Capítulo 8 Gastando mucho dinero

¡Todo el cuerpo de Callan estaba envuelto en una atmósfera homicida y sus rasgos faciales angulares mostraban claramente que estaba fuera de sí!: "¡Vámonos!", sin decir nada más, se dio la vuelta y caminó hacia el auto con Savannah en sus manos; la arrastró y ella luchó durante todo el camino: "¡Déjame ir! ¿Quién eres? ¡Déjame ir! ¡No te conozco!", miró a Liam: "Liam...

¡sálvame!" Él también la perseguía: "Déjala ir, ¡ya dijo que no te conoce!" Todo hubiese estado bien si no hubiera mencionado a Liam, pero lo hizo y eso fue como un desafió para Callan; inclinó levemente la cabeza y ordenó: "¡Llevaros a este hombre!" De inmediato, ocho hombres vestidos de negro aparecieron de la nada y rodearon a Liam, impidiéndole avanzar. Ellos dos nunca habían visto una escena así antes, y sus rostros se oscurecieron de inmediato por el miedo; Savannah miró a Callan con pánico: "Tú... ¿qué estás haciendo? ¡Déjalo ir!", él sonrió y bajó la cabeza para susurrarle en el oído: "Él no tiene ningún valor para mí, será mejor que seas obediente y vengas conmigo y no me provoques. ¡No soy un hombre de buen carácter!"

Savannah estaba tan asustada que no se atrevió a moverse, cuando escuchó esto, solo asintió con obediencia: "Está bien, está bien, ¡iré contigo! ¡Deja ir a Liam!" Callan la miró con desdén y dijo: "¡Oye, pequeña!, será mejor que dejes de preocuparte tanto por él frente a mí de inmediato, sino ¡esto me pondrá aún de más mal humor!" Savannah se mordió rápidamente los labios y miró a Callan con pena y miedo; él se puso impaciente, se inclinó, la recogió y caminó directamente hacia el coche. En la distancia, escuchó a Liam gritar: "¡Déjame ir! ¿Quién eres? ¡Déjala ir! ¡Savannah, Savannah!" Cuando se abrió la puerta del coche, Callan la tiró sobre el asiento y mientras se aflojaba la corbata, dijo con la respiración agitada: "¿Este chico es tu compañero? ¿Es el hombre que te gusta? ¡Sí que tienes mal gusto!" Savannah se acurrucó en un rincón, lo miró con miedo y dijo: "¿Por qué me secuestraste? ¿Quién eres? ¿Para qué tenemos que vernos después de lo de la otra noche? Además, eres un hombre, ¡así que estoy en desventaja! Por todo lo que ha sucedido, pasaré todo esto por alto, ¡aunque de todos modos no te ofendí! Yo también pagué por la habitación... "

"¡Pfff!", Callan no pudo evitar reír. ¡Sí que era capaz de decir muchas tonterías con esa boquita!; ella seguía hablando y hablando, ¿cómo se atrevía a mencionarle lo de los gastos de la habitación? ¿En verdad quería cabrearlo? Entonces pensó: "¡Si no le doy una lección, esta chica realmente pensará que soy una aventura de una noche!". Savannah se esforzó por pensar, pero no podía entender por qué Callan había venido por ella: "¿Qué quieres de mí? No te obligué a hacer nada esa noche; y si fue el caso, lo siento, me emborracho con mucha facilidad... Bueno..." ¡Esta chica era demasiado ruidosa! Callan no podía soportarlo, ¡así que lo único que se lo ocurrió para callarla fue bajar la cabeza y usar su boca para mantener la de ella cerrada! Este toque familiar, los labios hinchados, el lápiz labial ligero y afrutado y su reacción tímida... ¡Callan amaba mucho este sentimiento! Levantó a Savannah y la puso encima de sus piernas; sentado cara a cara con ella, la retuvo y la acercó a su cuerpo para profundizar el beso. Pensó en lo que acababa de ver, le sostuvo la nuca y le preguntó: "¿Ese hombre te besó antes?" Savannah estaba atónita y sacudió la cabeza confundida.

