Capítulo 10 Hombre rico

Yoyo extendió su mano con decisión y apartó la mano de Sheryl. Sentada tranquilamente en el sofá y comiendo sus bocadillos, dijo: "No hay nada que pueda hacer. Soy una persona impotente. No sé dónde expresar mis quejas si ofendo a alguien ".

Sheryl curvó los labios, se puso la ropa y se acurrucó en el mismo sofá con Yoyo. Ella le guiñó un ojo y dijo: "¿Cómo te despidieron? Aunque tu molesto jefe siempre quiso despedirte, no encontró ninguna razón, ¿verdad? ¿Le pillaron haciendo trampa en la empresa? "

Las comisuras de la boca de Yoyo se crisparon. Tenía que admirar la imaginación de Sheryl. Se asomó la frente y dijo: "¿En qué estás pensando? Debe haber un hombre para tener una aventura conmigo ".

"Duele..." Sheryl se cubrió la frente con la mano y se sintió agraviada. Cuando escuchó la última frase de Yoyo, sus ojos se iluminaron. "¿Tienes un hombre? Vos si..."

El significado de esa oración fue significativo. Yoyo la miró sin palabras y luego encendió la televisión con decisión, ignorando a la mujer emocionada.

"No me tomes como un tonto, ¿de acuerdo? Solo me preocupo por ti. En mi corazón, solo quiero que encuentres un hombre mejor. Es mil veces mejor que Chappell ".

Yoyo sabía que solo quería vivir una vida mejor, pero a veces, la felicidad no aparecía en vano.

¿Por qué había una bala recubierta de azúcar? ¿No significaba que el amor no podía resistir la tentación de la riqueza? Lo primero que sentiste quizás dulce, y luego descubrió que era una bomba.

Al ver que Yoyo no tuvo ninguna reacción, incluso se comió sus bocadillos y miró la televisión con gran interés.

Sheryl le hizo una mueca, se levantó del sofá y caminó frente a ella. "¿Cómo es? ¿Soy hermoso? ¿Puedo usar esto para una entrevista? ¿Es lo suficientemente formal? "

"¿Vas a una entrevista?" Al escuchar esto, Yoyo finalmente dejó de comer bocadillos y la miró. Pensó rápidamente en lo que estaba pasando por su mente.

Para ser honesta, no podría haberse ido sin la orden del gran jefe, porque ahora necesitaba un trabajo con urgencia. Si su madre supiera que no tenía trabajo y vivía una vida tan miserable, definitivamente la dejaría volver.

"Por supuesto. Escuché que Royal City Hotel está reclutando ahora, así que voy a tener una entrevista. ¿Que pasa contigo? ¿No acabas de perder tu trabajo? ¿Quieres ir conmigo? Sheryl la miró parpadeando, pensando que si estaba con ella, podrían trabajar juntas.

"¿Royal City Hotel? ¿No pertenece a NK? " Yoyo tomó su bocadillo de nuevo y se lo comió. Obviamente, ella ya no estaba interesada en eso.

Sheryl la miró y se sintió confundida, "¿Qué le pasa al Grupo NK? Hay tanta gente que quiere trabajar en NK. ¿Odias el dinero para no querer trabajar allí? "

"Ja, ja, ¿en qué estás pensando? Odio el dinero? ¿Debes estar bromeando? ¿Cómo puedo odiar el dinero? No tienes que preocuparte por eso. ¡Ve a la entrevista! "

Simplemente no quería trabajar para Patrick. Ella simplemente lo ofendió no hace mucho. Aunque no sabía si él todavía la recordaba, la amenaza que experimentó esta mañana todavía estaba viva en su mente.

Tan pronto como se fue, sonó el teléfono de Yoyo. Fue su madre quien llamó. Tenía un pequeño dolor de cabeza por la llamada telefónica de su madre. Dudó por un momento y finalmente presionó el botón de respuesta.

"¿Hola, Yoyo? ¿Estás en el trabajo ahora?" La voz preocupada de mamá llegó desde el otro lado de la línea, lo que hizo que Yoyo aún más dolor de cabeza.

