/0/2895/coverbig.jpg?v=6f5fc10500d4432395a19fc0b1742bf9)
Pasan los días, y todos siguen organizando el funeral de mi supuesto esposo.
Voy a la funeraria, donde están preparando el cuerpo de mi marido, bueno, del que creen es mi marido, para el velorio. Quiero verlo, pero no me atrevo a entrar, a último momento me acobardo y me voy.
Esa tarde junto a mis familiares, amigos, socios y prensa, velamos