Capítulo 5: 14 de Febrero
Sabiendo que soy tímida y es una de las grandes desventajas de mi personalidad me atreví escribir una carta expresando mis sentimientos hacia él.
Yo a veces me sorprendo de la inocente que soy y para identificar mi carta es como darle mi sello personal bueno y adivina qué?, para identificarla le puse un gran corazón rojo. A veces me siento ridícula por lo romántica que soy le escribí cosas muy bonitas y tiernas. Ahora queda esperar hasta mañana.
***
Me despierto, me alisto y voy para la escuela a entregar la dichosa carta.
... ... ...
-Ho... hola cómo estás?... ¿Tú tienes una carta para entregar ?. - Me pregunta Isabel curiosa
-He... si por supuesto es hora de que yo misma le diga lo que siento.- «a través de una carta ¡recuerda!, ¡recuerda!».
-Bueno vamos a donde están recolectando las cartas, para entregarlas juntas.- Me recalca Isabel con una gran sonrisa que desprende ansiedad mezclada con alegría.
Buscamos donde este los chicos de la "recolección de cartas" y la entregamos ambas respiramos tomamos aire con la esperanza de que pase algo interesante.
-Bien ya está hecho.- Digo volteándome a ver la caja en donde metí la carta. (Ya está hecho esto es un punto sin retorno).
Pasan los primeros bloques de clases nada interesante mientras que ellos aprovechan para bromear
-¿Qué le escribiste que lo amas?.- Dice Jan sardónicamente
-Ja. Sí le escribí que lo amo mucho, sabes es malo que no tengas a misma suerte.- Lo miro con una mirada afilada. Él retrocede.
-Bien vamos a ver que dice.- Trata de cambiar los ánimos.
-Bueno ya tú escribiste alguna carta?.- Pregunta Wolker a Jan para desviar las tensiones.
-Eh... (Desvía la mira)... No nadie de aquí se merece este P-A-P-A-S-I-T-O.- Trata de decirlo con orgullo pero nosotros tres sabemos que nadie pagaría por él. Por eso nos quedamos en silencio.
-Y tú Wolker, ¿Le escribiste a alguien?.- Pregunto porque me invade la curiosidad.
-No, no tenía tiempo.- Dice con sinceridad
-Ok.- Termino despidiéndome para volver al salón.
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-Estoy súper ansiosa.- Isabel casi grita de la emoción desprendiendo unas que otras lágrimas de emoción.
-Me siento igual.- Digo tratando de ser fuerte.
Llegan unos chicos repartiendo las cartas.
(Hace tres días mande a Jeremy a preguntarle el apellido a Jesús porque aún no he tenido la valentía de acercarme a él, Jeremy me dijo que se apellida "Caza" pero por favor lo busque por Instagram y no apareció así que no estaba muy segura). Por cierto ese no era su verdadero apellido, así que mandé la carta con el nombre equivocado, espero que llegue a la persona correcta.
Gracias a dios me dieron como cuatro cartas. Al sonar la campana avisando el receso salgo ansiosa, recorro toda la institución para ver si él tenía mi carta.
Espera, ESPERA! Él tiene mi carta en su mano?, la tiene...
¡SI!, la tiene en su mano, oh por Dios, no siento mis piernas.- Me sostengo de un pilar que está al frente del oratorio.
-Si tiene mi carta, ¡ujuuu!.- Grita con entusiasmo y emoción Isabel.
-¡Te está buscando!.- Me dice Wolker con cara de seriedad
No sé, de donde me salen las fuerzas y le digo a Wolker que me deje de estar buscando camorras que no estoy para juegos.
-No es verdad.- Exaltado por mi franqueza responde tembloroso.
No sé qué hacer en este punto al fin y al cabo nunca paso nada y el tema quedo en el olvido.
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No sé por qué siempre quiero saber de él, si no le hablo me parece absurdo pero a la vez de mi parte me parece tierno. De seguro deben de ser las hormonas que no sean desarrollado bien y sí no es eso es la tiroides he venido sospechando de ella hace un tiempo.
-Meses después-
Al llegar a la escuela nada se veía diferente solo que el salón de Diego estaba conmocionado.
Pasaron los bloques normalmente como siempre hasta que tercer bloque de clases no las dan libre ya que la profesora no asistió. (Capaz no asistió por un problema en la tiroides, viste, ahh, yo estuve sospechando de ella y bum alguien sale herido).
-Estoy triste.- Me mira como si le hubieran arrebatado un pedazo de su alma a Isabel.
-Por qué, dime, ¿qué pasa? ¿Alguien te hizo algo?.- Pregunto extrañada del humor negro que lleva.
-Es que...Agh... Diego se va del país, se va a Argentina.- Dice soltando unas gruesas lágrimas
-Eh...- (No sé qué hacer aquí a mi jamás me había pasado esto).
-Sabes quizás esto no sea tan malo como parece al menos él va estar mejor.- Digo muy incómoda ya que no sé cómo consolarla.
Al parecer mi comentario lo ha arruinado más de lo que estaba.
-Es que tú jamás has sentido o que yo siento y por eso actúas así...sin... sentimientos. -Estaba en lo cierto.
A lo lejos veo una señora en la seccional creo que Diego tenía una hermanita y creo que esta con esa señora.
-Hey Isabel, ¿esa no es la mamá de Diego?.- Pregunto con una sonrisa maliciosa que al parecer no se da cuenta.
-Eh... Mmmmm... Sí, si es. ¿Por qué?.- Creo que al parecer sabe para qué es porque se pone pálida
-¡No!, sí es lo que estoy pensando, ¡no lo hagas! No lo hagas.-
JAJAJA, ¿No lo voy hacer?, claro que lo haré aunque sea un poco infantil no me importa.-
-¡¡SUEGRA!! ¡¡SUEGRA!! Aquí está su nuera venga la quiere conocer.- Empiezo a gritar sin que nadie me pare.
La señora empieza a buscar con la mirada a quien la está llamando ya que es la única señora que está allí el día de hoy. ¿Coincidencia? No lo creo.
Nos ve... Isabel esta mas pálida que antes y me pellizca el brazo y me grita en el oído
-Jamás vuelvas a hacer eso.- Me dice con un tono que en algunas veces lo ha usado, mentira ella siempre utiliza ese tono desadecuado.
Me suelto y le digo que no me toque.
Furiosa se sienta en una esquina y no me dirige la palabra en toda la hora libre.
En verdad tengo que aprender a conocer gente estoy súper aburrida y ya parezco la borracha de la fiesta que hizo un desmadre y se fue a dormir. Agh... quiero irme de aquí.
Pasa la hora libre y nada más nos queda un bloque. Pasado este bloque me largo de esta escuela y me voy para mi casa. Aburrida, me quedo pensando en el transporte público que tengo que ser más sociable. Porque es horrible sentarse sin hablar con nadie en una hora libre.
Dejando mis miedos y angustias a un lado y bajo del transporte para llegar a mi casa y darme un baño larga para quitarme estas energías negativas.