Lyssca hacia la falta de sus comodidades y estado delicado no puede evitar sentirse débil y perdida, es consciente de que si estuviera viajando de forma cómoda no sentiría que sus pies sangran, la fiebre posiblemente no existiría y su apetito sería lo que ella considera"normal". A la joven le gustaría creer que si tuviera un poco de su medicina que dejó en su casa se sentiría mejor aun sabiendo que estas son solo para calmar sus dolores y poder mantenerse estable, no para sanarla. Por lo tanto, en los diez minutos que tienen para descansar siempre trata de hacerse a la idea de que posiblemente muera antes de llegar al imperio del norte, porque siente que su cuerpo en cualquier momento podría colapsar por los tres días que ha estado caminando. Además, de que sus únicas comidas son; Avena que es más agua y pan duro con una pequeña porción de carne.
Al llegar la noche Aukan da la orden para darles de comer a los esclavos como siempre, Lyssca cada vez que lo escucha siente una corriente en su cuerpo. Los soldados le dan su trozo de pan y un pedazo de carne que es un poco más grande que el de los demás, no dice nada, ya que piensa que lo hacen por su enfermedad y quieren que llegue viva.
Después de cenar los dejan ir al baño, para la joven es algo bastante incómodo y difícil. Al terminar los soldados los amarran a un árbol como las veces pasadas, y como si fuera un bucle Lyssca se queda mirando el cielo.
Su hermano siempre le decía "-Cuando te sientas sola o tengas miedo, mira hacia el cielo por la noche y ve las estrellas. Verás que aunque todo se encuentre oscuro ellas siempre están para iluminarte, aunque su luz sea débil."
Con ese recuerdo en su mente cierra sus ojos lentamente, y a su vez siente aquella mirada que la ha estado observando todo este tiempo.
[...]
Por la madrugada el grupo emprenden su viaje otra vez. Sin embargo, Naji que es la mano derecha de Aukan ha notado a este un poco extraño desde que salieron del imperio del sur, ya que por las noches se queda cerca de los esclavos y un poco antes de que salga el sol lo ve escabullirse hacia el bosque. El metamorfo no le daría tanta importancia si no fuera porque no es normal que Aukan case osos o venados todos los días que han viajado, puesto que es un desperdicio de carne y atrae a más animales salvajes.
Para el "joven" de piel morena, cabello de color marrón; ojos de color gris, pero que usa un parche de color negro en el derecho, de contextura delgada y lleno de marcas rojas en sus antebrazos y cuello que son símbolos de protección que su tribu le hizo cuando se fue para ser un soldado. Las acciones de su líder le recuerdan cuando un metamorfo quiere cortejar a su pareja, la caza es una de esas maneras que tienen para demostrar lo que puede ofrecerle. Además, también es una forma de demostrar que podrá cuidar de los cachorros que podrían tener de los depredadores, este instinto siempre es guiado por esa parte de lobo y muchas veces es inconsciente.
Naji sabiendo todo eso se niega a creer que ese sea el caso, no hay nadie en el grupo que tenga una apariencia llamativa a excepción de la hija del conde quien es alguien de una belleza casi fantasiosa y que ha llamado la atención de casi todos los soldados. La hija del conde cautivo tanto a estos que muchos han pensado en comprarla en la subasta de esclavos.
-¡Descansaremos aquí! -Anuncia Aukan repentinamente. -Naji. Sígueme. -Naji aunque es uno de los pocos que no le teme a Aukan no significa que no haya momentos en los que se siente intimidado de cierto modo por su amigo, después de todo él mismo ha visto cuando este se descontrola. - ¿Hay algo que quieras decirme?
-Bueno, hay algo. -Naji traga un poco de salida y suspira esperando que Aukan no le dé importancia. -Has estado actuando de forma extraña en estos días, necesito saber qué es lo que te sucede.
Aukan está al tanto de su actitud extraña mejor que nadie, sabe que solo debería de casar lo necesario para sus soldados y cuando se esté agotando ir de nuevo por comida, pero él tampoco sabe por qué actúa de ese modo. Lo único que ha notado es que su cuerpo se mueve solamente cuando su mirada cruza con aquella Ninfa de cabello dorado y ojos azules, es como si una parte de él gritara y tomara el control.
-Estoy bien, nada más tengo ganas de cazar más de lo normal.
