-No, no, no, no, no... mi nombre es ese pero les digo un secretito, mi alias es Cuervo Azul, ¿Sabes porque?, porque visto de negro y mi cabello es azul- dicha esa tontería empiezo a reír como loca y ahora que lo recuerdo me da muchísima pena.
-Somos de Protección Especial, el rastreador te lo quitaste hace unas semanas pero el arete también tiene uno y te localizo aquí, Karmin dice que vuelvas y a ti también Enrique- habla el segundo hombre y mi yo en el recuerdo ríe para luego correr de vuelta al bar, donde minutos después salgo con sangre en mi nariz y un guardia me trae sujeta del brazo.
Es ahí donde llegan policías y me llevan a las instalaciones de la CIA.
-Eres tú- dice orgulloso de su gran descubrimiento el chico.
-Si lo soy, pero no recordaba nada de esa noche, tengo recuerdos de la policía llevándome donde Karmin pero sólo eso- me sincero y trato de recordar más pero no puedo.
-Hola Lucinda, ¿Cómo estás?- Belcebú cuestiona apareciendo a mi lado.
-Bien y tú- respondo amable o eso trato.
-Deberías decírselo a tu cara porque no le llego el mensaje-comenta gracioso Luzbel.
Le veo mal y busco a Belial con la mirada, el chico parece sentir mi mirada porque voltea y asiente.
Hasta el momento podría decir que luzbel, Rafael y Leviatán son uña y mugre, Belial y Satanás son como las mejores amigas chismosas y Belcebú es el solitario que le habla a todos pero no tiene amigos.
-¿De qué presentación hablaban?- cuestiono para olvidar lo antes dicho por Luzbel.
-La maestra de música hace una noche de bandas cada semana y esta vez nos ha tocado el turno a nosotros- responde Satanás.
-Y la chica mortal toca algún instrumento o solo será espectadora- un Rafael sarcástico llega a nuestro circulo.
-Supongo que por ser nueva Luci va a estar viendo- defiende Belial.
-Toco la guitarra y el piano- comento enojada.
-¿Algo más?- desafía el peli azul.
-A si, también cago arcoíris- y con eso tiene para callar su hermosa bocota.
¿Hermosa?
Horrible boca.
Malditas hormonas.
-¿Cuál te sabes?- pregunta Belial.
-De bandas casi todas, acústicas y estudie tres años en la escuela del orfanato, estuve en una banda de club y eso- respondo simple y él sonríe en aprobación.
-Perfecto, tocamos November Rain, llévenla a ajustar el piano y pónganle un uniforme, no quiero perder puntos de habitación por una mortal- dicho eso Rafapitufo se va llevándose su guitarra.
-Y luego dicen que el intenso soy yo- comenta Luzbel.
-¿Puntos de habitación?- pregunto y todos me ven como si tuviese tres tetas.
-Veras Luci, cada habitación son seis camas, pero hay un líder que tiene que ver por todos, si te metes en problemas el líder puede sacarte de ellos, si no le agradas te jode, si no portas el uniforme son cinco puntos menos, aquí todo tiene un orden y contigo en nuestra habitación debemos tener cuidado porque eres una chica y todo el rollo- explica Satanás, pero aún me queda la pregunta más importante.
-¿Quiénes duermen aquí y cuál es el líder?- luzbel ríe, Belcebú se hace el distraído y los demás fingen no escuchar.
-Beli, Luz, Bel, Levi, tú y Rafa- responde Satanás.
-¿Y yo?- se queja el chico pelo negro, todos le vemos como preguntando porque dice eso si no hay más camas.
Pero antes de hablar entran cuatro señores con cosas, cama, ropa, una mesita, un sofá, poster, lámparas, entre otras cosas.
-Fue Rafael- dice de pronto Bel respondiendo la duda de todos.
-Me toca los cojones, este tío no duerme- se queja jalándose el cabello Luz.
-Apoyo al pendejo de ojos grises- comenta Beli.
-Si duermo, sólo se quejan porque no les agradó- se defiende el chico.
Qué pena no saber su nombre...
(Es Hades y si del inframundo, pero se hace llamar Richard o Richi)
Esa nota informativa mental me llega en un dos por tres y empiezo a buscar al responsable de ella.
Belial está jugando con Sat, Leviatán y Bel están charlando.
Veo a Luz el egocéntrico y este me guiña el ojo.
-¿Chicos, me prestarían unos zapatos?- cuestiono dudosa y los seis pares de ojos me ven y luego sus pies.
-No te quedarían- responde Beli con pena y es cierto, no me quedan.
Les dejo y me voy a donde están mis otras maletas, aun no abro la que me dio la secretaria, al abrirla me encuentro con el uniforme, es una falda de varios paletones como de algún colegio privado, la camisa es blanca y de mangas largas, trae una corbata y una chaqueta del mismo material y color de la falda (negro).
También esta un uniforme para ejercicios físicos y lo que más me sorprende son los cinco pares de zapatos que hay en la maleta, unos tenis blancos, unas hermosas botas estilo militar de color negro, unas vanz y dos pares de sandalias.
Al fondo esta una nota de Karmin.
¨Suerte en tu nueva aventura, Fuerzas Leona¨
Psdtt: Las botas las elegí para parte del uniforme, le darán un toque de tu estilo al colegio de críos engreídos.
Sonrió ante la nota de la seriedad en persona y elijo uno de los dos uniformes que me envio, por total son cuatro, dos de cada uno, también saco las botas y un par de calcetines.
Cierro la maleta y me dirijo al baño, antes de entrar me aseguro que nadie venga y todos están ocupados, unos se arreglan el uniforme y otros terminan de guardar sus instrumentos.
Trato de no tardar en vestirme y según el reloj de pared aquí tan solo tarde quince minutos, repaso mi ropa y todo va en orden, las botas están geniales, optó por hacerme una coleta alta y dejo un par de mechones de adelante fuera, es una costumbre mía.
Salgo llevando la maleta que deje antes aquí con mi ropa vieja y la dejo en la cama que tome como propia.
-¿Lucinda?- una voz un poco conocida me llama con cierta duda.
Al voltear me encuentro a Beli, esta asombrado y su cara es igual a la de los cuatro chicos detrás de el.
-Si, dime- digo sonriendo, el mueve la cabeza y luego habla.
-Ya es hora de irnos, falta media hora para que den el orden de presentación y otra media hora para que empiece todo, ya viste como se pone Rafa, asi que vámonos- asiento y empiezo a caminar junto a él, aunque no avanzo mucho ya que alguien toma mi muñeca, volteo a ver quien es y me encuentro con los ojos azules de Rafael.
-Ten, te hace falta la corbata y el reloj de los miembros de Lux- su forma de hablarme es ¿amable?
Acepto todo y saco un reloj pequeño de color plateado, al lado contrario dice Lux grabado en letras azules, es bastante sencillo pero bonito, me lo coloco con la ayuda de Beli y dejo la caja de color negro donde venia en mi cama.
Con la corbata en la mano ahora si salimos de la habitación en busca de la sala de música.