- ¿Qué tiene ella? ¿Por qué no puede tener emociones fuertes? - interrogo porque estoy totalmente perdido, todos los Kerr me observaron con dudas.
- Ella tiene el trastorno de pánico - explica mi amigo quien recibe una golpiza por parte de su padre, él se soba la cabeza.
- ¿Por qué le cuentas a este engendro lo que tiene tu hermana? No tiene derecho a saberlo - pregunta el papá quejándose.
- ¿Desde cuándo? - cuestiono ignorando la mirada del señor Kerr.
- Lo tuvo siempre - responde José y asiento con la cabeza, me quedo en silencio ya que no quiero incomodar a nadie más.
- Debemos encontrar a la persona que nos quiere hacer daño - cambia de tema inmediatamente Marcos quien está entrando a la sala con una maleta, me observa detenidamente y frunce su ceño.
- ¿Quién es él? - cuestiona.
- Déjalo en paz, Marcos. Es un amigo que viene a ayudarnos - informa Jonathan, el niño me hace una seña de que me va a estar vigilándome y trago saliva.
Que intimidante y eso que soy el rey de la mafia.
- ¿Tenemos que conseguir más personas para que nos ayuden? - indago y ellos niegan.
- Contigo es suficiente. No queremos que haya más personas cerca de nuestra hermana - dice con celos el mayor de los Kerr.
Celosos me salieron los Kerr, aunque no puedo decir nada porque soy así también, si Yanil fuera mi hermana también la protegería con mi vida.
- ¿Averiguaron algo de la persona que mató a Mauro? - pregunta con un tono entrecortado Marcos, todos niegan con la cabeza y maldice.
- Papá ¿tus hombres saben el lugar dónde fue? - Indaga.
- Así es - confirma.
- Quiero que me lleven en el lugar, debo encontrar algún indicio de lo ocurrido - aclara.
- La policía de aquí se está encargando, no se puede pasar - explica.
- Entonces me encargaré yo mismo. Nos vemos más tarde - declara y se da la vuelta para irnos, nadie le dice nada, trato de hablar, pero mi mano derecha niega con la cabeza.
- No le decimos nada porque necesita despejarse y esa es su forma de ser. Déjalo que investigue por su cuenta - expresa Jonathan con seriedad.
¿Por qué me conoce tan bien?
-Trabajo para ti, Valentino. Te conozco a la perfección - dice en burla y abro mi boca para decir algo luego la cierro y ríe a carcajadas, se aproxima a mí y palmea mi hombro.
Siempre leyendo mi mente.
- Iré a ver a mi hermana ¿vienes? - dice trato de hablar, pero alguien se me adelanta.
- Él no te va a acompañar a ningún lado, se queda aquí - ordena el padre de los Kerr, Jonathan me deja solo con sus hermanos, trago saliva por los nervios que tengo ahora mismo, el silencio se hizo presente y no es uno muy cómodo que digamos sino uno tenso, siento que tengo la mirada de los Kerr.
¿Por qué siento miedo cuando estoy con ellos? Espero que baje enseguida Jonathan o siento que pronto estaré muerto.
Minutos más tarde...
Escuchamos todos que alguien baja las escaleras, nos damos vuelta y encontramos a Jonathan con una mirada de culpa
- ¿Que Paso? - preguntamos todos al mismo.
- Ella bajará enseguida - explica con un tono nervioso.
Está mintiendo.
- Necesito hablar con Valentino un momento - dice y hace una seña para que vaya junto a él, pero dudo luego hace de nuevo el gesto y suspiro, me acerco a él.
- Ella desapareció. Mi hermana no está en su habitación solo espero que no haga ninguna locura en su estado, Valen. Estoy preocupado por ella ¿Dónde será que se fue? - murmura, observa a Jonathan sin poder creer lo que dice.
Si el Señor Kerr se entera de esto, nos matará a todos. Tenemos que encontrar sin levantar sospechas.
"CAPITULO 7"
Valentino
Horas más tarde...
Salgo de la casa de los Kerr.
- Espera, Valentino - dice mi amigo, me doy la vuelta y frunzo mi ceño.
- ¿Qué quieres? - pregunto.
- No puedo ir contigo. Te cubriré, trae de vuelta a mi hermana y mi deuda seguirá en pie - suplica y ruedo los ojos.
- No estamos en la edad media, idiota. Eres mi amigo y es obvio que voy a traer a tu hermana y mi futura mujer - declaro, me encamino hasta mi auto con rapidez también dejando con la boca abierta a mi amigo.
- Espera... ¿Qué? ¿Cómo que tu mujer? - pregunta alterado y corre hasta el auto, hago una seña de despedida antes que me mate.
