Esperaba que Mario terminará de bañarse y arreglarse para hablar con Él.
Solo 4 de las invitadas habían llegado a un acuerdo economico con sus Escorts y habían desaparecido en alguna de las recamaras preparadas para la ocasión y estaban disfrutando mucho de los servicios de sus chicos.
Las invitadas restantes disfrutaban bailando, riendo, conversando, besándose con sus Escorts, bebiendo y comiendo, la fiesta era un rotundo éxito.
Cuando Karina por fin bajó, algunas invitadas la rodearon emocionadas para que les contará que tal había sido su experiencia con el bizcocho de
Mario.....
Algo aburrida, la hermosa mujer caminó por la habitación nupcial y estaba viendo lo que habia en una mesa alargada cuando Mario la abrazó por atrás y le susurró al oído...
"Debo decir que esperaba tu visita, tan ansiosa estabas por saber si había complacido a tu amiga?".
Después de decir esto Mario soltó a la hermosa mujer y la volteó para verle el rostro y darle un beso en la mejilla.
"No, se que quedó más que satisfecha con tus servicios Bombón, solo quería agradecerte el dulce gesto que tuviste con mi pequeña amiga, Lily, ella había estado un poco deprimida por su reciente divorcio."
"Sabes muy bien que me gusta dar un servicio de excelencia a mis clientas, por eso tú y yo somos socios Marina."
"Por cierto te ves hermosa está noche".
"Gracias bombón, tu estás muy guapo como siempre, me encanta tu nueva loción."
"Dime de quien fue la idea?"
"Tuya o de Gustavo?"
"Gustavo? Porque lo mencionas?"
"Bombón, me refiero al casi telenovelesco momento cuando Gustavo le pidió ser su novia a Lily hace un rato, ese beso fue muy romántico!"
"Lily se veía encantada y yo igual."
Mario casi se había olvidado de lo que había visto antes de tener sexo con Karina y ahora Marina venía y se lo recordaba...
Frustrado se dió la vuelta para no ver a Marina y se acercó a la ventana para ver el jardín y entonces la vió.
Lily caminaba por el césped, descalza y tomada del brazo de Gustavo quien la veía con dulzura mientras ella como una niña pequeña soplaba burbujas de jabón.
"Mírala, hacia tiempo que no la veía sonreir así, tus chicos realmente ofrecen el mejor servicio, casi le creo sus atenciones de novio adolescente".
Le dijo Marina cuando se acercó a la ventana y vio a la sonriente Lily.
"Por cierto tu colección de juguetes sexuales crece sin control, de verdad alguna vez haz tenido que usarlos?"
"Solo en una que otra ocasión, es un plus de dinero."
"Huuumm... Mario el Empresario, por eso te quiero, porque tú si piensas con la cabeza de arriba, no con la de abajo."
"Si ya estás listo baja y disfruta de la fiesta de acuerdo?".
"Lo haré, gracias."
Le dijo Mario mientras veía como Marina volvía a ponerse sus zapatos, tomaba su copa de vino y cerraba delicadamente la puerta.
Volvió a mirar por la ventana y aún seguían ahí, Gustavo acariciaba el brazo de Lily mientras ella seguía soplando burbujas de jabón y riendo, su risa le incomodaba porque sabía que Él no la provocaba.
Quería bajar y hablar muy seriamente con Gustavo, quería saber si la había complacido en la cama, si había gritado su nombre mientras la penetraba y si había logrado darle un orgasmo...
Esta idea lo sorprendió....
"Porque estoy molesto?"
"Ella no es nadie para mí y aún así ha conseguido enfadarme."
"Lily...es un bonito nombre, corto pero bonito"
Meditaba Mario quien cerraba la puerta y bajaba las escaleras.
Marina y Karina platicaban amenamente y al ver a Mario le entregaron una copa de vino y le pidieron que degustara el banquete.
