Capítulo 5 29 DE ENERO

"¿Y cómo se todo esto?, ¿Cuál es la fuente de este texto?

La fuente soy yo, el nacido muerto"

29 DE ENERO

"Ni idea de la ética, del amor o la belleza

Como estas letras del poeta misterioso que ya no suenan"

Tal vez hay momentos en los cuales me exalto demasiado, que exagero, que hago cosas extrañas, incluso malas, lo bueno que la gente cree que hay que juzgar por las buenas acciones que han hechos, que según todos tenemos errores... ese razonamientos no me parece para nada idóneo; los actos buenos, por lo general, se realizan cuando hay gente a nuestro alrededor, para quedar bien con ellos, para mostrar tu "bondad", tu lado caritativo, pero ese lado no es más que el lado hipócrita.

Celebrando tú cumpleaños cuando ese mismo día muere y murió gente, niños, bebés... que hipócrita de tu parte, que lado más enfermo.

¿Cuándo el humano se es uno solo? ¿Cuándo se es uno mismo? Se cree que se es uno mismo cuando se está solo, pero en la soledad sólo se forma, es cuando se logra la síntesis, pero las tesis y las antítesis no proceden de ahí, de la soledad, estas proceden en donde el humano se es uno mismo, que "formar" y "se es" no es lo mismo, el humano se forma en la soledad y se es uno mismo en su desesperación, ahí donde la razón no interviene, en el instinto innato que tenemos, recordemos, somos animales, sólo que socialmente desarrollados. La razón es lo que decide, según, pero este necesita pensar y pensar lleva su tiempo; pero en la desesperación no hay tiempo para eso, por lo que hay que tomar una decisión y rápido, algo que solo es capaz de hacer el instinto, el que tienen todos los animales, donde hacemos lo que realmente somos, lo que realmente nuestra conciencia animal, la natural, predomina, y por lo general, las decisiones tomadas por el instinto son lo que consideran "malas", casi no se realizan las acciones "buenas".

Hay que juzgar a las personas por las cosas malas que han hecho, esas acciones tomadas y realizadas en la desesperación, el instinto, donde y cuando se es uno mismo. Recordemos que seguimos siendo animales.

Si la razón falla en la desesperación, sólo, y sólo talvez, esta no sirva, o no en esas situaciones. Los sentidos ni hablar, que son simplemente percepciones; cada quien interpreta lo visto, lo oído, lo tocado, lo probado y olido a su manera, nadie ve de manera objetiva, todo es subjetivo. Deje de confiar en mis sentidos y la razón tampoco parece servir para dar explicaciones.

En fin, la hipocresía, como aquel padre teniendo hijos para después hacerlos sufrir con su muerte. Pudiéndose evitar simplemente no teniendo hijos.

"La mejor lección de los padres será preparar a sus hijos

De la desaparición de su efímera existencia"

Es irónico que las preguntas fundamentales de la filosofía ya se resolvieron desde hace mucho tiempo, pero estas son tan crueles, simples, increíbles e incluso monótonas, que los filósofos simplemente no se creen o no quieren tragarse esas respuestas. La filosofía tiene respuestas, solo que estas son tan simples que los filósofos no lo aceptan.

Muchos aún buscan un significado a la vida, pero no la hay. ¿Qué tú pones el significado?, ¿Qué lo pones en base de lo que quieres hacer? Tú propio comentario demuestra que la vida no tiene sentido, además de ser hipócrita.

¿Cuándo dije yo "tú" vida?, ¿Cuándo dije que la vida "humana? Que hipócrita. En todo momento menciono la vida, toda la vida, la tuya, mía, la del perro, la del gusano, la bacteria, el parásito, si es que entran, los virus, incluso del gatito de aquel día, ¿Cuál es el sentido de la vida en si misma? Ninguna, ¿Cuál es el valor de estas?, ¿Incalculable? ¡Para nada! No hablo de la vida humana; que hipocresía, hablo de la vida en sí misma, mi vida, la de todos los seres vivos, para la naturaleza, el valor natural, es el mismo... nada. Lo mismo vale mi vida, la de un bebé, cerdo, cocodrilo, entre otros individuos, todos valemos lo mismo para la naturaleza, nada.

Ese día, hace una semana, me habré pasado con ella, no sé qué me habrá pasado, pero empecé a actuar de una manera, que simplemente, era yo, mi lado real; el que no es influenciado por nadie, ni por escritores, músicos, poetas, ni por ella, después de mucho tiempo, era yo.

Ese día, después de que me mencionó su nombre, pude observar en su rostro una expresión de miedo, con sudor frío recorriendo su rostro, en ese momento me di cuenta que en realidad, yo soy un monstruo.

Recuerdo haber cambiado mi rostro de loco por una de arrepentimiento, mientras pensaba "¿Qué acabo de hacer?". Recuerdo haber separado mi rostro y darme la vuelta, decirle "Perdón, lo siento" e irme.

Cuando llegué a mi casa, mi mamá y mi papá ya estaban en la casa, ese día parece ser que salieron muy temprano, habían comprado pizza y me preguntaron que dónde estaba, les dije que había venido un amigo de la preparatoria y fuimos al parque a pasar el rato. Mis padres me creyeron, comí pizza, me bañe y me fui a dormir.

