Capítulo 10 MATTEO ¿POR QUÉ ESTAS DESNUDO

Narra Albert

Cuando me desperté Matteo estaba dormido a mi lado, quise levantarme para ir al baño, traté, pero mis músculos fallaron y me caí de la cama, grité adolorido

-Maldita sea, qué dolor -Matteo se levantó sobresaltado diciendo

-¿Qué?, ¿qué está pasando? ¿Albert en dónde estás?

-Acá abajo mierda, quiero ir a orinar, no puedo pararme carajo, esta mujer me dejo molido anoche, ayúdame por favor

Escucharlo, reírse, más me hizo enojarme, pero me quedé callado, pues, tenía que ayudarme y mejor me aguante el coraje, no dije nada, esperé que me levantara y me llevara al baño, allí me dejo, me sostuve solo hasta después de lavarme los dientes, para salir de nuevo lo llamé

-Matteo ya estoy -Vino presuroso a ayudarme y dijo

-Te voy a ayudar a bañarte Albert, estás sudado por lo de anoche jajajaja

-¿Me vas a bañar tú? ¿Acaso tengo la cara de ser Gay? -Se carcajeó oyendo mis palabras y soltó

-Albert no puedes hacerlo, vamos y deja ya de rezongar

Accedí que más da ya, pero no me imagine cuando me di cuenta de que el muy mierda se iba también a desnudar para bañarme, cuando sentí el contacto de su piel lo observe y dije alterado

-Oye, estás desnudo también, ¿en qué estás pensando? Me estás escuchando... Matteooo

Solo se reía y me cargo en peso, me metió debajo de la ducha y abrió la llave cuando estuve mojado, empezó a enjabonarme, pero comenzó a joder con sus palabras

-Albert recién me di cuenta de que tienes las nalgas bien rellenitas jajajaja -y lo decía justo cuando su mano paso jabón por ellas y yo reaccioné moviéndome rápido, pero ese movimiento me hizo pagar precio, me dolió a los remil diablos y grité para su gusto haciéndolo reírse aún más de mí

-Ayyy Matteo, eso dolióoo -sus carcajadas eran escandalosas cuando asomó la cabeza a quien menos quería que viera este cuadro de ambos hombres desnudos, la violadora de Clarisse que al vernos soltó

-Con razón te enojaste Albert, vaya de haber sabido tus gustos -y se fue carcajeándose

Yo solo observé a Matteo que se reía, pero termino de bañarme, me cargo hasta la cama y me dejo sentado, fue a mi closet y saco una muda de ropa casual para la casa, me ayudo a vestirme y otra vez me cargo para bajar a desayunar

Los guardias observaban lo que venía yo en brazos de mi amigo, pero nada decían bueno frente a mí no, pero vaya a saber a mis espaldas y eso me daba coraje, pero al fin me sentó y me sirvieron mi desayuno mi nana Marina me consintió dándome mis golosinas, Clarisse se sentó más lejos y a cada rato se sonreía a veces no se aguantaba y se reía en complicidad con Matteo

Ya no aguanté y solté enojado

-Dejen de reírse mierda, yo no soy Gay, para nada, me gustan las mujeres

Clarissa me miró y sin tapujos soltó delante de mi nana

-Si tanto te gustan las mujeres, ¿por qué me reclamaste lo que hicimos Albert? -eso me dejo con la boca abierta, lo soltó delante de mi Marina y ella dijo sorprendida

-Mi niño, ¿de qué está hablando la señorita? -miré a mi nana y tartamudeé

-Nana ehm yo... yo... después te... cuento nanita -seguí comiendo y sentí la mirada dura de Marina que se dio vuelta y siguió haciendo sus quehaceres en la cocina

Por dentro estaba que echaba fuego en contra de Clarisse, pero Matteo dijo muy tranquilo

-Cálmate Albert, más tarde viene el quiropráctico para revisarte si es que tienes algún problema con tus músculos, estás bien golpeado y yo inquirí furioso del enojo, solté lo que no quería que se enterara mi nana

-Cómo no quieres que tenga algo en los músculos si me violaron en mi propia cama ah -cuando termine de decirlo reaccioné y vi a mi nana mirándome asustada y Matteo hablo enseguida

-A mí no me mire, ella se le metió a la cama a Albert -mi nana la miró muy enojada y le dijo

-Pero, ¿cómo se atreve? Una mujer educada como usted -Clarisse sin imaginarse que mi nana es como mi madre se atrevió a contestarle feo

