Capitulo4
Los hijos de la noche
La noche fue elegida, y sus hijos convocados.
fueron las palabras de la madre noche, tras leer una carta enviada, que provenía de vulcania, y esta, decía asi...
Un sólo objetivo, han de eliminar, el cachorro del lobo, tristemente su vida has de quitar.
La vida del hijo de mi enemigo, tienes que cegar, edvard es su nombre, hijo del falso rey, draemonth lovernus, tu contacto será, un bastardo llamado klain, quien será guía, para que lleves a cabo, lo que hoy, gran madre de la noche te pido, y llegado el momento completar.
el destino será el bosque de las libélulas, mi contacto esta organizando una cacería de jabalíes, en esa zona, mis 2 hijos irán también con un pequeño séquito, como señuelo, pero sólo a uno podrás tocar, sin su vida quitar,
Para no levantar sospechas. como he de saber, el pago, lo acostumbras a cobrar al finalizar el contraro,te honro con la primera parte siendo la mitad, y la, otra mitad más un bono extra, al finalizar, espero prontas noticias, oh.! Madre de la noche.
Braehgor vulcarian. (Huella de sangre)
Los caballos fueron ensillados, las dagas y espadas, afiladas y las ballestas cargadas.
La cabalgata espectral, daba inicio a una cacería de lobos, una noche una muerte por cada miembro, es el credo que rezan los hijos de la noche, a su diosa (vesperi) quien los proteje, si el credo es honrado. su líder es la más mortífera de todos ellos, a quien llaman madre, pocos conocen su nombre real, excepto sus víctimas que antes de ser, llevados al otro mundo, por el filo de su daga, muestra su rostro, pronunciando el credo: in nóminus vesperi, seguido de su nombre (ashka) como símbolo de respeto. El camino era largo y la muerte cabalga con prisa, mientras un principe, se adentra en las fauces de de su último atardecer sin saberlo, siendo guiado por la falsa confianza, la hermandad, y el amor de un preciado amigo, a quien siendo Escudero lo consideraba su igual. La noche cayó, y trajo consigo a sus hijos, su líder dirige el ataque ashka: hijos míos hemos llegado, solo debemos dejar los caballos aquí, prepárense que el objetivo, es muy hábil con la espada, recuerden si es posible no tocar á los vulcarian, es fácil reconocerlos por su cabellera roja. La noche, dejaba ver un firmamento lleno de estrellas, cual parecían piedras preciosas en el, y una lúgubre, y hermosa luna llena de color rojo, anunciaba la sangre que sería derramada. A lo lejos, se puede ver la luz de una fogata y escuchar las notas de una flauta alegre, mientras la muerte avanza, pasó a pasó con sigilo, y con ballestas en mano, rodean el campamento, para llevar a cabo la misión encomendada y dar fin al contrato. Los dardos fueron liberados, acabando con la vida de sus primeras víctimas. la señal de alerta fue dada, y el combate iniciado entre ambos bandos. ahska, se desliza entre las sombras producto, del resplandor por la fogata entre los árboles, cual fantasma sin poder ser alcanzada, poco a poco va cegando las vidas de quienes se oponen ante ella, mientras su objetivo dirige el combate en defensa de los suyos, y sus adversos vulcarian, a quien defendía a capa y espada, la duda susurro al oído de ashka, algo que jamás le había sucedido, esta por un momento creyó que sería su diosa vesperi, quien le hablo para detenerla, pero el contrato había sido iniciado, y los hijos de la noche jamás deshonran su palabra. ashka, se va acercando poco a poco caminando entre los cadáveres, esparcidos por el campamento, mientras sus hijos rodean a edvard, esta da la orden que paren, al ver como protege la huida de su supuesto enemigo, dudando una vez más. Edvard al ver que eyra y su hermano se alejan a salvo, este regresa al combate, lleno de ira y confundido les habla a sus asesinos, que se quedan parados frente a el como espectros salidos del mismo infierno. edvard:- asesinos.! Quien los envia.? - y una mano por el hombro derecho de edvard se desliza con suavidad, y un susurro en su oído, pronunció las sigueintes palabras: in nóminus vesperi, seguido, de un gran dolor mientras es atravesado con una espada, por el lado izquierdo de su espalda. La sangre se derrama a borbotones, por la herida causada, mientras también es vomitada. La muerte, al sacar su espada de la del dorso de edvard, esta lo recuesta boca arriba, y mirándolo a los ojos, se quita la capucha mostrando un bello rostro, ilumimado por la hoguera, que deja ver una cicatriz, en su mejilla izquierda y esta, tomandolo de las manos le dice: no es nada personal, los hijos de la noche han sido convocados, y su madre ha contestado. Yo ashka, solo fui instrumento, de tu partida al otro mundo. dicho esto, el resto de los asesinos corean el credo,-in nóminus vesperi- y desaparecen cual sombras en la noche...
(In nóminus vesperi)