Una tarde te encontré
img img Una tarde te encontré img Capítulo 2 Mi nueva vida
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Capítulo 6 ¿Qué escondes, Khale img
Capítulo 7 No tienes que entenderme, Cleare. img
Capítulo 8 Clases de literatura. img
Capítulo 9 ¿Qué pasó con Adén img
Capítulo 10 Adén no es mi amigo, Jones. img
Capítulo 11 ¿Qué quería Adén Glenn contigo img
Capítulo 12 Te protegeré de todo alejándote de mí, Cleare. img
Capítulo 13 ¿Vamos al cine img
Capítulo 14 Adén y la llegada de Kovalenko img
Capítulo 15 Los Kovalenko img
Capítulo 16 Aceptaré tu invitación, Adén. img
Capítulo 17 ¿Chaparra img
Capítulo 18 ¿Qué hace Cleare con él img
Capítulo 19 Debemos tener más cuidado. img
Capítulo 20 Padres ausentes. img
Capítulo 21 Vanesa Kovalenko en el instituto. img
Capítulo 22 ¿Mi día podría empeorar más img
Capítulo 23 Iremos al centro comercial, Vanesa. img
Capítulo 24 Nuestra primera cita, Adén. img
Capítulo 25 Nunca es tú intención, Khale. img
Capítulo 26 Salí corriendo. img
Capítulo 27 Una verdad desconcertante. img
Capítulo 28 ¿Cómo te lo digo, Adén img
Capítulo 29 Mis visiones y Cleare. img
Capítulo 30 Nos vemos mañana img
Capítulo 31 Nos vemos mañana, dos. img
Capítulo 32 El inicio de mi propio infierno. img
Capítulo 33 Clase de literatura. img
Capítulo 34 Clase de literatura, dos. img
Capítulo 35 No sé cómo seguir. img
Capítulo 36 No sé cómo seguir, dos. img
Capítulo 37 Te deseo lo mejor, Khale. img
Capítulo 38 Volvió a decepcionarte, Cleare. img
Capítulo 39 Adén, por favor. img
Capítulo 40 Adén. img
Capítulo 41 Una noche, Cleare. img
Capítulo 42 Esta y todas las que vienen. img
Capítulo 43 Antes de la boda. img
Capítulo 44 La boda img
Capítulo 45 Ya está fuera de nuestras vidas. img
Capítulo 46 Amor img
Capítulo 47 La verdad sobre mi verdadero yo img
Capítulo 48 Vamos a ser padres, Cleare. img
Capítulo 49 Verdades. img
Capítulo 50 Amenaza antes de la boda. img
Capítulo 51 Reencuentro img
Capítulo 52 La boda. img
Capítulo 53 Algo te preocupa. img
Capítulo 54 Noche de bodas. img
Capítulo 55 Sueño. img
Capítulo 56 Irnos lejos. img
Capítulo 57 Mi vieja casa. img
Capítulo 58 ¿Qué pasa en esta casa img
Capítulo 59 ¿Quiénes somos en realidad img
Capítulo 60 Creí verla. img
Capítulo 61 Sé quien eres. img
Capítulo 62 Sé quien eres, parte dos. img
Capítulo 63 Noah. img
Capítulo 64 La solución para Adén. img
Capítulo 65 Libre. img
Capítulo 66 Nacimiento. img
Capítulo 67 Velkan img
Capítulo 68 Llegamos img
Capítulo 69 Luz en la oscuridad img
Capítulo 70 Primer encuentro con Vanesa. img
Capítulo 71 Vida sin sentido. img
Capítulo 72 Desgracia. img
Capítulo 73 La guerra comienza. img
Capítulo 74 No puedes dejarme sola. img
Capítulo 75 Huye conmigo. img
Capítulo 76 El destino siempre encuentra la forma. img
Capítulo 77 Debemos encontrarla. img
Capítulo 78 Hoy acaba todo. img
Capítulo 79 Amor eterno img
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Capítulo 2 Mi nueva vida

Khale Mickelson

Mi vida ya no era la misma, no si la comparaba con los dulces y buenos momentos de mi niñez, cuando pensaba que todo lo que hacía estaba bien y que mi familia era una bendición.

Recuerdo la última vez que me sentí realmente feliz, tenía cinco años y me habían dado el regalo que siempre quise para navidad, mis abuelos estaban aún con vida, mis padres aún no se divorciaban y seguía creyendo que mi vida era real y normal, pero después de aquel año, cómo si se tratase de un huracán que se llevaba todo a su paso, mi vida dio un vuelco total.

Me quedé sin mis abuelos, mis padres no hacían más que pelear y debido a nuestra condición, nuestro temperamento era frágil y cambia con leves provocaciones, poder manejar nuestra fuerza es complicado cuando nos encontramos cegados por la ira, y no fue hasta la primera pelea de mis padres que me di cuenta de lo que somos realmente, quedé anonadado con aquella verdad.

Lo terminé comprendiendo años después, los abuelos lo sabían, ellos me amaban, tenía el apellido de mi padre, mi madre me tuvo antes de convertirse en lo que ahora era, cuando mis padres se separaron tenía seis años, luego, cuando cumplí once, volvieron a unir sus vidas, ya no más peleas, no más discusiones, solo se enfocaban en que yo estuviera bien, supongo que me querían preparar para lo que venía o tal vez protegerme de las amenazas del exterior.

