Loba, mi nueva vida.
img img Loba, mi nueva vida. img Capítulo 4 Capitulo Cuatro
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Capítulo 6 Capitulo Seis img
Capítulo 7 Capitulo Siete img
Capítulo 8 Capitulo Ocho img
Capítulo 9 Capitulo Nueve img
Capítulo 10 Capitulo Diez img
Capítulo 11 Capitulo Once img
Capítulo 12 Capitulo Doce img
Capítulo 13 Capitulo Trece img
Capítulo 14 Capitulo Catorce img
Capítulo 15 La molestia de la bestia. img
Capítulo 16 Si la luz se apaga. img
Capítulo 17 ¿Hay un libro img
Capítulo 18 No soy mala. img
Capítulo 19 Luna nueva. img
Capítulo 20 Ganar tiempo. img
Capítulo 21 Ataque. img
Capítulo 22 ¿Dolor img
Capítulo 23 Encerrada img
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Capítulo 4 Capitulo Cuatro

Jake me sonrió de lado, mientras me observaba desde la puerta de la habitación. Yo estaba recibiendo órdenes de dos chicas que sabía que eran famosas pero no lograba identificarlas bien. Se ponían al frente mío y estaban discutiendo entre dos vestidos, que claramente trajo cada cual uno para hacerme probar, y como maquillarme.

Finalmente decidieron por lo clásico, un vestido negro hasta arriba de las rodillas, haciendo juego con unos tacones que me agarraba el tobillo y una cinta por encima de mis dedos. Cuando ya terminaron conmigo y sintiéndome tímida por todo el alboroto, me salí de la habitación así ellas se cambiaban.

La verdad que eran dos chicas muy buenas y divertidas, por lo que entendí, la más rubia era Anna que era un poco más baja que yo y era modelo, mientras que Sophi era una actriz muy reconocida. Yo no sé de donde salieron tantos famosos de golpe, y esto me estaba teniendo un poco más cohibida de lo normal. En el pasillo que separaba las habitaciones me quedé esperando con la cabeza cabizbaja, al final donde conecta con el living se encontraba James y Román hablando, muy civilizadamente con Jake.

Sorprendida de la actitud de mi amigo me acerque a ellos, lentamente para tratar de que no se perciban de mi presencia, pero sí lo hicieron. Salude a mi amigo con un abrazo y a Román con un beso en la mejilla, mientras tanto sentía que la espalda me ardía por la vista de Jake sobre mí.

-¡Que belleza mi amiga! - Estira un brazo agarrando el mío y a la fuerza haciendo que dé una vuelta, mis mejillas se sonrojaron fuertemente. Aplaude cuando termina y su acompañante rueda los ojos riéndose por las alegaciones que hace su... ¿amante?

- Gracias. - Me doy vuelta y observo los ojos de Jake, tuvieron un atisbo de amarillo por un segundo y me sonrió, sigo sin comprender ese color, ¿será un reflejo de la luz?

Rascándose la nuca un poco tímido - Brooke, ¿me acompañas un momento?- Me acerco su mano a la mía y la agarro con firmeza mientras yo asentía. Me guio por el pasillo hasta sus aposentos. - Espérame acá por favor - Me senté en su cama y esperé ansiosa. Se acercó con una bolsita de regalo. - Es para ti. - rápidamente le saqué la bolsa y desesperadamente como una niña en su cumpleaños abrí el regalo, tenía una cajita y en ella una pulsera plateada con unas perlas violetas. La observe en la palma de mi mano.

-Es hermosa, muchas gracias Jakie - Le sonreí tímidamente e hice un ademán para que me la colocase, y es lo que hizo.

- Sé que te sonará raro, pero por favor, cada vez que estés lejos de mí, nunca te saques esta pulsera. - Lo miré asustada. - Es extraño, pero pronto lo entenderás. - Sin decir nada más se fue del cuarto.

"Pronto entenderás". Es lo que rebotaba en mi cabeza, ya había escuchado esa frase y algo dentro de mí me decía que tenía que hacerle caso, desde que salimos del departamento hasta que estábamos en la puerta de la fiesta no deje de pensar. No comprendía a lo que se refería, que quería transmitir eso, pero estaba decidida a no sacármela nunca, a menos que él lo ordene y tampoco entendía mi obediencia, recién lo conocía era un completo extraño aunque él sea un famoso muy reconocido.

Al ingresar a la fiesta, había muchas personas, me agarré a James de su brazo y nos encaminamos como pudimos entre la gente. Jake estaba delante mío abriendo paso, Román atrás del todo y Anna y Sophi atrás mío. Seguimos al gran baterista de los Hunters hasta una sala VIP arriba, un policía lo freno y le pidió documentación, este se la dio, dejándonos pasar a todos.

Ya adentro pude divisar a los demás pertenecientes de la banda y otros famosos importantes. Jake se acercó a sus ex compañeros y los saludó normalmente, por lo que entendí que no quedó rencor entre ellos y eso parecía bueno. A penas me acerque un paso a ellos, todos los de la banda giraron su cabeza muy rápidamente hacia mí, fue tan rápido que me asustó, y observaron a su ex compañero, con un encogimiento de hombros dejaron de prestarme atención.

