Capítulo 5 La gran Boda

Como las rápidas y brillantes olas del mar, el tiempo paso implacable e indetenible. Fue entonces cuando en una mañana fresca al despertar observe las blancas paredes de mi habitación con desconcierto, nostalgia y alegría. Hoy, en mi vigésimo sexto cumpleaños, acontecería lo que sería el evento más feliz de toda mi vida, mi gran y esperada boda. El solo pensamiento me hizo levantar de la cama con prisa, allí visualicé el hermoso vestido blanco de encaje de marfil, con pedrería fina alrededor de las mangas.

Todo estaba preparado y aunque la ceremonia iniciaría a la cinco de la tarde, aún había algunas cosas por hacer. Me Moría de ganas por recoger el delicioso y magnífico pastel de origen francés que tuve que ordenar con siete meses de anterioridad en una reconocida repostería de la ciudad.

Por supuesto pude haber mandado alguien a recogerlo, pero quería ser yo misma la primera persona en verlo, era mi boda, tenía que estar pendiente de hasta de la más mínima cosa, pues debía ser impecable y magnifico. Después de todo, la persona con la que me casaría era un hombre perfecto, un chico dulce y responsable que le gustaba ayudar a los demás.

Después de algunos años de relación al fin había llegado el tan esperado momento, ambas familias estaban muy entusiasmadas y mi madre y mi suegra estuvieron muy atentas ayudándonos con los preparativos. Incluso mi futuro esposo que estaba siempre muy ocupado con el trabajo del hospital se mostró muy interesado en todo el proceso e incluso estuvo dispuesto a pagar a sus colegas para que cubrieran sus turnos en los momentos que lo llamaba con prisa manifestándole que no sabía que tipo decoración escoger o que alimentos estarían bien para la cena. Él estuvo siempre ahí, en lo único que no me acompaño fue a seleccionar el vestido, esto porque yo misma insistí en que debía ser una sorpresa. Si ahora mismo alguien me preguntara si estoy segura de dar este paso, respondería sin dudar que lo estoy, porque a ese guapo medico lo amo con locura.

10:00 AM

Al pasar por la tienda y recoger el pastel de tres pisos que por cierto era maravilloso con su elegante decoración de rosas en la parte inferior y de la parte superior destacaban los cake toppers, que eran las figuras de Santiago y yo en muñecos miniatura, lo gracioso era que ambos vestíamos trajes de hospital y en el borde de cada traje una frase resaltaba "Doctor" "psicóloga"

Aunque ese fue el diseño que elegimos ambos era algo gracioso verlo, pero también evocaban hermosos recuerdos, después de todo fueron nuestras profesiones las que nos permitieron conocernos.

01:00 PM

Sentada pulcramente sobre un sillón elegante, Ana observaba su reflejo en el enorme espejo del salón donde su hermosa caballera era tratada en un peinado semirrecogido con ondas. A su lado Conversaba alegremente Denis, su madre quien no se había despegado de su lado en toda la tarde.

-Tu padre está recogiendo a tu hermano en el aeropuerto, en la última llamada que hicimos no dejo de quejarse diciendo por qué tenías que dejar la boda para un día entre semana. Ya sabes cómo es, aunque protesta mucho está muy feliz por ti.

Ana, que logro imaginar casi a la perfección las caras de protesta de su sobreprotector pariente anuncio solemnemente

-Lo sé, me siento una persona muy importante hice que el coronel de las fuerzas armadas abandonara su puesto para venir a mi boda, pfff. Rio entre dientes la muchacha que desbordaba felicidad.

Su gozo lleno de entusiasmo a las jóvenes del salón que la observaban en silencio. Las dos mujeres se veían tan contestas que transmitieron sus emociones a quienes se encontraban cerca.

03: 50 PM

En la casa de la novia una familia entera estaba nuevamente reunida, Andrés, el hermano mayor que había estado lejos de casa durante algunos años debido a la naturaleza de su trabajo, finalmente estaba de regreso. Con una diferencia de edad de diez años, Ana, era para él su pequeña hermanita que estaba ahora a punto de casarse y abandonar el nido.

Pronto la profesional de la salud mental bajo las escaleras, detrás de ella venia su padre quien sostenía la enorme cola del vestido, la piel tersa y blanca encajaba a la perfección con el traje, su cabellera castaña resplandecía con la brillante luz que ingresaba al lugar, las gemas de sus ojos claros se mezclaban relucientes con las joyas que adornaban su clavícula.

-Te ves sensacional, digna de ser mi hermana, ambos sacamos lo mejor de nuestros padres.

Ana, no pudo contener la risa ante la ocurrencia del fornido agente del ejército.

-No has cambiado, ni un poco, sigues siendo un total bromista.

Andrés se encontró repentinamente con la mirada de Alberto, su progenitor, ambos observaron con nostalgia a la bebe de la casa. Quien estaba a punto de partir hacia un nuevo camino, con otro hombre, que no era ninguno de los dos. Lo más molesto de toda la situación era que encima de eso debían despedirla con alegría. Un sentimiento de tristeza a travesaba a los sobreprotectores sujetos, que durante toda su vida habían guardado y tratado como la más valiosa de las piedras preciosas a la pequeña mujercita del hogar, que era ahora una hermosa doncella.

Del otro lado Denis grito con entusiasmó;

- ¡Dios mío, te ves preciosa! Estas a punto de casarte. Mi corazón no puede estar más dichoso.

Exclamo eufórica la señora, quien acercándose a su marido le arrebato la cola que sostenía del vestido y lo saco del ensueño

-Anda, apresúrate a cambiarte no queremos que la novia llegue tarde al propio día de su boda

Luego señalo hacia donde se encontraba el adulto cabizbajo que por ingratitud del destino había salido tan parecido a su padre tanto en personalidad como en apariencia

-Tú también, apresúrate y ve a ducharte, tienes diez minutos para salir, si no lo haces los abandonaremos a ambos, y tendrán que llegar solos a la iglesia, No voy a permitir que Ana se retrase.

04:10 PM Casa del novio

En el jardín del patio trasero de una vivienda sencilla pero bien cuidada, una madre orgullosa tomaba fotos a su hijo que vestía un traje de esmoquin de tres piezas, una camisa manga larga blanca acompañando de un chaleco negro, en conjunto con una selecta corbata azul oscuro con líneas.

- Te ves guapísimo. ¡Dios mío esto es una locura! Mi hijo quien desde pequeño decía que no se casaría, lo está haciendo más temprano de lo que alguna vez me imagine

- ohm, vamos tía, deja de tomarle fotos, no ves que el pobre esta que se muere de los nervios, puede que incluso no pueda hablar cuando se encuentre en el altar.

Interfirió José, burlándose de su primo y mejor amigo, que durante todo el día había estado ansioso, pero por supuesto también feliz.

La señora de mediana edad corrió acercándose al molesto odontólogo que desde muy temprano había interrumpido en la casa ajena y no paraba de bromear y molestar a su hijo

-Tu, sinvergüenza, no te atrevas acércate más y pegarle ese horrible olor a cigarrillo, mantén una distancia prudente

Sebastián, observo la animada escena, en este momento tan importante en su vida, su mama y su primo lo acompañaban, sin embargo, su hermana mayor no estaba presente, una punzada atravesó su corazón.

.

.

.

Aquel día que debía ser el mas feliz de mi vida, se convirtió en la pesadilla que me persiguió por años.

...Continuara....

                         

COPYRIGHT(©) 2022