En el momento que el guardia menciono el nombre del gerente, la jovencita supo que había cometido un muy grave error al amenazarlo, sabía que, si se arrodillaba y suplicaba perdón, sería imposible que el señor Alex la perdonara, pero no tenía ni una mejor idea, así que lo llevo acabo.
Sin perder tiempo, la joven se arrodillo a los pies de Alex y comenzó a besarlos pidiendo perdón, pero para su mala suerte, Alex no le prestó atención y llamo al guardia que estaba ahí también.
-- ¿Qué desea señor? –Pregunto el guardia mientras se cruzaba de brazos enfrente del señor Alex.
-- Ya sabes qué hacer con esta escoria de la sociedad, dale una lección para que sepa cuál es su lugar. –Miro con desprecio a la joven.
El guardia asintió y agarro en brazos a la joven y se la llevo a un callejón para darle una lección.
Alex se acercó a Harry y se inclinó enfrente suya. – Bienvenido señor Wilson, lo estaba esperando, por favor acompáñeme.
Harry asintió y siguió a Alex adentro del banco para entregarle su tarjeta. Estuvieron mucho tiempo adentro hablando, cuando terminaron de hablar, Harry y Alex se habían hechos buenos amigos.
Alex se quería ganar el favor de una persona tan importante como lo era Harry Wilson. Harry salió de la oficina con su tarjeta y se acercó a un cajero para sacar diez mil dólares, al momento de retirarlos, se quedó frio ya que se acordó que no llevo su mochila con él.
No sabía dónde guardar todo ese dinero, miro a todos lados buscando algo en lo que llevar el dinero, vio a lo lejos una funda de basura, se apresuró a cogerla y ahí guardo todo el dinero que había sacado.
Al salir del banco fue despedido de una manera muy educada por el guardia que lo había echado antes.
Harry no dijo nada y solamente se fue del lugar. Pensaba irse caminando otra vez a la universidad, pero vio su teléfono y vio que ya era tarde, así que paro un taxi y se fue rápido a la universidad.
El taxi no se demoró mucho tiempo en llegar, apenas llego justo a tiempo a la universidad, había perdido mucho tiempo lidiando en el banco, ya casi era hora de la segunda clase del día.
Salió apresuradamente del taxi y corrió hasta su salón de clases ya que su segunda clase estaba a punto de comenzar.
Llego a su salón y abrió la puerta y entro de golpe al salón, asustando a todos sus compañeros con su entrada tan repentina.
Para suerte de Harry, Lily ya estaba en el salón buscando a Harry, el cual llego justo a tiempo.
Lily, Jack y los demás amigos y amigas de Jack miraron a Harry con odio ya que no querían que aparezca, ya que querían que lo expulsen de la universidad, pero aún estaban felices, ya que sabían que daba igual que aparezca Harry, igual no tenía el dinero para pagar el dinero de la matrícula.
Lily se puso seria y del pupitre del salón le hablo a Harry. – Harry, ¿tienes el dinero para la matricula?, si no lo tienes, mejor vete, quedaras expulsado de igual manera. –Jack y los demás no aguantaron la risa y comenzaron a reír a carcajadas, al igual que Lily.
Pero Lily dejo de reírse al ver que Harry tenía una mirada muy seria y confiada en su rostro, la cual incomodaba terriblemente a Lily y a los demás en el salón.
Harry sin decir ni una sola palabra, se paró enfrente del pupitre del profesor donde estaba Lily y justo bajo sus narices, alzo la bolsa de basura que tenía en las manos.
-- ¿Qué es eso?, ¿te vas atrever a pagar con basura enfrente de la presidenta? –Jack hablo con la única intención de burlarse de Harry, lo cual funciono, porque sus amigos comenzaron a reírse de él.
Pero Harry no les prestó atención y desamarro la funda de basura y arrojo todo el contenido en frente de Lily, lo cual sorprendió a más de uno, ya que nadie se esperaba que Harry tuviera tanto dinero, incluso sorprendió a sus amigos.
Jack, Lily y los demás amigos de Jack comenzaron a morderse el labio y maldiciendo en su interior, ya que sabían que habían sido humillados por el pobre de Harry. En un instante, varias personas comenzaron a lanzarle miradas asesinas y llenas de odio a Harry.
