Capítulo 2 ¿No es esta la señora Ning (Segunda parte)

Un dolor agudo se disipó por todo su brazo herido, mientras que una ráfaga de viento provocó que su rostro palideciera. Entonces, se volvió para ver a Emma de pie junto a la puerta y le lanzó una sonrisa.

La mucama dio unos pasos hacia ella para consolarla:

"Señora, no es cierto que el señor Ning no coma sopa. Quizás solo esté de mal humor hoy. Por favor, no se enfade con él por esto".

Cynthia asintió en respuesta: "No te preocupes, Emma. No es gran cosa; me aseguraré de cuidarlo".

Estas palabras sorprendieron a la mujer, pero de inmediato lo ocultó.

Finalmente, había sido ella quien envió su foto con Felix acostados en la cama a su abuela y a los medios de comunicación. De no haber sido por este escándalo, la familia Ning nunca la habría aceptado.

Emma había trabajado para la familia durante mucho tiempo e incluso vio crecer a Felix, quien nunca habría hecho algo así.

Con esta trampa, la mujer se aseguró de que él no fuera capaz de sentir nada por ella.

Suspirando por dentro, se quedó callada.

La siguiente vez que Cynthia vio a Felix fue en el Grand Hotel.

Este era uno de los tantos negocios de la familia Ning, y era el hotel más grande en Ciudad A, lo cual hizo que se convirtiera en un lugar famoso para celebrar fiestas.

Los reconocidos chefs preparaban exquisitos banquetes, entre los cuales incluían platillos del mundo entero para asegurarse de que hubiera algo para todos. A pesar de que el nivel de consumo en el lugar era aterrador, eso nunca impidió que la clase alta lo visitara.

Cynthia solo había ido allí porque había aceptado participar en una obra de teatro no hacía mucho y, después de la inauguración, el director invitó a todo el elenco y al personal a comer.

Sin embargo, dio la casualidad que Felix se encontraba allí, sentado en uno de los palcos principales. Ella no lo había visto en tres días, así que una sonrisa iluminó su rostro; la idea de encontrarse con él le emocionaba mucho. Si bien no era algo que esperara, le sorprendió mucho cuando apareció.

Sentada en su asiento, agachó la cabeza y lo miró discretamente mientras los demás brindaban.

Él iba vestido con un traje a la medida y llevaba el pelo corto peinado hacia atrás meticulosamente. Con los dedos entrelazados bajo el cristal, golpeaba rítmicamente la mesa, escuchando vagamente las palabras del director y sonriendo educadamente de vez en cuando.

Sentado frente a todos, parecía el rey de un cuento de hadas, y sus ojos reflejaban su gran poder.

Cynthia miró fijamente al hombre que le resultó familiar pero a la vez extraño y se perdió en sus pensamientos por un momento.

De pronto, Felix pudo sentir que alguien lo estaba mirando y, cuando giró la cabeza para ver a la mujer a los ojos, una pizca de disgusto apareció en su mirada.

Justo en ese momento, el director se estaba dirigiendo a él en su discurso y, al notar que estaba mirando a Cynthia, sonrió y se burló.

"Señor Ning, ¿le preocupaba que molestemos a su esposa? ¿Es por eso que nos honra con su presencia el día de hoy?".

El comentario hizo que el corazón de Cynthia diera un vuelco. Entonces, cogió su copa para tomar un trago, sin poder evitar reírse para sus adentros ante las falsas suposiciones del director.

Todos en el círculo empresarial sabían exactamente por qué se habían casado.

Como era de esperar, Felix retiró la mirada y respondió con tono indiferente: "¡No es que me importe!".

La sonrisa en el rostro del director se congeló, y apartó la mirada para pensar por un momento. Parecía como si de pronto hubiera recordado que estaban casados, por lo que sonrió torpemente y cambió de tema.

Las palabras de Felix provocaron que la atmósfera en la habitación privada se volviera animada y Cynthia pudo escuchar los leves susurros a su alrededor.

"¿Recuerdas que una vez estuvo en todos los tabloides de Microblog?".

"Sí, claro. ¡Se volvió famosa! ¡Nadie hablaba de otra cosa! Escuché que fue ella misma quien lo expuso, ¿crees que es cierto?".

"Es posible, pues poco después de eso se casó con el señor Ning".

"Shh, baja la voz, ¿no ves que ahora forma parte de la élite? Podrías meterte en problemas".

"¿Acaso mencioné su nombre? Si fue lo suficientemente desvergonzada como para hacer eso, no veo por qué yo no podría hablar al respecto".

Los susurros venían de todas las direcciones, por lo que Cynthia simplemente se quedó sentada mirando a Felix, quien la veía con los ojos llenos de una mezcla de disgusto, desdén y desprecio.

Ella apartó la mirada, sintiendo un agudo dolor en el brazo, como si alguien la estuviera pinchando con una aguja.

No era realmente dolor, sino un repentina necesidad por rascarse.

"Cric".

De repente, se puso de pie y la silla raspó el suelo de madera, emitiendo un sonido desagradable. Toda la habitación se quedó en silencio, mientras que todos los presentes miraban fijamente a Cynthia. Con una suave sonrisa, ella comenzó a decir: "Perdón, iré al baño un momento. Por favor, sigan disfrutando la experiencia".

Una vez que llegó al baño, se echó un poco de agua fría en la cara y se la secó con unas palmaditas. Al mirarse en el espejo, se percató de que tenía los ojos rojos.

Esto la hizo burlarse de sí misma por dentro y luego volvió aplicarse un poco de maquillaje. Una vez que estuvo segura de que se veía bien, se enderezó con confianza y salió del lugar.

Junto a la puerta del baño, se encontró con una mujer a quien reconoció de inmediato.

Se trataba de Nina Zhang y la conoció mientras filmaban una película. Su voz tenía una cualidad muy coqueta, lo cual le había ganado una gran fama.

Cuando ambas se cruzaron, Nina de repente se acercó y tiró de ella.

"Vaya, ¿no es esta la señora Ning?", se burló con su famosa voz coqueta, provocando que Cynthia quisiera reírse a carcajadas.

Siendo tan popular, una nueva actriz como Nina no debería tener las agallas para burlarse de ella así. Sin embargo, Cynthia estaba involucrada en algunos rumores escandalosos y eso hacía que la gente perdiera la vergüenza cuando la veía.