"No. Hace unos días firmamos un gran contrato y nuestro jefe nos dio un día libre. No iremos a trabajar hasta mañana ". No quería mentirle a su madre, pero conocía bien a su madre. Si supiera que ahora ni siquiera tenía trabajo, definitivamente la dejaría volver.

"Oh, te vas hoy. ¿Por qué no llamas a mami cuando estás de vacaciones? ¿No sabes que estaré preocupado? ¿Sigues trabajando en esa empresa como antes? ¿Cómo te va? Tome una foto de su empresa y de usted mañana cuando vaya a trabajar. Déjame mirarte bien. Bertha parloteó. Sus palabras estaban llenas de preocupación y prestó la mayor atención al trabajo de su hija.

Yoyo respondió: "Por supuesto que te extraño. No se preocupe. Te visitaré la próxima vez que esté de vacaciones. Tengo un buen trabajo y mis compañeros también son buenos conmigo. Te tomaré fotos mañana ".

Aunque lo dijo, solo pudo sonreír amargamente en su corazón. Ella había perdido su trabajo. ¿De dónde sacó las fotos?

"Eso es bueno. No se deje engañar. Mami siempre serás tú. Será mejor que sepas cómo protegerte cuando juegas al aire libre. Por favor no ... " Al otro lado del teléfono, Bertha seguía regañándome por Yoyo, temiendo que la lastimaran y no se lo dijera.

Yoyo sabía que si sabía que estaba despedida, definitivamente la aceptaría, ¿no es así?

Había amenazado a sus padres antes de salir del armario. Sabía lo preocupada que estaba su madre. A los ojos de su madre, ella era solo una niña. Solo a la vista de su madre podría estar a salvo. Mientras dejara de ver, se sentiría incómoda.

Después de colgar el teléfono, Yoyo se sintió un poco incómodo.

Parecía que tenía que encontrar un trabajo lo antes posible, o su madre definitivamente le pediría que regresara a casa.

Pero, ¿qué tipo de trabajo podría encontrar?

Cuando llegó la hora de cenar, Yoyo estaba de mal humor y no salió.

Por el contrario, Sheryl regresó feliz con las comidas para Yoyo en la mano.

"¡Sabía que estabas aquí! No cenaste, ¿verdad? Aquí estás."

Yoyo tomó las comidas y comenzó a comer.

Aunque estaba de mal humor, eso no afectó su apetito, ¿verdad?

"El Royal City Hotel es realmente agradable. Es propiedad de NK. Es muy bien pagado y fácil de usar en todos los aspectos. ¿Estás seguro de que no irás allí? " Sheryl, que había cenado, se tumbó sobre la mesa y la miró parpadeando.

Yoyo enarcó las cejas con calma, se llevó una cucharada de comida a la boca y murmuró: "¿No sabes quién es el jefe de NK?"

"¿El jefe de NK?" Sheryl parpadeó y dijo: "¡Patrick! Por supuesto que lo sé. ¡Había tantas mujeres en una ciudad que querían casarse con él! Si te casas con este hombre rico, significa que tienes montañas de oro y plata ".

Sin embargo, Yoyo no reaccionó. Ella se rió de sí misma y dijo: "El hombre al que golpeé ayer fue Patrick. Puede que me odie mucho. Y me amenazó esta mañana diciéndome que yo sería responsable de ello ".

Sheryl frunció el ceño y la miró con incredulidad. "Qué... ¿Qué? ¿Quieres decir que el hombre con el que casi te acostaste ayer era Patrick? ¿El director ejecutivo de NK? "

Yoyo no podía entender por qué estaba tan emocionada, así que asintió con calma.

