Capítulo 3 Te veo

A los días los amigos en el estacionamiento poniéndose de acuerdo para salir de paseo por la noche Raquel más que animada para ir a la disco, Carlos sacando sus cuentas para ver si le dan los tiempos entre el trabajo y las tareas no sabe si puede ir, por su parte Matt no quiere ir pero los papás de Raquel no la dejan salir a menos que él la acompañe y por tal motivo se está obligando a ir, el ojiazul alza la mirada se encuentra con ambos docentes despidiéndose el primero en marcharse es Ricardo, Ángela se queda metiendo sus mochilas al auto deja una afuera que es la de la comida, ella checa su

reloj de pulso hace una mueca de alivio, saca una bolsa transportadora de ropa, la ve entrar al plantel curioso enciende un cigarrillo y espera paciente a que salga olvidando por completo a sus amigos y sus planes, sus ojos azules se abre incrédulos al verla, cambio sus zapatos de piso por unas zapatillas negra tacón de aguja, la falda por una pantalón de vestir negro, una blusa de seda blanca, dejando los dos primeros botones abiertos resaltando sus atributos, su cabello suelto por un recogido alto, tiene que forzar la vista al ver algo de color en los labios, Ángela saca de su bolsa una botella es el perfume echa unas cuantas gotas, vuelve a ver el reloj, sonríe, toma su bolsa con la comida abre la puerta de lado del piloto e inicia a comer entre bocado y bocado coloca en su casetera su cassette de Queen a todo volumen, termina de comer sale del auto al bote de basura más cercano a llevar los desechos, el humo del cigarro la hacen toser por arriba de los aros ve a Matt, por un momento cruzo por su mente la idea de reprenderlo pero decide dejarlo pasar debe marcharse, recordando que los dos le gritaron por ir rápido en esa ocasión sale del estacionamiento lento cantando a todo pulmón "Bohemian Rhapsody" así el ojiazul ve perderse el Volkswagen verde, por esa distracción quedo muy formal de ir a la disco con sus amigos.

Al día siguiente viernes el primero en llegar fue Matt como siempre sale del auto enciende su cigarro para su sorpresa Ángela ya estaba en el estacionamiento revisando unos documentos, de nuevo con su uniforme de docente concentrada en su lectura.

_ " Fortes sumus " mmm... ¡Haaaa! tranquila tú puedes.

_¿Tiene la costumbre de gritar?

_ ¿Hm? - alza la mirada-__Joven Reanielli - resopla- _Solo cuando estoy frustrada como en estos momentos.

_ ¡Ha! ¿Qué hace?

_ Traduciendo, debo traducir un documento del latín al español y al griego y llevarlo por la tarde al departamento de Historia de la universidad, es parte de mi titulación de la maestría y si llevo este trabajo - lo señala - _tendré mi puesto en la universidad.

_ Es importante.

_ ¡Mucho! por fin le voy a demostrar a mi papá que no soy una vergüenza para él.

_¿Eres una vergüenza?

_ - Saca una manzana de su lonchera- _Si, para él las mujeres debemos estar en casa. - ve su reloj- Bueno, debo ir al salón de segundo B, tengo niños que torturar.

_ Como a mí.

_ ¡Jajaja! si, como a ti. Ayúdame con mis cosas - le da una pesada mochila-

_ ¡Oye! pesa.

_ Y por eso te la di, sígueme. Debes entender que me faltaste al respeto por hablarme como lo hiciste, debía castigarte.

_ Creí que eras una compañera no mi maestra. Eres demasiado bajita.

_ No, tú eres muy alto. Aunque fuera tu compañera de clases debes respetar el físico, no ser irrespetuoso -llegan al salón dejan las cosas, ella se retira en lo que se llega la hora de inicio de clases-

El viernes paso entre salón y salón clases de matemáticas, español, inglés, por la tarde se da el anuncio que el próximo viernes no habrá clases en el turno vespertino ya que se llevará a cabo la fiesta de bienvenida que iniciara desde temprano ya que incluso los chiquillos de preescolar tendrán su bienvenida un solo grito de emoción se dejó escuchar por toda la escuela, mientras que en la sala de maestro se escucha un " No Dios mío" " Que tortura" y así termina un día más de clases, a Matt y compañía se le estaba haciendo costumbre ver salir a la pelirroja corriendo aunque ese viernes fue distinto, volvió a salir muy diferente, esta vez con su cabello suelto, unas zapatillas color roja, a juego con la falda por arriba de la rodilla, la blusa de contraste azul, maquillaje impecable como siempre viendo el reloj, coloca los seguros de su automóvil, sale del colegio espera paciente, ignorante de que es observada por Matt, llega un lujoso auto blanco, baja un elegante hombre rubio, sin duda era extranjero, se saludan de beso, el abre la puerta dando el paso a la maestra.

_ Matt, Matt, he Matt ya vámonos.

_ ¿He? Si, si voy.

_ En qué mundo vives que no me haces caso.

_ Ya van varias veces que la maestra Ángela sale muy elegante del colegio y hoy vino por ella un tipo.

_ Seguro que su novio o esposo ya esta vieja ¿no?

_ - Encoge de hombros-_ Ni se, ni me interesa.

Se llega rápido la noche y con ella el compromiso de ir a la discoteca, los adolescentes cada uno en su casa se alistan, a las nueve de la noche llegan por separados los amigos, los dejan pasar por Matt, ya que era amigo del dueño eso sí no podían beber alcohol cosa que a ninguno le molestaba, el buen ambiente hace que la noche pase rápido, Matt va a la barra pide tres aguas minerales, llega a su lado una pelirroja de baja estatura baja, cabello en una cola alta de lado alborotada, un vestido rosa rosa fiusha , una chamarra de mezclilla , baja la mirada , botas vaqueras negras, escucha que pide dos tragos sin dejar de mover la cabeza al ritmo de la música mueve la cabeza quedando frente al adolescente, Matt ríe al reconocerla, cuando escucha la voz del de la barra voltea paga con las bebidas en manos se aleja bailando, la sigue con la mirada hasta que llega con el rubio que fue por ella al colegio, llega con sus amigos les de las bebidas ve que ella va a los baños, deja a sus amigos hablando solos, llega a los sanitarios pierde el tiempo hasta que ella sale cuando Ángela pasa por su lado él le coloca la mano en la cabeza deteniendo su andar, lo primero que ella hace es darle un manazo para que la suelte al reconocer al jovencito lo saluda pero rápido se despide para ir con su acompañante, Matt se queda inmóvil siguiéndola con la mirada, sonríe, se pasa el lengua por los labios para por fin soltar la carcajada, llega con Raquel sin avisar la saca a bailar cosa que les asombra a los dos amigos ya que Matt nunca baila, Raquel aprovecha la oportunidad, Matt invita a Carlos a unirse a ellos para las dos de la madrugada salen los chicos, en el estacionamiento Ángela con su compañero hablando en idioma que no es inglés ni francés.