La Mate del Alpha
img img La Mate del Alpha img Capítulo 5 5
5
Capítulo 6 6 img
Capítulo 7 7 img
Capítulo 8 8 img
Capítulo 9 9 img
Capítulo 10 10 img
Capítulo 11 11 img
Capítulo 12 12 img
Capítulo 13 13 img
Capítulo 14 14 img
Capítulo 15 15 img
img
  /  1
img

Capítulo 5 5

Me quedo paralizada en mi lugar sin saber de donde salió esa voz, no muevo ni un musculo para ver que si fue solo una alucinación mía.

¿Esa voz volvió? No puede ser posible.

-Creo que me estoy volviendo loca- digo para mi misma porque pensaba que era solo imaginación mía, deje de escucharla hace mucho.

|Muy loca|-responde otra vez esa voz, no se parece a la mía es mas aguda y fina, parece otra persona.

Volteo a Adam- ¿Qué pensarías si te dijera que escucho una voz en mi cabeza desde hace unos años atrás?- preguntó con cautela y el responde sin despegar su mirada del frente.

-¿Qué clase de voz?- pregunta confundido.

-Ósea una voz que parece otra persona, no tiene la misma voz tuya o si quiera es como la que tu piensas.

Él parece pensarlo un rato y luego me mira unos segundos.

-¿Que te dice esa voz?- pregunta intrigado.

-No se seguro pensarás que estoy loca, pero esto si que es raro- digo y rio de una manera nerviosa e incomoda.

-No te preocupes seguro es tu conciencia- dice en tono burlón, yo solo le tiro un codazo despacio y así termino nuestra conversación tan extraña, hasta llegar al hospital, damos la vuelta y ahí esta escrito en letras negras y pequeñas con fondo blanco "MORGUE" y tan solo de leer eso mi corazón se estruja, veo que el baja primero, y abre mi puerta yo salgo y caminamos hasta llegar donde esta una señora con bata blanca, parece una doctora.

-Buenos días- digo y ella voltea sin quitar la vista de su tablilla- venimos a ver el cuerpo de la señora Margaret Sthars- termino de decir el nombre completo de mi madre y ella alza su mirada muy rápido- la trajeron ayer- termino de hablar y no puedo evitar que una lagrima traicionera caiga por mi mejilla.

Siento su mirada aun en mi-¿Son familiares?- pregunta.

-Si soy su hija- digo muy bajo.

-Ok, pueden pasar, la señora Margare Sthars presenta golpes en todo el cuerpo, más en la parte del abdomen, los golpes fueron directo a sus costillas, haciendo que sus órganos se estrujen y muera al instante, su asesino tuvo la intensión de matarla, es como si supera donde golpear para poder perder el conocimiento y así esta pierda la vida- dejo de escuchar lo que dice, solo veo como sacan a mi madre de una caja de metal que tiene el numero 24102, esta envuelta en una manta de plástico negra, la señora saca la manta y puedo ver su rostro, esta muy pálido, a perdido su color caramelo que la caracterizaba, sus ojos estaban cerrados y esta un poco más cachetona, no puedo evitar llorar y luego comenzar a hipar sin control, no podía aguantar tanto dolor, grito fuerte sin importarme nada, unos brazos me consuelan desde que comencé y escucho la voz de Adam diciéndome cosas, pero que ignoro, solo la quiero a ella, aquí conmigo. No puedo evitar escapar de los brazos que me tiene abrazada con fuerza y acercarme al cuerpo que esta a unos pasos de mi.

-Abre los ojos mami por favor- ruego, pero cuando intento tocarla me sostienen de nuevo y esta vez me sacan del cuarto en donde me encontraba, veo como vuelven a ponerla en su lugar mientras lloro sin control alguno y me abrazo con más fuerza a la persona que no duda en consolarme.

-Por favor lle-llévame con e-ella te lo suplico, quiero verla- le digo desesperada mientras le agarro la camisa arrugándosela cuando la aprieto entre mis manos, lo miro y veo mi dolor reflejado en ellos- No quiero más sufrimiento- digo aún sollozando-después del entierro y del juicio de Richard sácame de aquí, por favor- le pido, él solo me abraza sin decir mas me abraza muy fuerte.