-Si tú lo dices.
Ambos vuelven hacia donde los demás se encuentran descansando, ya que se sumergieron un poco dentro del bosque para poder hablar de manera tranquila. Sin embargo, él ambiente en general lo sienten extraño y quedan bastante confundidos cuando notan que todos se encuentran alrededor de alguien. Aukan como líder se acerca rápidamente para saber qué es lo que sucede, pasa entre sus soldados de manera brusca y se queda sorprendido al ver a Lyssca en el suelo y con sangre en su boca.
-¿Qué sucedió? -Pregunta tratando de sonar tranquilo, el pulso de la chica es débil, pero aún es suficiente fuerte para que él lo escuche.
-La chica empezó a toser, la saliva empezó a salir con sangre y después de eso se desmayó. -Aukan se queda pensando qué pudo ocasionar el estado de la joven, lo más normal sería haber sido envenenada, pero no huele nada extraño en ella. Se acerca, se pone de rodillas para pasar su mano por la cara de la joven.
"-Ella en la casa de su padre me dijo que su cuerpo es débil, nunca creí que sería tanto como para colapsar. Puede que por esa razón preguntó sobre la seguridad de su familia por si ella muriera." -Es lo que supone Aukan ante la situación.
Aukan toma a la joven entre sus brazos sin importarle manchar de su sangre su ropa de soldado, sus soldados al verlo lo primero que creen es en "la va a matar" un pensamiento normal por las experiencias con otros esclavos que se han desmayado. Sin embargo, el metamorfo no tiene esos planes en su mente e incluso no se le ha pasado por la mente.
Le da una pequeña mirada a Naji provocando que este entienda de inmediato lo que quiere decirle, y rápidamente este le trajo el caballo que normalmente usa.
-Sujétala por un momento. -Aukan se sube al caballo y recibe de vuelta a la mujer. - ¿Sabías que el estado de esta mujer era así de delicado?
-La mayoría de los que viven en el imperio del sur saben que el estado de la hija menor del duque es muy delicado e incluso tiene que tomar una medicina, pero pensé que era de esas enfermedades que se inventan los aristócratas cuando sus hijos son un desastre. Ya sabes, para que al momento de estar con los demás estirados no los dejen en vergüenza.
-Hay un pequeño pueblo cerca, ve por medicina y nos alcanzas.
-¡Si señor!
La marcha continua.
Aukan se siente extraño tener a la mujer pegada a su cuerpo, en especial porque siente como la delicada mano de esta, le aprieta débilmente parte de su antebrazo. El líder de la tropa con una sola mirada hace que todos sus soldados empiecen a caminar a su par, y mientras el tiempo pasa se siente cada vez más extraño.
Al estar cerca de Lyssca puede sentir mejor su aroma y aun así no sabe muy bien a que huele, para Aukan el aroma de la mujer es como un conjunto de todo lo que le gusta, pero a su vez no es nada que conozca. Es una sensación extraña y satisfactoria.
De vez en cuando pega su nariz en el cabello de la joven, pero siempre son un par de segundos para no ser descubierto por sus soldados, ya que tiene suficiente con las pequeñas teorías que están creando.
Al paso de dos horas Naji llega en su forma de lobo, a simple vista se le puede notar bastante cansado por haber corrido tanto sin descanso alguno. Cuando vuelve a su transformación humana queda completamente desnudo, y sin importarle demasiado ese detalle le da la medicina.
-¿Cómo sabes que es esta?
-Solo tuve que decir que la hija del duque Sallow necesita medicina, no tardaron demasiado en dármelo e incluso dijeron que lo sumarian a la cuenta del mes.
-Está bien. -Aukan recibe la medicina con cuidado para que la chica no se lastime o se caiga del caballo. Abre aquel pequeño frasco, lo pasa por debajo de su nariz para que tener una idea de que está hecho, pero no huele a nada. - ¿Para qué sirve esta medicina?
-Según lo que explico el hombre es un analgésico bastante fuerte, está hecho a base de maná*.
-¿Maná? Cuando lleguemos quiero que investigues eso.
-Si señor.
SIGNIFICADO DE PALABRAS:
El maná: Es una forma de energía que existe en la naturaleza y dentro de las personas. Es la fuente de todos los hechizos mágicos.