Capítulo 5 ¡Ella no lo permitirá!

Después de dejar el pequeño apartamento, también escapó de la atmósfera opresiva. Su corazón parecía estar a punto de saltar de su garganta.

Carolyn no pudo evitar pensar en el comportamiento involuntario de Derrick esta mañana. ¡Ella rápidamente negó con la cabeza y se repetía a sí misma que era sonámbula!

Cuando Carolyn regresó a casa y abrió la puerta, fue recibida por un cheque que Mae le tiró a la cara.

"Bastardo, ¿finalmente regresaste? ¿La pasaste bien anoche con ese maldito hombre? ¿Puede explicarme por qué este cheque no es válido? " ...

De pie junto a la puerta con calma, Carolyn tomó el cheque y lo miró. Luego dijo con indiferencia: "Por supuesto que no funciona. Tía, ¿no crees que alguien realmente te dará doscientos mil dólares siempre que digas que lo quieres?

En la sala de estar, con semillas de melón en la boca, Dora los miró a los dos y dijo en un tono extraño: "¡Mamá, te dije antes que no la podías creer! Ella sabía que el cheque no era válido, debe haber conspirado con ese hombre para engañarte. ¡Ella solo quiere enojarte! "

Las palabras de Dora hicieron temblar de ira a Mae. Cogió el cheque y lo rompió en pedazos. "¿Me estás engañando, Carolyn? Te he criado durante tantos años. ¿Es así como pagas mi amabilidad? Solo quiero que le des a tu hermana el dinero de la dote, pero no estás dispuesto a hacerlo. ¿Cómo puede haber una mujer tan ingrata como tú que no sabe cómo pagar la bondad de los demás? "

"Como dije, no se trata de si estoy dispuesto a pagar o no, sino de que no tengo tanto dinero". Carolyn enfatizó de nuevo.

En ese momento, Dora se acercó y le dio una palmada en la espalda a Mae. "Mamá, por tu propio bien, no te enojes. Hablaré con ella ".

La madre y la hija se sentaron en el sofá con Carolyn. Dora se aclaró la garganta y dijo con seriedad: "Hermana, de hecho, no queremos ponerle las cosas difíciles, pero usted sabe que la situación financiera de nuestra familia no es buena". Finalmente me caso, pero no puedo casarme con alguien sin una dote decente. De lo contrario, ¿qué pensarán los demás de nuestra familia Xia? "

"¿O qué más puedo hacer? ¿Quieres que venda mi riñón? Carolyn se rió irónicamente.

"No es tan serio." Dora sonrió e insinuó levemente: "No olvides que tu nombre estaba en el certificado de propiedad cuando papá se fue", dijo.

Al escuchar esto, Carolyn finalmente entendió lo que estaban planeando.

¡Resultó que estaban codiciando su certificado de propiedad!

"Esta casa fue dejada por mi padre. ¡No aceptaré venderlo! " Carolyn fue excepcionalmente decisiva a este respecto.

Su padre no le dejó muchas cosas. Excepto por las fotos en casa, ni siquiera recordaba mucho de su padre. Siempre se sintió culpable y se culpó a sí misma por matarlo. ¿Cómo podía dar las cosas que él había dejado a estas dos personas frente a ella?

No era un simple certificado de propiedad de la casa, sino una casa. Era un lugar donde ella y su padre habían vivido durante más de veinte años, que era inviolable ... Si Dora realmente lo aceptaba, ¡podría venderlo a un extraño!

¡Carolyn no lo permitiría!

Mae golpeó la mesa y dijo: "Carolyn, Dora habla contigo con amabilidad, ¿por qué eres tan despiadada y tan fría?" ... No olvides que Dora y yo también somos parte de esta familia. Esta casa es herencia de tu padre y tenemos derecho a decidir si la vendemos. "

"¿De Verdad?" Carolyn se burló, "¡Entonces tomaremos la decisión después de que el nombre del propietario en el certificado de propiedad sea suyo!"

Después de decir eso, Carolyn no quiso discutir más con ellos, cerró la puerta y salió.

Era un día caluroso, pero caminar por la carretera no pudo disipar la frialdad en el corazón de Carolyn.

Había pensado que Dora y Mae dejarían de hacerlo cuando no pudieran obtener el certificado de propiedad, pero Carolyn olvidó que tenía un jefe, Eric, en su empresa.

Quizás bajo la orden de Dora, Eric le puso las cosas difíciles en la empresa. Incluso la obligó a quedarse y trabajar horas extras sin paga por la entrega tardía de los materiales para la conferencia de prensa la última vez.

Eran las diez de la noche.

La enorme oficina estaba vacía, dejando solo a Carolyn sentada frente a la computadora. El sonido de la mecanografía resonó en el aire.

Las luces del piso se habían apagado, solo una pequeña lámpara de mesa a su lado y la luz azul y blanca de la pantalla de la computadora se reflejaba en su rostro, haciéndola lucir un poco triste y cansada.

Después de mucho tiempo, sus diez dedos, que eran tan rápidos como volar, se detuvieron. Carolyn volvió la cabeza y miró la pila de documentos a su lado. Suspiró levemente, se frotó los hombros, tomó un bocado de la comida para llevar fría y estaba lista para seguir trabajando.

En este momento, hubo un sonido de pasos lentos desde la puerta, que fue particularmente duro en la tranquila noche.

Inconscientemente, Carolyn miró al hombre y se encontró con sus extraños ojos. Ella frunció el ceño levemente y dijo: "Director, ¿por qué no se va a casa todavía? Se está haciendo tarde."

La figura alta y delgada de Eric se acercó gradualmente, y la luz oscura e incierta hizo su expresión más misteriosa. Se aflojó la corbata y dijo: "Todavía no estoy fuera de servicio. Sabes claramente por qué sigo aquí ".

"Qué quieres decir con eso..." Antes de que terminara sus palabras, el hombre frente a ella de repente la levantó de la silla.

Atada a la mesa, Carolyn no podía moverse. El pánico apareció en sus ojos fríos, ¡pero más ira!

"¡Eric! ¡Suéltame! Carolyn luchó y gritó.

Al escuchar esto, el hombre no se comprometió.

"¡Carolina! ¡No finjas ser puro e inocente frente a mí! ¿Qué calificaciones tienes para ser arrogante? " ... Su suave camuflaje parecía desgarrado por la noche oscura, con su rostro feroz estaba al descubierto. "¡Te mereces lo que sufres ahora! Coopera conmigo. Prometo que nadie te pondrá las cosas difíciles en el futuro. De otra manera... "