Capítulo 4 vamos a divorciarnos

" ¿Le gustaría contactar a su marido?" preguntó el médico que lo observaba atentamente.

" Sí, está viajando pero no puedo localizarlo". respondió Valeria.

" Puedes usar el teléfono de la oficina, tal vez eso funcione".

" Muchas gracias." Marcó el número de su marido y después de algunos timbrazos contestó una mujer.

" Sí, ¿quién es?" Valérie pensó que había marcado mal el número, pero después de comprobarlo estuvo segura de que era el de su marido.

" ¿Es este el dispositivo del señor Thierry Zack?"

" Sí, ¿quién eres?" -Preguntó Elena.

"Soy su esposa Valerie Zack".

" Está en la ducha ahora". Elena respondió sin vergüenza.

" Dile que me devuelva la llamada si termina". Valérie colgó con tristeza.

" ¿Entonces hablaste con él?"

"No, su secretaria dice que está en una reunión, me volverá a llamar. Tengo que irme, doctor, adiós".

" Adiós señora, vuelva cuando sienta que las cosas no van bien". advierte el médico.

Valérie salió del hospital y tomó un taxi. Sabía que su marido la estaba engañando, pero la noticia de su embarazo era motivo suficiente para no dejar que eso la deprimiera. A partir de ahora tenía que vivir para el niño que crecía dentro de ella.

Incluso si Thierry la engañaba, ella quería que él fuera el primero en enterarse de su embarazo.

Unos días después reanudó su vida normal y trabajó diligentemente.

Una mañana todavía dormía cuando sintió la presencia de alguien en la habitación. Abrió los ojos y encontró a Thierry sentado en la silla.

" ¿Cuándo llegaste a casa?" -preguntó Valérie levantándose.

" Esta mañana me gustaría hablar de algo". respondió Thierry.

" ¿No pueden ustedes dos hablar más tarde?"

" No tengo mucho tiempo". Su actitud indiferente hizo que Valérie se levantara para escucharlo. Sabía que algo malo estaba por suceder.

" Te estoy escuchando". respondió Valeria.

" Sé que llevamos cinco años casados ​​y no has logrado darme un hijo, pero no podría soportar terminar mi vida así porque soy el único hijo de mi madre". Valérie se había preparado durante mucho tiempo para esta eventualidad.

" ¿A qué te refieres?" preguntó ella.

" Sé que me quieres mucho y aceptarás lo que te voy a decir".

" ¿Si no acepto?"

" Nuestro matrimonio terminará en divorcio". Valérie lo miró sin emoción.

" ¿Y qué es eso?"

" Encontré una mujer hermosa y está embarazada de mí, quiero que venga a vivir aquí con nosotros".

" ¿Estás bromeando? ¿Quieres que agregue dos personas más a mi cargo? Qué ridículo eres, Thierry. ¿Me has amado al menos una vez en tu vida cuando simplemente te estabas aprovechando de mi dinero?"

" No importa el motivo pero no era feliz sin hijos, ahora que ella está embarazada de mí no puedo abandonarla".

" Puedes alquilarle un apartamento, ella es tu responsabilidad, no la mía y, además, ahora estás trabajando, puedes satisfacer sus necesidades sin mí".

" ¿Cómo puedes ser así de desagradecido? He sido un buen marido para ti todos estos años pero sólo por esta vez no quieres cumplir mi sueño de ser padre, ¿de verdad quieres mi felicidad? ¿Qué hombre podría ser?" ¿Alguien en su sano juicio soportaría vivir con una mujer estéril durante todos estos años? Todos mis amigos ya son padres excepto yo, porque estaba esperando un milagro que nunca se realizará". Estaba furioso. Sus palabras fueron tan fuertes que Valérie rompió a llorar.

" No puedes culparme por eso Thierry, deberías haber solicitado el divorcio hace mucho tiempo si no me soportabas. Estuviste inalcanzable durante varios días, te llamé y tu amante me respondió. Ni siquiera tuviste tiempo de volver a llamarme para ver cómo estaba, me disgustas Thierry. Si no tienes otra solución para acomodar a esta mujer entonces yo tampoco soporto vivir con ella." protestó Valérie.

" Entonces divorciémonos".

" ¿Es esto lo que realmente quieres?"

" Por supuesto, solo la conozco desde hace seis meses y está embarazada, pero llevas cinco años sin siquiera un aborto espontáneo".

" Toleraré cualquier cosa menos insultos, Thierry, si quieres divorciarte, divorciémonos patéticamente".

" Como desees, nos vemos a las nueve en la oficina del estado civil".

" ¿Soy tan aburrido que ni siquiera me das un día para pensar?" preguntó Valeria.

" No hay nada en qué pensar, solo tienes dos horas de tiempo para encontrarte conmigo allí". se levantó y se fue.

Valerie se desplomó en la cama y lloró durante minutos.

Leonard estuvo de regreso en el país hace unas horas, notó que algunas cosas en su cajón no estaban guardadas como las había dejado. Fue al salón a buscar al portero.

" ¿Quién vino aquí en mi ausencia, Fabrice?"

" Sí, vino tu prometida, me dijo que quería conseguir algo". respondió Fabrice el portero.

" ¿Viste lo que tomó?"

" No había estado prestando atención y además no podía preguntarle qué estaba buscando".

" Está bien." Regresó a su habitación y se duchó. Después de terminar llamó a Samuel.

" Esté aquí en treinta minutos, no olvide que es mi testigo".

" Estoy en camino, señor Groom". respondió Samuel.

" Te recuerdo que soy tu jefe".

" Se supone que hoy es el día más feliz, no nos damos órdenes unos a otros". Bromeó Samuel.

" No estoy feliz, te lo recuerdo, mi boda está planeada en una hora y doce minutos". dijo Leonard mirando su reloj.

" Estaré allí en veinte minutos, no te preocupes". respondió Samuel.

Leonard colgó y se vistió.