Yanil Kerr será mi mujer, estoy seguro de ello. Ahora lo principal ¿En qué aeropuerto estará esta mujer?
Hubiese preguntado a Jonathan, pero me olvidé, presto atención a mi mensaje y es mi mano derecha indicando la dirección de mi destino.
Espero que ella esté bien.
Horas más tarde...
Después de buscar en tres aeropuertos, entro al último aeropuerto del país empiezo a buscar a la mujer por todas partes, pero no la encuentro por ningún lado hasta que alguien grita, corro hasta ahí y miro que mi mujer es agarrada por los policías del aeropuerto.
¿Por qué le agarran así? ¿Quiénes se creen?
- Yanil - llamo y ella me presta atención, llora y se zafa de los guardias, corre hasta donde me encuentro, me abraza y beso su cabeza.
Que bien huele. Quiero hacerla mía de una buena vez, pero su condición de ahora me frena.
Alguien aclara su garganta y vuelvo a la realidad
- Señor ¿esa mujer viene con usted? - cuestiona el oficial.
- Si ¿algún problema oficial? - indago con seriedad y asiente con la cabeza.
- Ella quería subirse en el avión sin ningún boleto - explica, miro a mi mujer quien se quedó dormida entre mis brazos.
Se nota que quiere dormir.
- Ella está pasando por un problema personal. Su familia espera por ella - hablo y asienten los oficiales, alzo a Yanil al estilo princesa hasta el auto cuando abro la puerta, la pongo en el asiento del copiloto, agarro el cinturón de seguridad, coloco, cierro la puerta y rodeo el auto, entro al auto y arranco para la casa de los Kerr.
Minutos más tarde...
Al llegar observo que toda la casa está a oscuras, frunzo mi ceño porque también veo que la puerta principal está abierta.
¿Qué pasó aquí?
Saco mi pistola de la parte de atrás e ingreso a la casa, todo está destrozado, hago caso al ruido que proviene atrás de un estante, me aproximo y miro que es Jonathan.
- ¿Qué pasó? - cuestiono preocupado.
- Se llevaron a mi padre. Mis hermanos escaparon, se fueron al refugio, necesitamos encontrarlos - es lo único que dice cuando trata de levantarse hace un gesto de dolor.
- ¿Quién hizo esto? - interrogo con enojo, pero cae desmayado, hago una llamada para que uno de mis hombres traiga a una enfermera.
- Una persona que mi padre conoce muy bien - es lo único que dice antes de caer inconsciente.
Horas más tarde...
Los hermanos Kerr salieron de su escondite, encuentran todos en la sala de estar con nervios ya que no tienen la noticia de Jonathan y Yanil todavía.
- ¿Saben quién quiere hacerlos daño? - cuestiono con seriedad.
- Todo el mundo quiere hacernos daño, Valentino. Mi padre tiene muchos enemigos - contesta José en forma cortante.
Que pregunta más estúpida ¿no?
- Debemos encontrar a papá, necesitaremos ayuda ¿crees que tu gente o aislados querrán ayudarnos? - pregunta Marcos.
- Ellos ayudarán - afirmo.
O eso espero. Percibimos con los hermanos que el medico viene hacia nosotros y nos ponemos atentos a los que nos dirán.
- Se pondrán bien. Yanil recibió su dosis, no deben preocuparse y Jonathan es un muchacho fuerte, su herida no es tan profunda - informa con tranquilidad.
- Muchas gracias - decimos todos juntos al mismo tiempo.
- Con permiso - dice y se retira de la casa.
- Se irán a mi mansión. Es el único lugar seguro y nadie podrá atacarlos también sus hermanos heridos podrán descansar tranquilos, traeré a mis aliados - explico y ellos asienten sin ninguna objeción.
Una hora más tarde...
Los Kerr y yo estamos en mi mansión.
- Tendré que hacer un viaje largo por unos días. Espero que cuiden bien de mi mujer - hablo a los hermanos Kerr quienes bufan con los brazos cruzados.
- Ella no es nada tuyo, no me jodas - dice José entre dientes.
- Lo será - afirmo con la cabeza, tratan de decir algo, pero se quedan callados mientras me observan mal.
- La ama de llaves les enseñará sus habitaciones y la casa. Jonathan y Yanil ya están las suyas - indico y asienten con la cabeza.
Me voy hasta la salida y observo a uno de los guardias.
- Diles que preparen el helicóptero. Iremos a hacer una visita a los Romanov -ordeno y el guardia se va directo a hacer lo que le indico.
Espero que los Romanov quieran ayudarnos o estamos perdidos.