Me acerque y los salude a cada uno, ignorando lo anteriormente ocurrido. Me senté junto a él, mientras ellos conversaban de sus fans, Sophi y Anna estaban en grupos diferentes hablando y riéndose, mientras que Román y James se quedaron en la barra besuqueándose y tomando unos chupitos al parecer.

Estuve entre una y dos horas sentada, aburrida y con ganas de bailar, pero nadie me pedía hacerlo, además que la zona VIP eran muchos famosos y claramente pareciese que no existiera porque aunque estaba vestida con ropa de alguna de las chicas, no recuerdo quien me presto el vestido, se notaba que estaba fuera de lugar allí, estaba clásica a comparación de todo el brillo que tenían las muchachas de este sector.

Cuando ya me decidí, me levanté para salir de esa zona, salude al guardia muy amablemente y cuando estaba llegando a la puerta de salida, Harry, el cantante de los Hunters me agarró del brazo.

- ¿Te vas tan rápido? - Me dio una sonrisa amable.

- Sí... es que yo... mañana trabajo. - El soltó mi brazo y me dio una mirada de entendimiento.

- Si quieres puedo llevarte, Jake está un poco ebrio como para que él lo haga. -

Busqué con la mirada a Jake y estaba en la barra con una muchacha muy cerca de su boca.- Si, si no te molestaría hacerlo. -Nunca se fijaría en mí.

Instantáneamente al pensar eso el giro su cabeza para observarme, empujó levemente a la chica y vino casi corriendo hacia mí. Cuando estuvo al frente mío, me tomo la muñeca y la observó, no tenía la pulsera.

-Tengo que sacarte de aquí. - Rápidamente me empujo contra la puerta, agarrándome en brazos y sacándome de allí. Fuimos hasta su auto y me sentó en el asiento de acompañante para luego encender el auto e ir lo más rápido posible a no sé dónde. - ¿Por qué te sacaste la pulsera? - Dijo en un tono cortante.

-Yo...yo... - Un auto pasa muy cerca nuestro y Jake frena bruscamente haciendo que casi me estrelle contra el parabrisas. - ¿¡Puedes ir más lento!? ¡¡Yo no me la quité!! - el frenó nuevamente de golpe.

- ¿Tu no lo hiciste? - Su cara cambio radicalmente, de enojado a preocupado en un segundo - Oh. Estamos en problemas. - Puso en marcha el auto nuevamente y fuimos más rápido.

- ¿¡Puedes explicarme lo que está pasando!? ¡Estoy harta de que te hagas el misterioso! - trato de ponerme el cinturón rápidamente antes de que salga volando del auto.

- Te lo explicaré, juro que lo haré, pero ahora mismo - miró directamente a mis ojos - solo tienes que saber que lo que dijeron tus padres es mentira. - Me quedé más extrañada... hasta que recordé. ¡La conversación de hoy!

- Pero, no entiendo. Tienes que ser más específico. - Lo miré exageradamente enojada, ya agarrando el barandal que tiene la puerta con fuerza.

- Eres más adorable cuando te enojas. - Doblo a la derecha de golpe y choque mi cabeza contra la puerta. - Lo siento, ahora haremos esto, cuando lleguemos a casa, te meterás en mi cuarto, en la mesa de luz que está al lado de la cama, hay un sobre y otra pulsera idéntica a la que te regalé hoy, pero en este caso, esta es la real y no podrás sacártela nunca, no porque te diga yo, sino porque tú eres la correcta. - Me dejó más confundida de lo que estaba. Asentí con la cabeza; estaba loco con cada palabra que decía, realmente debí plantearme que se drogaba con cocaína. Haría lo que él dice por miedo a lo que me hiciera.

Llegamos al edificio y al llegar a nuestro departamento saco una pistola del bolsillo.

- ¡¡Que haces!! - Grité, el tapo mi boca con su mano y susurrando dijo.

- Podría haber alguien si alguien ya descubrió tu identidad. - Abrió lentamente la puerta.

« ¡porque no me cruce a Brad Pitt y no a este loco drogón! »

Me coloco detrás de él, prendió cada luz despacio e investigando hasta llegar a su habitación, entramos y no había nadie. Fui donde me dijo y me coloque la pulsera.

Era idéntica a la anterior solo que las piedras cuando las toque se convirtieron en amarillas y una sola obtuvo un fondo negro con una luna delante, el cielo en la noche. Cuando ya la tenía puesta se achicó y apretó contra mí. Me dolió un poco pero era aceptable; al estar tan embobada con la vista, no me di cuenta que Jake estaba al lado mío observando lo sucedido también.

- Eres tu... - Me miro a los ojos y nuevamente el reflejo de la luz dejo esos ojos azules, en un color amarillo- Por fin te encontré. - Susurro y su cara paso de sorprendido a una sonrisa de "feliz cumpleaños". Saltó de alegría y me abrazó. Me dejó en el piso, ¡Seguía sin entender nada! - Vamos, tenemos que irnos de aquí. - Agarre la carta que él me había indicado anteriormente y nos fuimos de allí, hasta su auto.

            
            

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