Podía escuchar a muchos chicos que conversaban entre ellos, había varios grupos que los dividía; no entiendo a los humanos ellos son complicados.
Aquella fragancia que sentí en el bosque la cual provenía de aquel cachorro llego a mí, lluvia y chocolate la cual inundaba mis fosas nasales.
~mierda ese cachorro está aquí~
Corrí dentro de la gran escuela y ubiqué los baños femeninos, entre y empecé a dar vueltas porque seguro ya se habría dado cuenta de mi presencia.
~concéntrate killary, oculta tu esencia ~
Me repetía una y otra vez hasta que lo logré y salí para encontrarme con unos grandes ojos azules viéndome de arriba abajo para luego empezar a olerme.
Me asusté y caí al suelo.
-Issac deja a la chica la estas asustando-
-pero juro que la olí-
-Issac seguro te lo imaginaste-
-que no Taylor ella está aquí aun lo siento, es leve, pero...-
Conversaban enfrente mío aquellos dos jóvenes, como si nada y luego se retiraron sin más.
~que descortés es tu hijo hermana mía ni una puta disculpa~
Comente al aire
Muy bien ahora donde está la dirección para que me den mis cosas pensé mientras caminaba y al fin la encontré, había un señor alto, delgado y canoso de unos 46 años o más esperándome.
-señorita moon?- pregunto este
-si- respondí cortésmente
-bien señorita llega un poco tarde, pero se lo pasaremos por ser su primer día- decía el señor mientras caminaba a la puerta
-lo siente no se volverá a repetir-conteste con la voz más gentil
-Sígame..-
Dijo mientras me hacía señas con la mano para seguirlo
-y dígame señorita moon de donde viene-
-vengo de Transilvania- conteste gentilmente y con un pequeño rastro sarcástico ya que de ahí vienen la mayoría de mis hijos
-es usted una joven muy educada ya quisiéramos que los demás alumnos fueran como usted-
-ya lo creo-
-espero pueda sobrevivir a estos salvajes-dijo con cara de preocupación mientras tocaba una puerta.
Al abrirse esta se podía escuchar un caos dentro, gente gritando y papeles volando, la puerta sr abrió en pocos segundos y de ella salía una mujer de lentes, de unos 50 años talvez.
-miss Wellch, aquí le traigo a nuestra nueva alumna, la señorita moon- me señalo el hombre
-genial, otro salvaje más que domar, señor shelton-
-disculpe, miss, pero la joven moon nos visita desde Transilvania y parece ser una joven con buenos modales- señalo
-disculpe mi interrupción a su clase miss, mis escusas sobran para explicar mi tardanza a, pero le aseguro no se repetirá-dije en un tono muy cortes
- valla, tiene razón señor shelton, creo que por fin tendré un alumno en este salón que realmente preste atención- dijo alzando la voz haciendo callar a todos dentro.
-Entre- dijo sonriente la miss
- silencio bola de salvajes que tengo un anunció que hacer- grito la miss porque aquel silencio antes echo no había durado mucho
- qué?, por fin nos dirán que el director se murió por tanto coraje- grito alguien y rápidamente busqué la voz y cuando lo encontré era el cachorro, fruncí el ceño y él se dio cuenta de mi acción y me respondió igual
- si eso llegara a pasar seguro usted sería el responsable, joven Hunter, pero hoy les presentare a su nueva compañera- decía la miss mientras que algunos no eran capaces de prestar atención, me moleste y un pequeño gruñido salió de mí, inaudible para los humanos, pero, él y otros chicos que lo acompañaban en su desorden voltearon rápidamente quedando en silencio.
-valla al parecer algo les llamó la atención...muy bien señorita preséntese - ordeno la miss
-mi nombre es moon..-
-jaja luna tu- escuche las burlas de los chicos después del comentario del cachorro
-silencio joven Humter o llamare a sus padres-
-me llamo killary moon y vengo de Transilvania-
-no serás un chupa sangre- se burlaba el cachorro
-con esa piel pálida probablemente si- añadió una chica de piel bronceada cabello rubio y ojos cafés nada especial, era muy común.
-agradezco su bienvenida y no espero mucho de ustedes- dije cortésmente para que la profesora me guiará a una silla en la que podría estar.
Las horas pasaban y las clases se me hacían fáciles, ya me sabia todo, desde las matemáticas hasta literatura
La última clase era literatura, ultima hora para irme de ese aburrido lugar, claramente podía ver el desinterés del cachorro en las clases porque o estaba jugando o saltándose clases o como ahora dormido.
-joven Hunter grito- el profesor llamando la atención de este que casi se caía de la silla.
-si cual es el problema- decía mientras desordenaba aún más aquel cabello castaño.
-podría leer donde me quede del libro- dijo enseñando el enorme tomo de romeo y julieta de William sheksper.
-Aah si-
Tomo el libro saber en qué página se encontraba, entonces el profesor se arto y dijo
-señorita Moon podría orientar al joven Hunter- que carajos?, porque yo?, pensé y me puse de pie, comencé a recitar.
-killary: ¡Sólo tu nombre es mi enemigo! ¡Porque tú eres tú mismo, seas o no Montesco! ¿Qué es Montesco? No es ni mano, ni pie, ni brazo, ni rostro, ni parte alguna que pertenezca a un hombre. ¡Oh, sea otro nombre! ¿Qué hay en un nombre? ¡Lo que llamamos rosa exhalaría el mismo grato perfume con cualquiera otra denominación! De igual modo Romeo, aunque Romeo no se llamara, conservaría sin este título las raras perfecciones que atesora. ¡Romeo, rechaza tu nombre; y a cambio de ese nombre, que no forma parte de ti, ¡tómame a mi toda entera! -
Comencé a recitar a julieta y estaba tan concentrada que se me olvida por completo retener mi aroma, mala idea pues el cachorro se dio cuenta y enseguida me miro con desesperación, unas ganas de tenerme...pero lo que hiso me dejo con la boca abierta, pues el me siguió la contestación de romeo a julieta si necesidad del libro como si se lo hubiera leído tantas veces que se grabó cada estrofa del libro.
Issac: - Te tomo la palabra. Llámame sólo "amor mío" y seré nuevamente bautizado. ¡Desde ahora mismo dejaré de ser Romeo!
Dijo en tono meloso
Killary:- ¿Quién eres tú, que así, envuelto en la noche, sorprendes de tal modo mis secretos?
issac:- ¡No sé cómo expresarte con un nombre quien soy! Mi nombre, santa adorada, me es odioso, por ser para ti un enemigo. De tenerla escrita, rasgaría esa palabra.
Killary:- Todavía no he escuchado cien palabras de esa lengua, y conozco ya el acento. ¿No eres tú Romeo y Montesco?
issac:- Ni uno ni otro, hermosa doncella, si los dos te desagradan.
Terminamos de hablar y miramos al frente donde el profesor parecía estar petrificado ante aquel acto. no mejor dicho ante el hecho de que Issac se supiera las líneas de romeo de memoria.
-sorprendente joven Issac, señorita Moon- ante su opinión le regale una cálida sonrisa a lo que Issac soltó un gruñido mirando con desprecio al profesor y apretando los puños.
-Issac tranquilo amigo siéntate ya-
-pero. -dijo volteando a verme y rápidamente me senté, intenté concentrarme de nuevo en ocultar mi aroma esperando que hubiese algún cambio en el.
Mi hermana me las pagaría, enserió que sí, ¿cómo se le ocurrió emparejarme con uno de sus hijos?, yo los odio.