Soy consciente de que podría pedir mi libertad, pero también sé que esta no me será dada mucho menos estando frente al señor así que mi movida había salido mejor de lo que imaginaba.
-Y bien que has decidido? - este hombre podía poner nerviosa a cualquiera y me incluyo, pero no dejaría que él lo notara.
-Si hay algo o más bien alguien que estoy segura de necesitar y espero que al señor no le moleste lo que pediré - podía ver como la vena su cuello quería explotar pues supongo él sabía que iba a pedir y le molestaba más el hecho de que no podía detenerlo.
-Hay una de las chicas aquí que es como mi ancla, Belén y quisiera que ella venga conmigo - baje la cabeza para hacerme ver lo más sufrible posible.
-Bien ira con nosotros y no tendría por qué molestarse tu jefe puesto que el pago es más que por dos de ustedes.
-Como usted quiera. Manda al guardia a buscar a Belén y llévenla con la doctora para que le instalen el chip de rastreo a ella también.
-Espera un momento - el hombre se veía no sé cómo definirlo exactamente, pero parecía molesto e incómodo - ¿le has puesto un chip de rastreo a la señorita aquí presente también?
-Claro que, si no queremos correr el riesgo de que algún escape, debemos mantenerlas vigiladas de alguna manera.
Yo sentía que sobraba en esta oficina, pero el hecho de pensar que escapar podría ser más fácil sin el chip de rastreo me dejaba un tanto aliviada puesto que no tendría que preocuparme por ello.
-No llevare a ninguna chica con un rastreador, es más que suficiente con que sepan mi nombre, mis negocios y donde trabajo como para que quieran saber también la dirección exacta de mi casa eso no lo voy a permitir, así que decide se los quitas o no hay ningún trato - no podía creer que mi jefe se quedara callado mientras este hombre prácticamente le daba órdenes sin parar eso demuestra que tan ambicioso puede llegar a ser.
-Bien lo haremos a su manera pero si ellas escapan la responsabilidad caerá sobre usted y hay un contrato de por medio, llama a la doctora dile que venga a la oficina con lo que necesite para retirar el rastreador y dile a Belén que aliste sus cosas no le digas para que - el guardia salió de la oficina y solo quedamos los tres el señor Garsia tomo asiento en un sofá negro que había en uno de los rincones de la oficina y solo se dedicó a observarme después de solo haberlo hecho una vez desde que llego, su mirada estaba fija en mi cara como si ya me hubiera visto.
POV DIEGO
Nunca perdí las esperanzas de verla de nuevo, sabía que tarde o temprano nos íbamos a rencontrar, aunque duele que no me recuerde o quizás solo no me reconozca después de tanto tiempo. Me jode que este en este sitio de mierda, me encabrona solo imaginar todas las cosas por las que tuvo que pasar aquí adentro, sé que cuando sepa la verdad pensara que me demore demasiado en salvarla, pero sabré que lo hice y que siempre creí en mi instinto de que ella estaba viva, pero hare las cosas lentas y planeadas para no levantar sospechas.
Me alivia saber que tuvo un apoyo mientras estuvo aquí y saber que aún tiene ese corazón de querer ayudar a los demás me hace pensar que no esta pérdida del todo y que solo es cuestión de tiempo recuperar a esa niña alegre que fue en su momento.
POV CAROLINA
Cuando el guardia volvió lo hizo con Belén y la doctora, le sonreí a Belén para que sepa que todo iba bien y no se preocupara quiso sonreír, pero no lo hizo.
La doctora se acercó a mí, hizo un pequeño corte mi brazo y metió una especie de pinza chica para poder sacar el rastreador, hizo todo sin anestesia y sentía que dolía como los mil demonios, pero no hice ningún sonido y menos algún gesto que lo demuestre odiaba que pensaran que era una persona débil.
-Ahora que ya no hay ningún chip creo que puedo llevarme a las dos mujeres sin ningún problema - me acerque delicadamente a Belén y le toma la mano para hacerle ver que estábamos juntas en esto.
-Es un placer hacer negocios con usted señor Garsia nos vemos al regreso de las chicas que disfrute.
-El placer es todo mío lo puedo asegurar, bien ahora si nos iremos.
Este podía ser el inicio de una nueva vida y estoy segura de que no voy a desaprovechar la suerte que se me ha dado.