-Nos iremos después del juicio te lo prometo- dice consolándome, me quiero ir de este lugar que tanto daño me a hecho y que me quito a la única persona que siempre he amado.

No quiero volver nunca más a esta ciudad que me dio tantos malos recuerdos, comenzaré de cero haré una nueva vida y el destino me dirá si la persona que está en frente mío, puede seguir en el o no.

Salimos de la morgue y nos dirigimos a la prisión, querían mi declaración de los hechos y luego decidirán si lo mandan preso o no.

En el auto se instala un silencio cómodo, me da mi espacio y es lo que más quiero ahora. El auto se detuvo y miro el lugar donde estamos, la comisaría. Entramos y el ambiente se torno algo denso al verlo con su mandíbula apretada y las venas de su cuello marcadas, sé que le incomoda esto y no entiendo porque está aquí si no se siente bien, no lo estoy obligando y aunque me guste ese gesto siento que no lo tiene tranquilo.

Nos dirigimos hasta un despacho que nos mando un señor diciendo que el era el fiscal y estaba a cargo de este caso.

Doy un par de golpes en la puerta, un poco nerviosa, pero firme en mi decisión.

-Pase- escucho que dice la persona de adentro, sin más sólo giro la manija y entro despacio viendo la oficina, muy simple la verdad, un escritorio de metal, cajones, reloj de pared y otra mesa donde hay muchos folders.

-Buenas tardes- saludo, ya eran más de la 1:00pm y ellos siguen aquí, acaso no tienen horario o algo así- vengo por el caso de homicidio de la señora Margaret Sthars.

Hasta decir su nombre es demasiado doloroso para mi, aún no logró entender que este muerta.

Veo al señor ponerse derecho en su lugar y darme una mirada de pies a cabeza.

-Si, sientense por favor- dice indicando las sillas que están al frente de su escritorio, caminamos hacia ellos y nos sentamos-¿Son familiares de la señora Stars?

-Soy su hija-digo con voz temblorosa porque tengo ganas de echarme a llorar de nuevo, pero ahora no, tengo que ser fuerte.

Su mirada pasa de mi a Adam y sé que me preguntará.

¿Quien es él?

¿Qué hace aquí si no es familiar?

Antes que más preguntas se hagan presentes en su cabeza hablo primera.

-Él es mi novio Adam Smith, la persona que me salvó ayer- respondo señalando con la mirada a mi acompañante, no me atrevo a mirarlo porque ya me estoy muriendo de vergüenza por decir está mentirita piadosa.

-oh entiendo, señorita Brown- dice el apellido de mi padre, lo cual me sorprende porque nunca dije mi nombre completo, o no recuerdo haber dicho el apellido de mi difunto padre.

Lo miro con el ceño fruncido de confusión y él parece haberse dado cuenta.

-No se sorprenda señorita Brown soy un fiscal a eso me dedico, tengo que averiguar todo lo relacionado a su madre- dice resolviendo mi duda.

-Bueno a lo que vino, este es un caso de feminicidio poco común en este país, él abogado del señor Richard Fuentes presentó que su cliente estaba bajo los efectos del alcohol lo que lo lleva a ser una víctima de eso, o eso quiere aparentar. Quiero escuchar los hechos de su boca señorita Brown porque sé que lo que dice ese hombre es falso y mis compañeros lo apoyan porque usted no dio su testimonio, también nos serviría de mucho el testimonio de su novio- escucho que dice y volteo peor que el exorcista porque el no es mi novio, y aunque yo inventé esa mentira fue para que no lo sacarán, necesitaba que este a mi lado.

Adam nos mira a los dos y luego se detiene en mi, su mirada me transmite la paz y la tranquilidad que necesito para saber que no dirá nada.