Sheryl se echó a reír de repente. Estiró las manos para tocar los hombros de Yoyo y negó con la cabeza. Dijo con un tono emocionante, "¿Por qué sigues tan tranquilo, Yoyo? ¿Sabes con quién casi te acostaste ayer? ¡Fue Patrick! ¡Un hombre rico! ¡Casi te acostaste con él! "

Le dio unas palmaditas a Sheryl, que estaba agarrándola por los hombros, y dijo con una sonrisa: "Es una pena que no me interese el dinero y no tengo ninguna relación secreta con él". ¡En general, tenemos enemistad entre nosotros! ¡Sheryl, somos enemigos! ¡Incluso me amenazó esta mañana! "

"¡Maldición! ¡Escoria!" La expresión facial de Sheryl cambió enormemente y envolvió sus brazos alrededor de los hombros de Yoyo. Ella se enojó y dijo: "Ni siquiera le gusta una mujer tan hermosa como tú. Incluso te amenazó. No esperaba que Patrick fuera una escoria inmoral. Estoy muy decepcionado."

"No importa. De todos modos, no iré al Royal City Hotel para una entrevista. Una ciudad es tan grande. ¿Cómo puedo encontrarme con él tan fácilmente? Tal vez me olvide en dos días ". Yoyo se encogió de hombros y mostró su indiferencia hacia este hombre.

Una ciudad era tan grande. ¿Por qué debería elegir Royal City Hotel?

Además, sintió frío al pensar en Patrick. Lo que sucedió esta mañana todavía estaba fresco en su mente. Ella realmente no quería provocarlo.

Sabía que no podía permitirse el lujo de ofender a ese tipo de hombre. Ella tenía una clara estimación de sí misma

El segundo día, Sheryl se fue a trabajar temprano. Yoyo buscó una variedad de trabajos en Internet y compró un periódico.

Envió sus hojas de vida para varios trabajos que pensó que podía hacer. Por la tarde, recibió un correo electrónico pidiéndole que fuera a una entrevista.

El primer lugar de trabajo al que fue fue un café para gatos. En cuanto a por qué volvió al trabajo de camarera, también fue porque le gustaban mucho los gatos. Sería bueno si pudiera cuidar a los gatos.

Pero este trabajo sería excluida al final por ella misma, porque su madre estaba muy disgustada con este tipo de trabajo y no quería que la lastimaran así.

Estaba bien para ella tener una buena entrevista porque podía jugar con esos gatos.

El segundo entrevistado fue un empleado, seguido de la dirección del hotel, asistentes de diseño ...

El rango de entrevistas fue muy amplio, pero todas le fueron aceptables. ¿Podría aprender si no lo sabía, siempre que tuviera un conocimiento básico?

La habían entrevistado durante dos días y ahora sentía que su vida no era mala. Podía ir a muchos lugares para una entrevista todos los días, y los diversos estilos de vida siempre hacían que la gente lo esperara con ansias. Ahora quería trabajar como asistente de diseño. Si pudiera aprender algunos conocimientos de diseño, incluso podría diseñar para su hogar en el futuro, sería bueno.

Pero ella no le había informado si había pasado la entrevista, por lo que estaba tomando café tranquilamente en el café.

De repente sonó el teléfono. Al ver el nombre en la pantalla, se rió entre dientes y cogió el teléfono.

"¿Es Yoyo?" La voz del jefe seguía siendo tan fría. Incluso el significado de su nombre hacía que la gente se sintiera dulce, todavía hacía que la gente se sintiera fría cuando la llamaba.

"Sí lo soy. ¿Qué pasa, jefe? " No habría contestado el teléfono si no fuera por aburrimiento.

"¿Firmó el contrato con el Sr. ¿Patricio?"

Yoyo respondió con duda. Ella firmó el contrato, pero la habían despedido. ¿Qué tenía que ver con ella ahora?

"Vuelve al trabajo. Te daré tres veces el salario. Puede continuar asumiendo el control del proyecto ". La voz del jefe era incuestionable. Nadie se atrevió a negarse, pero el que le habló fue Yoyo.

Otros le tenían miedo, pero Yoyo no.

"Si quieres despedirme, despídeme. Si quieres que vuelva, déjame volver. ¿Crees que soy más interesante? " Yoyo se burló.