Capítulo 7 SorpresaSorpresa

Había transcurrido un mes desde que Jessica empezó a recuperar lo que le pertenecía, pero siguiendo los consejos de su abuelo, no dejaba que otros supieran que ella era de la familia Alemán, ésto ha permitido que pueda andar por las calles con poca seguridad.

Reynaldo, después de lo sucedido en el hotel, se ganó la confianza de Jéssica y dejó que el se acercará un poco más a ella.

Jéssica empezó a sentirse muy diferente, su vida antes era un infierno, pensaba que nada más podía salir mal, hasta que empezó a enfermarse, las náuseas comenzaron a ser seguidas y eso comenzó a preocuparla.

-Señorita, debería de ir a un hospital, ha estado mal desde hace una semana -dijo su secretaria.

-Cancela todas las citas, iré ahora mismo, quizás algo que comí me tiene de esta manera.

Jéssica tomó su cartera y se dirigió hacia el hospital. El doctor le realizó varios exámenes y solamente quedaba esperar los resultados.

Reynaldo llegó al hospital y fué directo hacia Jéssica.

-¿Que haces aquí? -preguntó Jéssica.

-Fui a tu oficina para invitarte a salir y tú secretaria me dijo que estabas aqui, dime, ¿sucede algo malo?

-Estoy esperando los resultados, ya no deben de tardar.

El doctor se acercó a Jéssica y Reynaldo le dió espacio.

-Señora Jéssica, todo se encuentra normal, no hay ninguna bacteria ni virus, es normal que sufra de náuseas en esta etapa.

-¿Cómo puede ser que sea normal? No entiendo a que se refiere doctor.

-Usted está embarazada, le recomiendo que haga una cita con su ginecóloga para dar seguimiento a su bebé.

Jéssica no podía entender como está embarazada, si durante el tiempo que estuvo con Cristopher nunca la tocó y solamente tiene una vaga idea de que tuvo relaciones porque había manchas de sangre en las sábanas del hotel, de lo contrario no se hubiera percatado de que pasó algo.

El doctor le receta los medicamentos prenatales, pero el siguiente paso es visitar a su ginecóloga.

Reynaldo se acerca a ella, preocupado por la reacción que tuvo Jessica después de hablar con el doctor.

-¿Sucede algo malo?

-No, no sucede nada malo, estoy bien, solo que...

Ella voltea a ver a Reynaldo, sabía que no era una noticia tan agradable.

-Necesito ir a casa, quiero descansar un poco.

-Yo te llevaré, no te ves muy bien.

-No, yo me iré sola.

Cuando Jessica iba saliendo, sin percatarse empujó a alguien más.

-¿Es que estás ciega o qué? Fíjate por dónde caninas -gritó la mujer.

-Lo siento -dijo Jéssica por instinto, sin percatarse de quién se trataba.

-Mira quien más es, de la mujerzuela de Jéssica, ahora ya has perdido toda oportunidad con Cristopher, seré la que le dé un hijo.

-¿Estás embarazada de Cristopher?

-Si, ¿Sorprendida? Pues él si me ama de verdad, nos casaremos pronto.

Jéssica se retira del hospital, no le interesaba lo que le sucediera a esos dos, pero no sé percató que cuando chocó con Damaris, dejó caer la prueba de embarazo.

Damaris recogió el papel y se sorprendió al ver los resultados, está noticia sería de mucha ayuda, solamente demostraba que ella buscaba como aprovecharse de los hombres.

No obstante, hace un mes aproximadamente, cuando se suponía que Cristopher tenía que llegar a casa y celebrar su aniversario, fue drogado por Damaris y está lo convenció de llevarla al hotel Alemán. Él sentía un fuego en su cuerpo y aceptó, pero posteriormente no recuerda lo que pasó, sabía que había tenido sexo, pero no recordaba mucho; desde ese entonces Damaris se le insinuaba constantemente, a pesar de que él la rechazaba, ella un mes después llegó con la noticia de que estaba embarazada y el bebé era de él.

Cristopher empezó a dudar de ella, pero sin recordar nada de lo sucedido anteriormente, lo único que quedaba era aceptar ese bebé, lo menos que quería era que la prensa dijera que era un abandona hijo, por lo que decidió formalizar su relación con Damaris.

Jéssica se dirigió hacia su casa, cuando pasó por el salón principal su abuelo la vió.

-Hija, ¿sucede algo?

-Abuelo, no se que voy hacer, estoy...

-¿Que sucede hija? Cualquier cosa que pase tiene solución, menos la muerte.

-Estoy embarazada y... -por un momento ella le iba a decir que no sabía quién era el padre de su hijo, pero su abuelo se adelantó.

-Es el hijo de ese bastardo de Cristopher.

Jéssica por un momento sabía que era la excusa perfecta, así su familia no le haría muchas preguntas y por otra parte, al saber que el hijo no es de Cristopher, no corría ningún riesgo de que él se lo quitará, sin embargo, el poder que tenía su familia no se comparaba con el poco de poder que tenía la familia Graham.

-Si, es de él.

-Simplemente no le digas nada, hija, el niño será un Alemán, aquí lo tienes todo, no necesitas nada de ese hombre, él o ella será la heredera de esta familia.

Escuchar esas palabras de su abuelo la hacía sentir más tranquila, pero debía de prepararse a una verdad que tarde o temprano tenía que llegar, saber quién era el verdadero padre de su hijo.

Tomó su computadora y una USB, algo que había evitado hacer por mucho tiempo, pero solamente así podía encontrar respuesta, pasó toda la noche frente a la computadora y por más que se esforzaba, no obtenía la respuesta que quería.

Envío un mensaje y en menos de treinta segundos la estaban llamando.

-Quiero que investigues a Wall-e, necesito saber quién es.

-Jefa, ¿no será más fácil si usted lo hace?

-Tu tienes los conectes y estoy seguro de que encontrarás la forma de hacer contacto con él, espero resultados.

Ella finaliza la llamada sin esperar una respuesta, sabía que la única persona que podría darle respuesta es Wall-e y decirle quién lo contrató para dañar el sistema de seguridad de su hotel.

Wall-e es alguien que no suele aceptar cualquier tipo de trabajo y cuando aparece es par algo grande, sin embargo, le llamó la atención a Jessica que haya aparecido en su hotel simplemente para dañar sus cámaras, al menos que haya estado ahí y buscó una forma de eliminar cualquier evidencia.

Revisó nuevamente el registro de ese día, pero por más que buscaba algún vínculo no encontraba ninguno, la única diferencia es que se percató que esa noche Cristopher se había quedado en ese hotel.