Capítulo 5 Mucho más aliviado

Miro a mi alrededor; a diferencia del apartamento de la puta rubia, el pequeño

Su apartamento está muy ordenado. Sencillo pero bien cuidado. Fragante también, esencia de fores, obviamente le gustan. Veo en un rincón junto a la ventana, un sofá usado. A la izquierda un dispositivo de sonido antiguo, encima de una caja cubierta por un mantel de encaje. Hay uno Balcón que divide el departamento entre living y cocina. No hay marcos en paredes pintadas de blanco. Tampoco hay alfombra ni televisión. Una pequeña mesa dos asientos son paralelos al pequeño sofá, con un pequeño arreglo falencias, que es el único objeto de decoración. No queda nada en el pequeño

conveniente. "¿Qué está haciendo aquí, señor...?" dice, atrayendo mi atención hacia atrás. "Durant, Neil Durant." Extiendo mi mano, permanece suspendida en el aire. ¡Maldita sea! ¡Olvidé que eres ciego! - ¿Cuál es tu nombre? "Jennifer, pero todos me llaman Jenny", responde ella. "Prefiero a Jennifer, te hace ver más grande. "Señor Durant, no sé por qué está aquí, pero lo siento mucho.

cansado.

el -irr esponsable¿Quién te cuida? ¿Dónde está el irresponsable? - pregunto estresada "Nadie me cuida... No necesito que me cuiden", dice.

petulantemente - Mi tío está trabajando... - ¿Trabaja de noche? "Hasta las nueve..." responde, pero siento que quiere ocultarlo.

algo de información mía. Normalmente sé cuando alguien está mintiendo y

esta chica era una terrible mentirosa. "Entonces es bastante tarde, es pasada la medianoche". De hecho, es casi un y quince de la mañana. Se acerca al sofá y parece pensar en lo que va a decir. - Es que hoy trabajaría horas extras - justifica retorciéndose las manos. Mentiroso - lo pienso de nuevo. Está bien, entiendo que tengas miedo. Ella no me conoce todavía. Ya

es la mitad de la noche, soy como un loco interrogando a una persona que

nunca visto en mi vida, cualquiera en su lugar habría llamado a la policía. "Gracias por ayudarme de nuevo, pero creo que ya puedes irte. "Está bien", suspiro. Jennifer está cansada y pálida. "¿Estás seguro de que vas a estar bien?" "Sí", responde en voz baja. "Ten cuidado y cierra la puerta". Antes de irme, pienso en darle un beso, aunque sea casto en la esquina de la boca, pero me contengo. No quiero que me tenga miedo, y ya lo tenía.

pasado por muchas cosas. Respiro hondo, me despido a regañadientes y me voy. Del lado de afuera Lo escucho pasar el pestillo y apoyarse contra la puerta cerrada. No soy un tonto

Creo que en realidad evitará que alguien entre, pero siento mucho más aliviado. - ¡Que locura! - hablo en voz baja, casi en un murmullo. Paso mis manos por mi cabello, deseando poder borrar los últimos veinticuatro

horas en mi cabeza. "¿Calvino? Agarro mi celular y me dirijo abajo. - Si señor. durante "Necesito que me hagas un favor". Le digo lo que necesito mientras espero a que llegue Calvin. Yo mismo

Me gustaría hacer guardia, pero no puedo. Anne me está esperando en casa.

Veo a mi chofer doblando la esquina. "Apartamento 32, Calvin," le informo de nuevo mientras tomo las llaves de mi auto. - Sí señor. "Llámame si pasa algo y no dejes entrar a nadie". "Sí, señor", asiente. - Mañana por la mañana, coge un taxi y vete a casa - digo y arranco el coche -

Le pediré a alguien que ocupe tu lugar. Detrás del volante, conduzco tan rápido como lo permiten las leyes de tránsito. Mío

el corazón me dice que regrese a su casa, pero mi mente me dice lo contrario.

Nunca fui muy partidario de seguir el lado emocional. Además, Anne me está esperando. No era mi intención llegar a casa así que

anochecer. Conociéndola, sé que tendré que explicarme más tarde. nada con

no puedo manejar Tengo problemas mucho más complicados que el descontento de

Ana. Tuve un día tenso y complicado. Uno de mis proyectos favoritos.

datos importantes habían sido clonados y entregados a uno de mis mayores rivales. Afortunadamente, todavía se estaba mejorando, pero quiero saber

quien era el maldito informante. Luego había desperdiciado horas preciosas esperando en ese maldito café.

él no apareció. Volviendo a la mañana de ese día... Antes de que pudiera reunir a mi equipo,

Recibí una llamada de Pedro. Había muchas cosas por resolver en el

compañía, y el día transcurrió lentamente, como suele pasar cuando

está esperando algo. Tan pronto como el reloj dio las siete en punto

noche, salí a toda prisa. Llevaba años esperando ese encuentro. Esperé por

horas en ese café hasta que llegué a un acuerdo con el hecho de que la persona con la que me iba a encontra

no vendría Así que decidí llamar a Peter y vuelvo a ese momento.

llamada telefónica. "¿Estás seguro de que este es el vecindario, Peter?", le pregunté a mi amigo.

Investigador y amigo. "Absoluto". No entiendo por qué no apareció. "Está bien, Peter sigue investigándolo", terminé la llamada sintiéndome

frustrado. Si bien sé que es solo una pista, nunca sentí que estaba tan cerca.

Mi instinto nunca me falla, y algo me dice que está muy cerca.

Sin embargo, no llegó. ¿Por qué no apareció? Realmente no entiendo. Coronando el día que había sido uno de los más agotadores y locos de mi

vida, está Jennifer y nuestro encuentro improvisado.

Pienso en ella, pienso en el maldito hombre que podría haberla lastimado si no lo hubiera hecho.

había llegado a tiempo. En su negativa a denunciarlo ante las autoridades. Será

quien lo conoce Todavía estoy intrigado, celoso. De vuelta en mi casa, escribo el código de seguridad y me dirijo al garaje.

Al entrar, me dirijo directo al ascensor. Abro la puerta y entro en la habitación.

silenciosamente. Ana sigue durmiendo. Mañana lo daré todo posibles explicaciones y te compensaré de alguna manera. Voy a la otra habitación. Me desvisto, solo usando boxers. Literalmente Me tiro en la cama. Mis dedos hormiguean por el toque del cabello rojo y los labios suaves.

Cierro los ojos y mi último pensamiento es cómo debe ser besarlos.