Capítulo 4 El pasado nunca se olvida.

E: "¿Dónde estoy?"

-Una vista completamente oscura, no había nada a su alrededor, solo era una inmensa oscuridad.

E: "¿Qué demonios está pasando?"

-Mientras observaba tranquilamente, a lo lejos percibiría una luz, dándose cuenta de que se trataba de una ciudad completamente destruida y en llamas.

E: "Siento muchos escalofríos."

-La silueta de dos personas se veía al fondo de esa panorámica apocalíptica.

E: "Tratare de acercarme y ver si los ayudo."

-Al no apreciar bien lo que sucedía, intentaría acercarse, pero, una barrera lo había repelido hacia atrás, tirándolo al suelo.

E: "Agh, perfecto, ¿Qué más sigue?

-Al reincorporarse, Ethan le recorrería un sentimiento extraño, ya que la ciudad que estaba allí había desaparecido por completo, junto con la otra silueta.

E: "Necesito... salir de aquí."

-Ethan intentaría correr, pero sus esfuerzos serían en vano ya que no se movía un solo centímetro, intentaría gritar con desesperación, pero su voz no salía, después de unos

segundos recuperando el aire, un chirrido infernal invadió su cabeza, logrando doblarlo del dolor, y entre medio del chirrido, percibiría una voz, que solamente le dijo.

¿?: "Aun no estás listo."

-Sonido de alarma molesta.

E: Mi cabeza... duele, ¿Qué demonios fue eso? -Toma su teléfono y esta vez sí mira la hora. maldición, ya es tarde.

-Ethan procedería a ignorar su sueño, procediendo despertar a sus hermanos, ya que tenían que tomar su vuelo con destino al reino de Alantia, donde su nueva oportunidad los

estaba esperando.

-Así los chicos saldrían de su hogar, despidiéndose de sus recuerdos y de todo lo que pasaron en ese hogar, mientras unas lágrimas bajaban por el rostro de Alice...

-Flashback...

-Años atrás.

¿?: Papi, papi, ¿me compras una manzana?

¿?: Pregúntale a mami Alice.

¿?: Mami, mami...

-De la nada un fuerte golpe se escucharía de fondo.

¿?: ¡Maldito mocoso, devuelve eso! ¡Ladrón!

-Un pequeño niño cubierto con una sábana, saldría corriendo hacia un callejón, mientras que el señor solo les gritaba y pedía ayuda.

¿?: Disculpe caballero, ¿Qué le robo el chico?

¿?: A ti que te importa, es un ladrón, debiste haberlo detenido, incompetente.

¿?: Por eso le estoy preguntando, ¿Qué le robo?

¿?: Un par de manzanas, no es la cantidad, si no que, ese niño no es la primera vez que me roba, también le ha robado al resto de los puestos aquí presentes.

-El joven hombre voltearía a mirar a su hija, mientras ella se comía su manzana.

¿?: Levanten la mano por favor, a quienes ese chico les haya robado.

-Unas cinco personas levantarían la mano.

¿?: Bien, tomen...

-El joven hombre les daría una moneda de oro a cada puesto afectado.

¿?: Oye, oye, esto es demasiado, ¿Por qué lo haces?

¿?: Ese chico que te robo, no creo que lo haya hecho con la intención de dañar tu negocio, o el de ustedes, simplemente, es un niño que tiene hambre.

¿?: Si... comprendo tu punto, pero una moneda de oro se nos hace excesivo.

¿?: Solo tómalo como un seguro, ahora si me disculpan, iré a ver a ese chiquillo.

A: Papi, papi, ¿hizo algo malo el chico?

¿?: Si hija, pero, tranquila, no le hare nada, solo quiero hablar con él, o en el mejor de los casos, con sus padres.

¿?: Rómulo... ¿Qué harás?

R: Tranquila cariño, ve a casa con Alice, yo las alcanzare una vez que sepa porque paso esto... vi algo raro en el chico, solo quiero comprobarlo.

¿?: Con cuidado, cariño.