Mis padres, cómo siempre, me enseñaron todo lo que se debe saber de nosotros, así también lo importante que es la unión familiar, los clanes a los cuales pertenecemos, la palabra, el honor, y, en parte, creo que fue por eso que me dieron el ejemplo de su regreso, aún tenían desacuerdos en algunos temas, pero me habían demostrado que existía cariño sincero entre ellos, al menos por algunos años.

Actualmente tengo dieciocho años, se supone que será mi ritual de iniciación, sé perfectamente en qué consiste, tengo que morir para revivir cómo mis padres, al principio me negaba a la idea, quería huir antes que convertirme en uno de ellos, en parte porque asesinaron a mi ex novia, ella era del bando contrario, pero luego me di cuenta de que los de su especie habían comenzado la guerra con mi familia, ellos habían acabado con mi hermana, de la que no supe hasta hace un par de años cuando aquel suceso comenzó.

No entiendo aún cómo le hicieron para bloquearla de mi mente, o tal vez yo mismo lo hice, cómo niño pequeño quise ocultar todo lo que me hacía daño o asustaba.

Desde ese entonces me prometí no volver a caer en los encantos de cualquier mujer, mucho menos si no era de mi especie, cuando demostramos nuestros sentimientos somos débiles, mis padres demostraron debilidad al enseñarle a todo el mundo a mi hermana, por eso acabaron con ella y quebrantaron nuestra familia, necesitábamos ser independientes, tener más fuerza e inteligencia que ellos.

Claro que, cómo en toda ciudad, tenemos lugares sagrados, en los que se respeta la paz, en parte, porque no queremos que todos se enteren de lo que somos, y, en parte, porque no nos conviene llamar la atención del resto de ciudades cercanas a este pueblo.

-Buenas tardes, hijo. -dijo mi madre apareciendo en mi campo de visión-. ¿Preparado para esta noche? Todo el mundo está ansioso por este regreso a la vida. -agregó, asentí con la mirada fría, mirando a cualquier lado menos a ella, no es que le tuviera rencor o algo similar, pero es que no me gustaba demostrar mis sentimientos, no desde que me he enterado de toda la verdad que nos rodea.

-Tú madre te ha hecho una pregunta, Khale. Responde cómo se debe, por favor. -mencionó mi padre desde el otro lado de la mesa, sabía que le molestaba cuando me ponía en aquel plan insoportable, pero quería que pensara en que todo mi mundo estaba a punto de cambiar nuevamente.

-Sí, estoy preparado, me he hecho a la idea de esto desde, ¿Qué? Toda la vida. -mencioné sonriendo de lado, de mala gana. No me gustaba que me obligaran a hacer cualquier cosa, por más fácil que fuese.

Ninguno de los dos fue capaz de seguir hablándome, supongo que entendían perfectamente mi carácter, al final de cuentas, era digno hijo de mis padres, digno heredero de la familia Mickelson, sonreí de lado nuevamente, me levanté de la mesa y jalé de mi mochila, sí, lamentablemente tengo que asistir al instituto, cosa que no me parecía, pues tenía que hacer una vida normal siendo realmente extraordinario.

Subí a mi habitación y me quedé allí recostado en la cama, desde mañana todo sería diferente, estaba seguro de ello, todos me mirarían con recelo, pues en este pueblo hay tres tipos de personas, los de mi especie, los que nos juraron la guerra y los que no se meten con ninguno de los dos bandos.

Estos últimos, a pesar de saber lo peligroso que podemos llegar a ser, prefieren coexistir con nosotros que dejar sus antepasados aquí tirados, sonreí para mis adentros cuando sentí el impulso de ir a la playa, siempre, desde que tengo memoria, me escapo a ese lugar, es la manera más fácil que encuentro para escapar de mis problemas, cada vez que los tengo claro, otras veces voy solo con el motivo de relajarme y olvidar la maldita bestia en la que debo convertirme, pero todo en la vida tiene un precio y en este caso no será la excepción.

Me senté en la arena, la sensación de tenerla entre mis dedos era relajante, mi mirada se perdió en el horizonte, viendo cómo el sol se escondía en el agua, viendo cómo las olas seguían sus movimientos, cómo chocaban entre ellas, luego pensé en ella, en mi hermana, en la cruel forma que su vida fue arrebatada, y es que un bebé no tiene la culpa, pero nosotros sí, sé que mis padres aún se sienten culpables por no poder protegerla cómo se debía, supongo que debe ser difícil no hacerlo, no tengo hijos, pero la responsabilidad de no tenerlos nunca es toda mía.

De pronto cerré los ojos, a veces me sucedía, tenía algunas lagunas, visiones, cómo otros le llamarían, era una mujer, digamos que últimamente aparece más en cada una de ellas, no es que sea algo frecuente, pero sí me avisan de ciertos hechos y siempre terminan ocurriendo, a no ser que se eviten dichas acciones. Creo que era el primero de la familia con este don, por lo que no se lo he dicho a nadie, la primera vez que pasó vi a mis abuelos morir, se lo dije a mi abuelo, pero no quiso hacerme caso, más bien me dijo que no le comentara a nadie sobre ello, que podría poner mi vida en peligro al confesarlo al mundo.

            
            

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