas? -Me pregunta él trayendo la comida y ponerla en la mesa.

-Nicole, se preocupó al no verme en la casa.

-Ah, tengo una pregunta -Asiento para escucharlo -¿Por qué todos tus amigos tienen llaves de tu casa?

-Ellos me ayudaron a conseguirla, me ayudan con el arriendo, porque algunas veces duermen en el apartamento o llevan chicas cuando no estoy.

-¿Es cómo un motel? -Niego riéndome.

-No, cada quien hace con su casa lo que quiera, como me ayudaron, no me negué a nada -Él asiente.

-¿Te gusta dónde vives?

-Sí, es lindo y cómodo -Él asiente y empezamos a comer, no nos lleva mucho tiempo, cuando quedo satisfecha me cierro el buso que estaba empezando hacer más frío.

Al acabar la comida, nos levantamos y veo que está ocupado con su celular, lo miro curiosa al que no dejaba de escribir una y otra vez.

-Mierda -Lo escucho murmurar, me vuelvo a sentar para verlo arreglar el problema que tenía.

-¿Todo bien?

-Sí, pasó un problema, entonces mañana tengo una reunión.

-Está bien, si quieres nos vamos ya.

-No, primero pasemos a los juegos, a los que puedas entrar o vamos donde los animales si quieres -Asiento y eso hacemos, nunca me había tomado fotos, pero vi como sacaba su celular para hacerlo.

Las horas pasaron y me invito a unas fresas con crema deliciosas para acabar nuestro día, faltaban otras dos horas para llegar a mi casa, entonces me compró algunos bocadillos para el camino, no volvió a mirar el celular preocupado, sin embargo, al meterme en Instagram, había subido una foto donde me veía con uno de los animales, pero yo estaba de espaldas, sonreí, pero la sonrisa se fue de una, solo sería la madre de sus hijos, nada más.

-Despierta -Siento el movimiento y abro mis ojos, me había dormido a mitad del camino -No te quería levantar, pero entre más tarde sea te puede pasar algo, asiento para quitar el cinturón y ver que iba a subir conmigo.

-¿por qué no te quedas esta noche? -Miro la parte de los pasajeros de atrás, tenía ropa y su laptop, entonces no sería un problema para quedarse, mañana teníamos que salir a mi trabajo.

-¿no te incomodas?

-Para nada, vamos -le digo saliendo del carro con mi bolso pequeño y una bolsa con lo que sobro de dulces.

-Entonces voy a pedir algo de comer, ¿te gusta el sushi?

-No mucho, pero sé que a ti, sí, entonces pídelo -Digo sonriéndole para entrar al edificio.

Entrando a la casa veo algunas cosas puestas diferentes, pero lo ignoro para ir a la cocina y arreglar en los cajones las sombras y otras cosas en la nevera.

-Mañana tengo una reunión tipo 5 de la mañana, aquí -Asiento y le muestro el lugar donde se puede hacer.

-Solo cierra las cortinas para que no se vea mucho el contraluz -Él asiente y se concentra en el celular para pedir la comida mientras voy al cuarto a cambiarme de ropa y darme una ducha de agua caliente, estaba cansada, aunque había comido mucho -¿Vieron, mis amores? Su papá no es tan mala persona, nos dio mucha comida el día de hoy y podremos dormir en la misma casa, no se preocupen, su mami no se va a equivocar como las otras veces, esta vez no le voy a meter corazón -Le digo a mis hijos, mientras acaricio mi vientre en la ducha, siempre hacia esto, me gustaba creer que me escuchaban y me sentían.

Al día siguiente siento la voz de Pol por la llamada, al ver la hora eran las 6 pasadas, ¿seguía en reunión? Me levanté y veo que seguía ocupado y viendo una presentación, bostezo para tener cuidado de no verme en la cámara y preparo un café, me da una sonrisa y se la devuelvo, le dejó el café y se lo señalo, para prepararme un chocolate caliente que estaba antojada.

-Ya terminé la reunión -Me habla cuando termino de preparar el desayuno.

-Buenos días, ¿qué tal te fue?

-Bien, teníamos que iniciar una nueva campaña para una marca que ya tenemos, entonces estaba explicando como sería el creativo.

-¿Tú eres director creativo? ¿Cierto? -él asiente.

-En ocasiones se me olvida que estudias algo similar a mi trabajo -Yo estaba estudiando publicidad, él había estudiado diseño gráfico y con su amigo habían creado una agencia, por lo poco que conocía, estaba consciente que el sí era algo relacionado con creativo y su amigo era de estrategia.

-Bueno, ¿si me vas a llevar al trabajo?