R: Gracias, Elizabeth.

-Sin más, el hombre empezaría a caminar, mientras su esposa e hija lo observaban, al final Rómulo llegaría al callejón por donde el chico habría salido corriendo.

R: "Que olor tan desagradable." Chico, ¿Dónde estás? No te hare nada, solo quiero plati...

-Rómulo no terminaría de hablar, ya que sería atacado por un mini destello de luz, abriéndole una pequeña herida en la mejilla.

R: ¿Luz? Je, sabía que mi vista no me había engañado, eres un portador de la luz, sal a platicar conmigo chico...

-Rómulo al no recibir respuesta seria atacado por más impactos de luz, mientras que alguien estaba al asecho esperando la oportunidad.

¿?: Es mío.

R: Ocultas bien tu presencia, es un buen movimiento, lo admito, pero...

-En un movimiento, Rómulo tomo del brazo al primero de los dos chicos, lanzándolo al piso.

R: Oye, chico de la luz, tengo al otro chico, así que, si quieres que no le haga daño, sal de una vez.

¿?: No vengas Nathan, corre y déjame con el bastardo este.

R: Oye, un chico de tu edad no debería hablarle así a un adulto.

¿?: Jodase, junto con todos los demás adultos, estoy harto de ustedes.

R: Me gustaría saber, tienes un odio muy arraigado, se nota en tu aura ¿te gustaría platicar?

¿?: Por que insiste, le dije que no...

R: De acuerdo, eso puede esperar.

-Rómulo lo golpearía suavemente en el cuello, dejándolo inconsciente, faltando uno en pie.

R: Escuche a este chico llamarte Nathan, si tanto te importa esta persona, sal de una vez, prometo que no te hare daño... por lo que logro ver, no confían en los adultos, está bien,

pero yo no soy como los demás adultos, te lo prometo.

-Nathan al escuchar esas palabras saldría de donde estaba escondido, solo para darse cuenta de que su hermano estaba inconsciente en el piso, y que el adulto le había mentido.

N: Maldito, dijo que no era como los demás, y mi hermano esta inconsciente... ¡Lo matare!

-Rómulo, correría hacia Nathan a una velocidad impresionante, tanto que Nathan no pudo reaccionar, así dejando a Rómulo vía libre para noquearlo fácilmente.

R: Qué chicos tan problemáticos... su odio está muy concentrado en el fondo de sus corazones, ¿Qué demonios les habrá pasado?

-Unas horas más tarde, los gemelos se encontraban inconscientes en lo que parece la sala de una casa...

¿?: ...

¿?: ¿Por qué los trajiste cariño?

¿?: Porque...

-Los gemelos venían despertando, y casi no entendían lo que se estaba hablando.

¿?: Oh, parece que ya están despertando, ¿hola?

N: ¿Dónde... estoy? Ethan, ¿Dónde estás?

E: Aquí estoy hermano.

R: Así que... Ethan y Nathan, son muy bonitos nombres.

-Los gemelos voltearían hacia el frente, viendo al hombre que los dejo inconscientes, a una mujer que estaba al costado del hombre y una niña abrazada a la pierna del hombre.

N: ¡Es usted!

E: Bastardo, me dijo que confiara en usted y me ataco igualmente.

R: Hice mal, lo admito, pero es que estaban muy enojados chicos, solamente quería hablar con ustedes...

N: ¿De que quisiera hablar un adulto con un par de niños?

E: Y un adulto tramposo, por cierto.

R: ¿Por qué roban? Los comerciantes se quejan de que no es la primera vez que ustedes les roban, yo se que no es mucho, pero está mal.

¿?: robar... e... está mal...

¿?: Alice, cariño, deja que papa hable.

E: Quiere respuestas, nosotros también. ¿Quién es usted? ¿Quiénes son ellas dos?

R: Creo que es lo justo, me llamo Rómulo Baldreck, y soy el capitán de la guardia real del reino de Galadria.

Continuará...

Capítulo #4: El pasado nunca se olvida.