Lo cual hizo que Harry sintiera un escalofrió en su espalda, ya que era la primera vez que sentía miradas tan tenebrosas mirándolo fijamente.
Cuando Harry comenzó a contar dos mil dólares para dárselos a Lily, amigo de Jack se puso de pie y grito.
-- Harry, dinos de donde sacaste todo ese dinero, ¿o no será que te lo robaste de alguien?
Seguido también hablo Jack. – Si, Harry, cuéntanos de donde sacaste todo ese dinero, porque nadie te cree que conseguiste todo ese dinero de la noche a la mañana, seguramente de lo robaste a alguien mientras no asistías a clases. – Jack comenzó a confiarse un poco, pero aún estaba nervioso, ya que, si Harry resultaba ser rico y poderoso, mucha gente comenzaría a tratarlo mejor y a él lo dejarían en el pasado.
Lily y todo el salón se quedaron atentos a lo que Harry diría, ya que también tienen mucha curiosidad por saber de dónde un pobre como él pudo conseguir tal cantidad de dinero.
Harry recordó como todos lo habían tratado desde que llego a esta universidad, tenía unas ganas muy grandes de contarles a todos que ahora era rico y poderoso, pero pensó con detenimiento, "Si dijera que ahora soy el hombre más rico de la ciudad y que soy dueño de toda la calle comercial Laquista, todos los hipócritas comenzarían a tratarme mejor solo para conseguir algún beneficio, y mis amigos que siempre han estado para mí, dejarían de hablarme ya que pensarían que ya no seriamos iguales, ¡NO!, no puedo contarles la verdad".
Harry suspiro un momento y dijo. – Ese dinero me lo dio generosamente un hombre muy rico por haber salvado a vida de su querida hija. –Harry pensó que nadie le iba a creer, ya que sonaba a fantasía.
Pero para su sorpresa, todos en el salón le creyeron y todos se sintieron mucho más aliviados al saber que Harry seguía siendo bastante pobre.
La sonrisa confiada y burlona de Jack volvió aparecer, al igual que la de sus amigos, ya se sintieron mucho más aliviados y confiados como siempre habían estado.
-- ¿Quién te crees que eres para venir a presumir en frente de todos nosotros tu dinero, sabiendo que no eres más que un pobre que tuvo la suerte de salvar la vida de la hija de un hombre rico?, ¡Es mejor que guardes tu dinero y recuerda tu lugar y más te vale no creerte superior a nosotros solo por tener unos ocho mil dólares! –Jack se sentía muy molesto con Harry y trato de humillarlo de nuevo, y de nuevo tuvo efecto, otra vez todos comenzaron a reírse de Harry.
Harry no presto atención a las risas y burlas de sus compañeros, ya que se sentía calmado al ver que nadie se enteró de que era millonario, pero al mismo tiempo se sentía enojado por no haberlo dicho.
No valía la pena prestarles atención a esas escorias, Harry guardo todo su dinero y se fue a sentar en su puesto. Cuando termino la clase, salió junto a David y fueron a su dormitorio donde Harry guardo su dinero y saco un poco ya que iban a la cafetería.
Ambos se sentaron en la mesa donde siempre se sentaban y comenzaron a comer lo que habían comprado.
Cuando Harry iba a tomar un bocado de su comida, de repente sus ojos se pusieron oscuros y sintió que un par de manos le taparon sus ojos. David que estaba enfrente de Harry vio a la persona que le había tapado los ojos a Harry y se molestó, su tranquila y bondadosa cara, paso de mostrar una sonrisa tranquila y alegre a una de odio en un instante.
-- ¡Tú!, ¡¿Qué demonios haces aquí?!, ¡Es mejor que te largues de aquí ahora! –Harry al oír a su amigo tan enojado, también se preocupó, pero tampoco sabía de quien se trataba.
Con algo de fuerza pudo librarse de las manos de la persona que le estaba haciendo esa broma, las manos se sentían como si fueran de mujer, Harry miro para atrás y una mirada de un odio profundo aparición en sus ojos.