-¿para que te den la paga? Claro, si quieres en una hora salimos -Miro, el reloj de la cocina, era muy temprano.

-No, mejor trabaja aquí y vamos tipo 10 o 11 de la mañana, ¿no?

-Sí, así te invito almorzar fuera de casa.

-Me vas a engordar más con tanta comida fuera -Su risa ronca me hace temblar.

-Claro que no, solo que estás llena de amor -Me sonrojo un poco al escucharlo.

La mañana empieza tranquila, mientras él sigue preocupado por todos los trabajos que tenía que hacer, yo limpie un poco la casa, la cita con el doctor sería hoy en la tarde, entonces la agenda estaría ocupada, porque iría al trabajo de limpieza a las 11, luego iríamos a almorzar alguna parte cerca de mi otro trabajo o en mi trabajo, no estábamos seguros, tenía que hablar con mi jefe de la discoteca de los fines de semana, es él que más me debe dinero por trabajar tantas horas extras, estaría mucho más tarde y la cita con la ginecóloga era a las 4 de la tarde.

-No te olvides que la cita con el doctor es hoy.

-¿Cuatro?, ¿no? -Me sorprendí de que supiera la hora, estuvo pendiente.

Me termino de acomodar el pelo para salir de la habitación, estaba bien arreglado y olía delicioso.

-¿Vas a ir al hotel?

-Sí, tengo que dejar algunas cosas, mañana también tengo reunión -Asiento y me doy cuenta de algo.

-¿por qué no te quedas los días aquí? -Digo como si fuera lo más fácil del mundo, él me mira unos segundos y niega.

-No es buena idea.

-No te preocupes, porque seguirás gastando, pero el hotel es demasiado costoso cuando nunca estás en la habitación, podemos aprovechar y que traigas las cosas, total está la cama de sobra -Él suspira y por su cara se lo está pensando.

-Está bien, acepto tu oferta.

Salimos rumbo a su hotel primero, cuando vi donde se estaba hospedando me hizo reír, era el mismo lugar donde trabaja, sí o sí nos teníamos que volver a encontrar, la vida era muy maldita.

-Aquí es donde trabajo -Le digo cuando entramos a la habitación, era una normal, por eso nunca no cruzamos.

-¿En serio? ¿Por qué nunca te vi?

-Yo era para las habitaciones VIP -Le respondo mientras miro la habitación curiosa, era simple y neutra -¿Dónde vives en España es parecida a esta habitación?

-Sí -Asiente mientras guarda sus cosas -Es sencilla, pero tampoco paso tanto tiempo en casa.

-Es verdad -Miro por la ventana, la ciudad se veía asombrosa.

No se tarda mucho, primero va apagar todo, quería esperar ver al gerente, sin embargo, me ve en la recepción y se va donde mí.

-Muchacha, usted no me dijo que estaba embarazada, ¿el bebé esta bien?

-Sí, ambos lo están -Le doy una sonrisa.

-Qué susto, casi demando al señor que nos hizo pasar ese miedo, parece que había consumido una sustancia psicoactiva.

-Aún así, no debió pasar eso -Le digo suspirando.

-Tienes razón, él dio una compensación al hotel y a ti por los inconvenientes -Asiento -En la cuenta que creamos para ti, llego la plata, ¿no? -Sacó mi celular para meterme y sí, tenía más de lo que esperaba -También la paga se hará hoy, mi jefe autorizo todo, sumado las horas extras.

-Muchas gracias.

-A ti, eras muy buena empleada, lastima que no puedas quedarte más -Le doy una leve sonrisa y de reojo veo que Pol ya había terminado con todo y me estaba esperando.

-Gracias por enseñarme -Digo para quedar al lado del español, mi jefe se sorprende y luego me sonreí.

-Espero tengas mucho éxito.

-Igualmente.

-Chica -Escucho que alguien llamar, me volteo y me encuentro con un pecho, quedo un poco confundida y alzo mi mirada, me encuentro un hombre muy alto y rubio de ojos verdes -¿Tu querer darme tu número? -Su español era muy malo que solo me hizo reír.

-¿Mi número? -Él asiente y yo me sonrojo un poco, ¿de verdad me estaba pidiendo el número? -¿En serio?

-Sí, chica bonita -Suelto una risa.

-Esos extranjeros les encantas -Habla mi jefe negando con la cabeza -Algunos llegan preguntando porque ya no estás, y quieren saber tus datos personales, debes tener cuidado -mira a Pol -Si te descuidas, te la quitan -Me sonrojo un poco y giro mi cabeza un poco avergonzaba.

-¿Si número? -Pregunta nuevamente el extranjero? ¿Debía dárselo?