Capítulo 3 Pequeña sirvienta

Al escuchar las palabras del hombre se levantó de la cama para saltar hacia su brazos hasta rodear su cuello.

-¡Gracias tío, yo también te protegeré para siempre!-susurró en su oído.

La pequeña niña cerró los ojos durmiendo profundamente recargando su barbilla sobre su hombro.

-¡Se ha quedado dormida!-suspiró Enzo.

-¡no podemos quedarnos con la niña! ¿Has encontrado alguna información de sus parientes?

Enzo que mostraba una expresión simple cambió tan repentinamente mostrándose muy serio-¡Maestro la niña es del clan antiguo! ¡El único que queda del linaje!

La mano del hombre enmascarado se apretó con fuerza su mirada llena de ferocidad envolvió a la niña.

-¡Maestro no lo haga!-gritó Enzo agarrando con fuerza el brazo del hombre enmascarado.

La mano blanca como el jade estaba por apretar ese pequeño cuello, el hombre enmascarado miró a Enzo y sus ojos se volvieron dorados conteniendo un poder aterrador.

-¡maestro perdone mi osadía pero solo es una niña!-lo dijo arrodillándose en el suelo.

-¡Enzo realmente te has vuelto valiente , esta niña tiene un efecto en las personas! "Están dispuestos a seguirla incluso yo también estoy dispuesto arrodillarme bajo sus pies"-Se burló mientras tocaba la máscara hasta que su expresión de disgusto miró a la niña-¡déjame ver claramente quién eres!

La mano del hombre enmascarado tocó suavemente la frente de la niña al instante que la colocó una poderosa fuerza color plateada derribó su cuerpo, la explosión de poder hizo temblar toda la mansión en la que se encuentran.

-¡Pfft! Es demasiado fuerte su conciencia incluso usted maestro salió derribado ¿cómo puede ser posible?-pregunto tocándose el pecho al mismo tiempo observó a su maestro que ha vomitado sangre.

-¡El destino es realmente impredecible!-respondió acercándose paso a paso a la niña.

La pequeña niña continúa durmiendo tranquilamente sin saber que el hombre que decía prometer protegerla estaba apunto de asesinarla.

Enzo se sorprendió al ver que su maestro no hacía nada solo miraba a la niña dormida-¡maestro! ¿Quien es esta niña realmente?

-¿no te has dado cuenta aún? ¡Nunca pensé que la vería de vuelta! "Esa persona está devuelta por esa razón todos arriba se han vuelto locos"

-¡imposible!

Dos brazos largos sostuvieron el cuerpo de la niña.

-¿ha donde la lleva maestro?-preguntó con curiosidad.

El hombre enmascarado se detuvo sin mirar a su guardián habló-¡déjala en un lugar donde pueda estar a salvo!-salió de la habitación.

-¡Qué suave!-murmuró una voz infantil entre sus sueños.

Una pareja joven caminaba sostenidos de la mano.

-¡esposo! ¿Qué haremos? La emperatriz quiere una sirvienta pequeña, quiere elegir a nuestra hija para que sea la sirvienta personal del príncipe heredero.

-¿tan malo es?

La mujer de 25 años soltó su mano mirando con miedo al hombre que parece tener su misma edad-¡esposo! El príncipe heredero es demasiado aterrador, todas sus sirvientes han muerto en ese especial evento.

-¡es imposible! Nunca podremos huir y si lo hacemos la emperatriz nos encontrará con su poder que canaliza toda la existencia misma ¿qué podríamos hacer?-dijo el hombre mirando a su alrededor con tanto miedo.

La mujer lloró en los brazos del hombre con tanta desesperación mientras recargaba su barbilla sobre su hombro al abrir los ojos observó una pequeña figura-¡esposo mira!

-¿A dónde vas?-gritó al ver la correr.

La mujer corrió con una sonrisa, al ver a la niña pequeña durmiendo tranquilamente sobre el pasto con un conejo acurrucado entre sus brazos pero sus ojos se posaron sobre su pequeño rostro-¡Es muy bonita!-confesó muy sorprendida.

-¿Qué sucede?-preguntó mientras jadeaba por aire.

-¡esta niña! Esposo puede servirnos, esta niña puede convertirse en la sirvienta personal de su alteza el joven príncipe heredero.

El hombre al ver la sonrisa alegre de su esposa sintió un poco de amargura-¡no podemos robarnos a una niña! ¿A caso te has vuelto loca? Es peligroso, iremos a la cárcel por robar a una niña ¡hay que irnos!-lo dijo mientras jalaba de su brazo.

-¡no esposo está es nuestra única oportunidad!-lo dijo casi gritando.

-¿huhm?-se quejó la niña al escuchar el ruido que no la dejaba dormir cuando dejó de tallarse los ojos vio las dos figuras-¿quienes son ustedes? ¡Espera!-preguntó sobresaltando-¡no! ¿Cómo llegué hasta aquí? ¿Dónde está mi tío?-gritó mirando hacia los lados.

La mujer al escuchar su confesión sonrió de manera malvada en su corazón-¡pequeña no estés asustada! Tu tío nos dejó a cargo nos pido que te lleváramos a un lugar, vamos levántate ven con nosotros-sonrió nuevamente esta vez con una sonrisa dulce.

-¡esta mujer miente!-pensó la niña mirando los ojos como de lobo hambriento de la mujer su mirada terminó sobre el hombre que parece estar muy nervioso.

-¡esta mocosa no cayó, maldita sea! Este hombre con el que me casé ¿porque es tan estúpido?-se preguntó a sí misma apretándole con fuerza sus puños.

La niña bajó la mirada sin atreverse a mirar hasta que la levantó sonriendo como una tonta que no sabe nada-¡lo entiendo, por favor lléveme con mi tío!

El hombre al escuchar su respuesta se sorprendió pero por alguna razón al encontrarse con sus ojos sintió tanto escalofríos dentro de su alma-¡Esposa!-le murmuró sosteniendo su brazo.

-¡No te preocupes esposo, todo estará bien créeme!-respondió soltándose de su agarre.

La niña al ver la mano estirada solo miró con atención hasta que sus ojos se cerraron al segundo sostuvo la mano para después abrir sus ojos de manera abrupta.

-¡Aah!-gritó la mujer.

Las persona que pasaban por el parque miraron con incomodidad a la mujer que se ha caído al suelo.

-¡Esposa levántate!

La mujer no podía levantarse solo miró los ojos de la niña que se han vuelto plateados-¿a caso tiene alguna habilidad? ¡Si es hija de algún noble me matarán! ¡No, No puedo detenerme mi hija depende de esto!-se animó a sí misma, al levantarse del suelo sonrió esta sosteniendo su pequeña mano-¡vamos, te llevaré ahí!-dijo en voz temblorosa.