Después de casi una hora contándole todo, el fiscal Ramírez nos dijo que nos íbamos a mantener en contacto para tener todo preparado en los siguientes días, ya que en unos días nos llega la citatoria para el juicio de Richard, nos dijo que lo más probable era que sea el próximo lunes, Adam llamo a su abogado y en esta situación no se como le pagaré.

Después de la conversación le agradezco por todo, luego nos despedimos y salimos de ese lugar, el abogado se fue por su cuenta, nos subimos a su coche y aquí estoy viendo por el vidrio todas las casas pasar.

Lleva manejando más de 40 minutos y aún no se detiene, me está comenzando a doler mis nalgas y ya me dio calambre una vez, fue la cosa más horrible porque no podía hacer nada, además de la vergüenza por no dejar de gritar como histérica porque a este chico le pareció gracioso comenzar a mover mi pierna en medio de esa corriente que parece que tuvieras, es tan jodidamente gracioso y molesto al mismo tiempo.

Él sigue manejando y en ningún momento paró, comienzo a ver árboles alrededor y me doy cuenta que estamos en el bosque, casi a la salida de la ciudad, comienza a descender la velocidad y el auto para unos metros más adelante, estamos en medio de la nada, a mis ojos sólo llega la pista y a los lados puros árboles, es muy bonito, pero me está dando miedo esto.

Volteo para mirarlo y preguntarle ¿Qué hacemos aquí?, pero antes que nada él ya se había bajado, miro sus acciones hasta que llega a mi puerta, me invita a salir y yo niego en confusión porque aquí ¡No hay nada! Literal.

Me convenció de salir, no muy segura tuve que aceptar. Y si me deja aquí o me secuestra para venderme a una trata de blancas, o peor, si me viola y luego deja mi cadáver aquí para que un oso lo debore, esto me está haciendo pensar tonterías, sin tener mi mente en su lugar no me doy cuenta cuando estamos unos metros dentro del bosque, él pánico me embarga, y si me dice que es un vampiro como Edward e Isabella, pero después de beber sangre me deja, muchas novelas de ficción y acción después de clases en la biblioteca.

Estamos caminando hace ya 10 minutos, esto es agotador para una mujer que no hace ejercicio.

Miro al frente para no caer y veo a unos pasos, una bonita laguna, desde aquí puedo ver su agua cristalina. Es tan hermoso el paisaje que está ante mis ojos, dudo que alguien entre al bosque por el simple hecho que para todos aquí, es peligroso. Así que estoy segura que nadie sabe de este lugar.

-Sé que tienes muchas preguntas en tu cabeza, sé también que hace recién un par de días que nos conocemos no te obligare a confiar en mi, quiero ganar tu confianza, por eso no quiero mentirte, ni ocultarte nada.

Su mirada es distinta, sólo ve a un punto fijo, el agua celeste de la laguna, sus palabras me toman por sorpresa y la verdad que me gustan porque eso quiere decir que ve un futuro conmigo.

-Te tomará por sorpresa está noticia y lamento no decirte todo esto después, sé que tienes mucho que pensar, pero ya no puedo seguir fingiendo contigo.

¡¿Es gay?! Espero que no sea verdad lo que mi mente grita porque enserio me gusta este chico y que me salga con esto, solo hace que piense que tengo mala suerte.

-Soy un.. hombre lobo- dice de repente, mi cuerpo se relaja ante su respuesta por un momento hasta que me pongo en alerta cuando veo que se aleja de mi, comienza a desvestirse en mi delante, me pongo roja en ver su cuerpo casi desnudo.

Escucho algo como ramas romperse, veo su cuerpo agacharse hasta quedar arrodillado, sus huesos se rompen y se vuelven a unir con otros, esto no es real. De su cuerpo sale pelaje negro, como si de carbón se tratase, delante de mi hay un lobo, un lobo enorme. Me observa detenidamente, viendo cada mínima acción que hago, sus ojos son dorados, es tan hermoso lo que tengo frente a mi, es algo que se supone que es místico, una leyenda.

Se intenta acercar, pero yo retrocedo por instinto, por protección; él jadea, como si le doliera mi miedo, como si sintiera mi rechazo.

                         

COPYRIGHT(©) 2022