Después de eso, en toda la semana no hice nada, literalmente, pasando los días sentado al televisor buscando que ver, pero ahora no recuerdo qué fue lo que vi.

Me siento mal por lo que hice en ese momento, siento que me excedí, seguramente no me veía para nada normal ese día, he de haber parecido un loco.

Hoy es domingo, es mi último día de vacaciones, mañana entro a la universidad así que, tal vez debería hacer algo en este tiempo.

Es de noche, no digo la hora debido a que ahora es lo que menos me importa, mañana regresaré a la escuela y tendré que hacer "amigos" nuevamente. Como me gustaría que el distanciamiento social sea para siempre.

No hay nada más que pueda hacer, no tengo otra opción, ya pagué, ahora a estudiar ahí, a ver hasta cuanto aguanto sin antes de que intente hacer nuevamente lo que hice hace semanas.

Respecto a ella, no sé qué hacer, tal vez lo mejor sería que me fuera a disculpar y que no tome tan enserio mis comentarios, que aún tengo trabajo que hacer con respecto a estas cuestiones; además, no sé por qué, pero no quiero dejar de verla y tampoco deseo que cuando ella me vea, quiera alejarse, me apetece seguir hablando con ella como hasta ahora, pero, ¿Por qué? No lo entiendo, hace mucho que no sentía ganas de querer hablar con una persona, he sido un asocial, pero ahora quiero hablar con ella, ¡¿Por qué?!

"Sin motivo de la vida pero sin suicidio a elegir

Lo que este taciturno callaba era aquello que la gente sueña"

No tengo nada que hacer, tal vez... ¿Debería ir a decirle algo?, pero ¿Qué? Si no dije más que la verdad.

No sé, aunque por lo general no, pero ahora me interesa saberlo.

Me da igual, iré a verla, algo tengo que hacer, siento algo de culpa, no es que mi conciencia no esté limpia, es algo completamente diferente, pero me incomoda.

Sin prestar atención al conjunto, me pongo mis tenis y tomo mi teléfono. Antes de salir, mi mamá me pregunta a donde voy a esta hora, a lo que respondo que iré a ver algo, pero no le digo que voy hacer exactamente. Antes de que pueda oír lo siguiente que me iba a decir, salgo de mi casa hacia el parque.

Esta todo oscuro, puede ser que sean las nueve de la noche, las diez o incluso las doce, no lo sé, simplemente tengo que ir.

No salgo corriendo, pero si camino con toda prisa hacia la misma dirección con el mismo camino de todo este tiempo.

¿Estará ella ahí? No lo sé, no debería, capaz deberé llamarla directamente a su casa.

Al llegar al parque puedo ver lo que suponía, en todo el camino, en los alrededores y en el mismo parque se encuentran en el mismo estado, vacíos, desolados, nadie caminando por aquí.

Al entrar al parque puedo ver que está vacío e incluso algo sucio, juraba hace un tiempo que estaba vacío el parque pero ahora sé que no.

En un banco cerca del arenero puedo ver una sombra, al acercarme un poco más puedo observar un cabello negro corto, ¿Será ella?

Intento acercarme de manera sigilosa sin llamar la atención de la persona que se halla enfrente de mí, pero es inútil, ya que sin darme cuenta, con mi pie toco una botella de cristal, y despierto la atención de la persona. Las botellas de cristal hasta ahora solo me han traído problemas.

Cuando la persona voltea puedo ver que es ella, la observo sentada en el banco, no puedo analizar muchos detalles debido a la oscuridad, pero puedo ver como una cara de duda al verme se convierte en una sonrisa en cuestión de segundos. Se ve muy hermosa.

-Sabría que vendrías -me dice mientras me sonríe.

Me acerco y se hace a un lado dejándome un espacio a su lado derecho, indicándome que me siente, a lo que procedo.

-¿Desde qué hora estás aquí? -le pregunto, -espero que no hayas estado aquí durante horas.

Piensa si responderme mientras observa la luna. -No te lo diré, tú te vas sin despedirte, así que tengo motivos para no responderte ciertas preguntas.

Me parece justo, no me he portado muy bien con ella.

-¿Qué sucede?, ¿Por qué me estabas esperando? y ¿Cómo sabías que vendría?

-No sé cómo, simplemente sabía que vendrías, además hay algo que me falto decirte la semana pasada -aún observa la luna y ambas se ven muy bellas.

-Dime, ¿Qué es lo que te falto decirme? -dejó de ver la luna y me voltea a ver aún con una ligera sonrisa en sus labios.

-Si eres el nacido muerto, ¿Por qué suicidarte? Implicaría morir, pero ya estás muerto, ¿Para que un muerto querría volver a morir?, ¿Es eso posible?, ¿Por qué te querías suicidar?... -tras sus últimas palabras cierra sus ojos, inclina su cabeza hacia su lado derecho y sus labios se curvan de mejilla a mejilla. Es como si estuviera diciéndome de manera indirecta: "He ganado la discusión" y, en definitiva, lo ha hecho...

-No sé qué responder... -no tengo la respuesta a esa pregunta, no sé si no la tengo porque no la conozco o porque su sonrisa me está atrapando impidiéndome responder...