Se acercó a la mesa y se sirvió unos deliciosos entremeses y estaba por elegir un postre cuando la voz de Gustavo lo hizo voltear a su costado.
"Que tal va tu noche Mario?"
" Placentera?"
Preguntó Gustavo mientras tomaba otro diminuto plato para servirle un postre a Lily.
"Podría preguntarte lo mismo, cuánto le estás cobrando a tu clienta por la fantasía del novio adolescente?"
"Esta táctica tuya nunca la había visto y espero que sea costosa".
Le dijo Mario mientras lo veía con algo de recelo y disgusto.
"Ella sabe que solo es por esta noche, ella misma me lo pidió y no, no le he cobrado nada."
"Lily es muy dulce y la verdad me ha caído muy bien, es divertida, espontánea y no me ve solo como un pedazo de carne para satisfacerla, así que, por una noche ambos jugamos a los novios y somos felices".
"Que estupidez."
Pensó Mario quien quería borrar del mapa a Gustavo.
"Gustavo! Tienes mi postre?"
Una sonriente Lily preguntó detrás de Gustavo quien se volteó para verla.
"Lily, Él es Mario, mi jefe y el mejor Escort, es toda una leyenda en este ámbito."
"Señor Mario, encantada de conocerlo."
Acto seguido le estrechó la mano a Mario sin verlo a los ojos, sabía que no soportaría su ardiente mirada...
"Lily, me disculpas un momento? Necesito ir al baño, ahora regreso preciosa."
"Claro! Te espero en el jardín mi amor."
A Mario se le quitaron las ganas de comer ante ésta escena y dejó su plato en la mesa, tomó del brazo a Lily y salió con ella al jardín.
"Sucede algo malo Señor Mario?
Preguntó Lily contrariada.
"A qué estás jugando Lily?"
"Perdón?"
"Te diviertes a costa de Gustavo?"
"No, claro que no Señor Mario."
"No sé de qué habla."
"Ya te llevo a la cama?"
"Porque le interesa Señor Mario?"
"Podrías contestarme por favor?"
"No, no me ha llevado, ni me llevará a la cama, porqué?"
"Le estoy haciendo perder dinero Señor Mario?"
"Porque si es así hablaré con Gustavo para fijar una cantidad por su servicio extra de fingir ser mi enamorado novio si eso le complace."
"Eso es cosa de Gustavo."
"Entonces que le preocupa Señor Mario lo que Él y yo hagamos?"
"Porque no me miras a los ojos?"
Lily se quedó con la boca medio abierta pues no sabía que contestarle.
Mientras que Mario quería besarla, lo que iba en contra de sus reglas, pero Él era el jefe y podía romperlas.
Arrinconó al fondo del jardín a la asombrada Lily y la obligó a mirarlo.
Quería ver esos ojos color miel fijos en los suyos y en nadie más.
Sin pensarlo la abrazó, quería probar sus labios y sin decir nada la besó.
Lily sentía que estaba en sueño.
Mario la besaba ardientemente.
Ella había visto sus ojos y casi le parecían sinceros, pero Lily no creería nada, ni de Él ni de Gustavo.
"Quería hacer esto, en verdad necesitaba hacerlo."
Se repetía Mario mientras disfrutaba besar a Lily.
Sus manos comenzaron a acariciarla por encima del vestido y Lily emitía pequeños gemidos mientras también acariciaba el cuerpo de Mario haciendo que disfrutará aún más.
Después de algún tiempo, Mario dejó de besar a Lily y le acarició su hermoso rostro mientras la veia a los ojos.
Había sido uno de los pocos deliciosos besos que Mario habia robado.
"WOW Señor Mario, usted si que es un experto, casi creí que ese beso fuera genuino."
Pensó Lily mientras se calmaba y recuperaba su aliento.
"Dígame, esto es parte de su servicio o tendré que pagar algo extra?"
***********By Liliana Seytu**********