-Albert es un adulto y puede hacer lo que quiera, usted no es nadie para recriminarme nada, es solo una empleada -Al oírla mi rabia creció más, ah no, ella no iba a menospreciar a mi nana querida y le grité

-Lárgate de mi casa Clarisse, ella es mi nana, es como mi madre y nadie le falta al respeto, largateee -Matteo se quedó callado y ella se levantó muy enojado tiro el vaso de jugo en la mesa, recogió su bolso y antes de irse exclamo

-Esta me la pagas Albert, ya lo verás -se fue dando un portazo, mi nana vino a abrazarme y calmarme

-Mi niño no se enoje, ya se fue esa mujer, además aquí su amigo tiene razón, debe estar listo para cuando venga el doctor

Matteo volvió a cargarme subiendo las escaleras me acostó en la cama, dejo la puerta abierta de la habitación y después regreso con su celular encendió la TV y puso canciones de YouTube para hacer Karaoke, ambos cantábamos algunas canciones hasta que llego el quiropráctico, que entro y Matteo estaba cerca de la TV cantando y bailando

Si hubiera sabido lo doloroso del examen que iba a hacerme el doctor, hubiera preferido dormir mejor y más con lo que pasó después

Mis hermanos habían llegado para visitarme y escucharon mis gritos de dolor y mi nana les dijo

-Mi niño está con su amigo y...-no escucharon el resto, llegaron como una tromba muy enojados y gritando

-Déjalo marica está adolorido, no seas abusivo -el doctor los observo extrañado y Matteo también, ellos al ver al quiropráctico se calmaron y solo dijeron

-Oh, es que Marina nos dijo... ehm no pasa nada, siga doctor, perdón -dijo Damián, los dos salieron y llamaron a Matteo y le preguntaron

-Hola, somos hermanos de Albert y queríamos saber ¿cómo está, Albert? -Matteo les contó, sin embargo, omitió el sexo con Clarisse dejaría a la decisión de su amigo si les dice o no.

Se escuchaba por toda la casa los gritos de dolor de Albert, pero era necesario que el doctor lo revise, cuando al fin terminó salió y comunico

-El paciente tiene contractura muscular debe reposar 48 horas y tomar este antiinflamatorio y este relajante muscular que les voy a recetar, además deben ponerle calor seco como por ejemplo cobertores eléctricos para calentar los músculos y ayudar así a que se reponga más rápido

-Gracias, doctor, dijeron los dos -se fue el quiropráctico y entraron todos

-Voy a comprar las medicinas -dijo Carl

-Albert ya te trae las medicinas Carl y debes estar tapado con esto -me tapó con el cobertor eléctrico, se sentía calentito, qué rico y volvió a hablar

-Mmmm te veo raro, ¿paso algo que no sepamos? -Ay, mi Dios, ¿qué hago?, ¿le digo o no le digo? Cuando se enojan no ven nada, solo actúan y preferí no decir nada y contesté

-No Damián estuve tranquilo, además aquí Matteo me está cuidando -Él solo sonrió corroborando lo que decía

Cuando llego Carl tome mis medicinas y parece que te hacen dormir porque al rato empecé a bostezar y mis hermanos se despidieron pidiéndole de favor a Matteo que no me deje solo y Él aceptó

NARRADOR

Albert dormía plácidamente por los efectos de las medicinas, pues, entre ellos había unas cápsulas que eran sedantes, soñaba que estaba caminando por una arboleda y que de repente alguien le tapa los ojos y se ríe, la voz le parece conocida, pero cuando le sacan las manos de su rostro no se divisa a nadie alrededor, todo está tan callado solamente el cantar de las aves se escuchaba en ese solitario lugar, le llego un perfume de mujer que le encanto, sin embargo, a la dueña no se la veía por ninguna parte, a lo lejos caminaba una chica que sonrió y le lanzo un beso volado, Él corrió para alcanzarla, pero no podía ella corría como gacela y desapareció dejándolo parado allí solo y con dudas de saber de quién se trataba

Narra Dianne Carter

-Dios mío, ya llegó mi papá, prepárate Dianne, pobre de miiiii -lo dije temblando de miedo

Pobre Albert la follada de Clarisse tuvo repercusiones en su cuerpo, ahora a esperar su recuperación y saber quién era esa mujer que vio en sus sueños, mientras en otra parte de la ciudad la rebelde causante de que su profesor este adolorido está muy asustada, pues llegó su padre para imponerle el tercer castigo que a ese es al que teme más