Callan besó muy satisfecho sus labios rojos e hinchados como si fuera una alabanza: "¡Buena chica! Entonces, ¿yo fui tu primer beso y tu primera noche?" Había sido su primera noche, sí, pero no el primer beso... No pudo evitar pensar en el chico guapo en el aeropuerto y el video del beso que estaba en Internet; sin embargo, el hombre frente a ella era tan fuerte y temible que, incluso sin hablar, ¡emanaba una vibra aterradora! ¡Ya qué más da!, cerró los ojos y tomó una decisión: "¡Si!", lo admitió con valentía. En este momento volvió a ser consciente de la postura en la que estaban, ¡no quería que la abrazara en absoluto!; puso su pequeña mano sobre el duro pecho de Callan, pero su brazo no pareció ejercer ninguna fuerza, por lo que no pudo liberarse. Entonces susurró: "¿Puedes dejarme ir?" Él levantó las cejas: "Dejarte ir, ¿por qué? No te preocupes, eres muy liviana, casi no pesas nada; eres la mujer más liviana que he tenido sobre mí"; su rostro cambió al pensar en esas palabras, ¡era la mujer más ligera, lo que significaba que había estado antes con muchas otras mujeres! ¿Acaso no le preocupaba una ETS?

Callan dijo con un tono superficial, lleno de desdén y burla: "Ginny Warner, veinte años, de la Universidad de Artes, ¿eres tú?" Savannah encogió los hombros y sonrió con torpeza: "Al menos no todo es falso, sí tengo 20 años". Él sintió un cosquilleo en el corazón al ver su hermosa apariencia y no pudo evitar bajar la cabeza para mordisquearle la nariz: "Niña, quédate conmigo, ¡te daré lo que me pidas!"¿Qué acababa de decir?, se sintió presa del pánico, no quería que jugara con ella: "¡No!, lo que pasó esa noche fue un malentendido. ¡Fui muy descuidada y simplemente sucedió! ¿Por qué debería estar contigo? ¿Pedirte algo? ¡No tengo nada que pedirte! Lo único que quiero es que me dejes ir y no vuelvas a buscarme. Lo nuestro sólo ha sido una aventura de una noche, ¡olvídalo!"

Las palabras de Savannah fueron convincentes, pero el rostro de Callan se puso negro mientras pensaba: ¿Había sido solo una aventura de una noche?, ¿olvidarlo? ¡No puedo creer que tenga una mente tan abierta! Esa noche, ¡obviamente había sido su primera vez!, y de repente se sintió impaciente. "Bueno", asintió con un rostro sombrío, "como no quieres, tampoco voy a forzarte"; la soltó y ella rápidamente se le quitó de encima y se mantuvo lejos de él. Los delgados dedos de Callan golpeaban rítmicamente sus rodillas y sus ojos se entrecerraron levemente, ocultando sus intenciones: "Como no quieres, entonces no eres mi mujer, por lo que no tengo la obligación de asumir el costo de esa noche por ti". ¿El costo?, Savannah tensionó la espalda y dejó escapar: "¡Te di 300 yuanes!" Él sonrió levemente:"¿300 yuanes?, haré los cálculos por ti; la suite presidencial VIP cuesta 20 000 yuanes la noche, también abriste una botella de vino, que no era caro, solo 280 000 yuanes la botella, y cada condón 'Okamoto', 10 yuanes, usamos seis, lo que daría un total de 300 060 yuanes. Entonces si dividimos la cuenta te corresponde darme 150 030 yuanes. Niña, ¡300 yuanes si acaso alcanzaba para pagar los condones!" Savannah estaba asombrada y conmocionada más allá de lo que podía expresar, ¡ciento cincuenta mil treinta yuanes!, ¿había gastado tanto dinero? "No tienes pruebas de lo que acabas de decir. Tú... quién sabe, podrías estar chantajeándome", cuando Savannah dijo esto, se sintió muy culpable; este tipo, que conducía un Bugatti, no tenía ninguna razón para chantajearla.