El señor que le hizo la prueba pedida por sus padres tenía tanto miedo que llamó a una organización del gobierno que capturaban personas con habilidades peligrosas.
Para evitar esto el hermano mayor de Álex lo ayudó a escapar, de este modo se salvó y llegó a la cima de una pequeña montaña lejos de donde vivía.
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En este lugar empezó a construir una casa propia, pero como no podía quedarse allí toda la vida, se iba a la ciudad cinco de los días de la semana, y los otros dos se quedaba en su casa.
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En la ciudad consiguió un trabajo en una gasolinera, pero de alguna manera lo descubrieron los raptores (varios grupos de personas que secuestran gente con super-habilidades para venderlos) y, como él tenía la más buscada, fueron con el doble de refuerzos.
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Afortunadamente, Álex ya antes había robado algunas habilidades, como la del fuego y la velocidad, así que al final logró escapar pero tuvo que cambiar su identidad para que no lo encontraran.
Luego, se fué al país vecino:"Australacia" para estar menos preocupado por su seguridad. Pero resulta que los raptores ya lo estaban esperando en el aeropuerto!, durante esta otra pelea Álex obtuvo la habilidad "teletransporte" y gracias a esta logró escapar por poco.
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Al teletransportarse, como no sabía usarlo bien, apareció cerca de una casa de campo, y como no sabía dónde estaba fué a preguntarles indicaciones a los dueños de aquella casa y ellos le permitieron quedarse un tiempo.
Un poco después el señor de la casa le pidió que lo ayudara a cuidar de su familia mientras que él iba a un viaje de negocios de tres semanas. Álex le dijo a la familia de sus habilidades pero no les habló mucho del robo.
Ya había pasado una semana desde que el señor se fué y Álex se encargaba de cuidar la casa y a la familia, eran dos hijas de 15 y 16 años, una niña de 7 y un niño de 8.
Y pronto pasaron dos semanas sin ninguna novedad, pero entonces un día cuando los niños volvían de la escuela, solo regresaron las dos mayores y ya era muy tarde pero los pequeños no habían regresado.