Capítulo 6 Capítulo 6

"Porque eres una tonta", dijo Theodore Chao mirándola con indiferencia.

"Ja ...", Elizabeth Liang no pudo evitar reírse. Había estado comprometido con ella desde que era una niña. Durante todos estos años, nadie fue tan amable y cariñoso con ella más que él, realmente pensó que era el indicado.

Hace un mes le había dicho que tenía que irse al extranjero por negocios de la empresa, ella se despidió de él en el aeropuerto y le dijo que lo esperara hasta que regresara. ¿Esperarlo para que pueda estar con su prima y decirle que es un estorbo? ¿Una tonta?

"¿Solo porque no me acosté contigo?", cuestionó con tristeza Elizabeth mirándolo fijamente a los ojos esperando encontrar su falsedad.

"Elizabeth, nos conocemos desde hace mucho tiempo. Vete antes de que las cosas empeoren", comentó.

Elizabeth sintió que acababa de escuchar una broma y le dijo: "¿Quieres que me vaya de este lugar? Esta es la propiedad de los Liang que mis padres me heredaron".

"¿Tuya?", mencionó como una villana engreída, Charlotte Dong cogió el documento de la mesa que tenía a su lado y se lo mostró a Elizabeth diciéndole: "Mira, ¿dice que la casa es tuya, Elizabeth?"

Elizabeth miró el papel que Charlotte tenía en la mano y decía: "Acuerdo de transferencia de propiedad", las palabras estaban impresas en letras grandes haciendo que Elizabeth abriera los ojos de inmediato.

Le tomó un tiempo calmarse y finalmente dijo:"¿Pensaste que podrías engañarme con esta descuidada imitación de mi letra?"

"¿Quién dijo que es falso?", mencionó Josephine Liang moviendo su cabello para luego decir: "¿No lo firmaste tú anoche? ¿Estás tratando de negarlo? Es imposible hacerlo cuando varias personas estaban observando".

En su confusa memoria recordaba que Josephine le estaba dando algo para firmar. ¿Qué dijo Josephine en ese momento? Esperó que estuviera borracha para decirle que el gerente del karaoke necesitaba su firma.

"No ... no ...", Elizabeth negó con la cabeza, nunca hubiera imaginado que la familia de su tío la trataría así.

"Por cierto, las acciones de la empresa tampoco tienen nada que ver contigo", dijo Charlotte sacando otro documento y lo agitó presumidamente para luego mencionar: "Tú también firmaste esto anoche".

"¿Qué?", dijo Elizabeth mirando a Charlotte con total incredulidad, como si le hubiera caído un balde de agua fría. No podía entender lo que estaba pasando.

"¿Qué quiero decir? Estoy diciendo que ya nos han transferido la propiedad accionaria. En otras palabras, el Grupo Liang ya no es tuyo. Ahora vete de aquí".

Miró a la gente en la habitación y pareció entender: "¿Me tendieron una trampa? No fue suficiente con emborracharme y hacerme firmar el contrato de transferencia, sino que también me utilizaste para tus negocios".

Charlotte inhaló profundamente y dijo: "Supongo que no eres tan estúpida como pensé".

Elizabeth no pudo soportarlo más y cayó al suelo. ¡No! Esta casa y la Compañía Liang se las dejaron sus padres, no puede dárselas a nadie más, se apresuró a tomar el contrato y querer romperlo, pero Charlotte estaba preparada y lo escondió de inmediato detrás de ella empujando a Elizabeth hacia atrás con la otra mano.

Elizabeth tropezó y cayó al suelo golpeándose la frente en la esquina de la mesa, sintió un dolor y al estirar su mano para tocarse vio la sangre.

Charlotte la miró un poco asustada, pero rápidamente ocultó su sorpresa diciendo: "No actúes como si te fueras a morir".

Elizabeth apretó los dientes y se apoyó en la mesa, en lo único que pensaba era recuperar el contrato, así que intentó volver agarrarla, pero fue inútil.

Josephine se acercó a ella y la abofeteó con fuerza para luego decirle: "¡Ten algo de vergüenza, Elizabeth!"

Hace mucho tiempo Josephine quería abofetearla, August había reemplazado al padre de Elizabeth asumiendo la administración de la Compañía Liang hace años, pero Elizabeth siempre fue la principal accionista mientras que August Liang solo tenía el 5%. La familia de él se mudó a la mansión Liang con el propósito de cuidar a Elizabeth, han estado esperando tanto que llegué este día y ahora con la ayuda de Theodore habían conseguido alterar los documentos de la herencia logrando así ya no tener que preocuparse nunca más por ella.

August finalmente habló: "Basta Josephine, después de todo es tu prima".

"Pero papá, la mansión Liang está en nuestras manos ahora y la Compañía ya no tiene nada que ver con ella. No me importa si es mi prima o no", mencionó Josephine.

Los ojos de Elizabeth estaban rojos de la ira y dijo: "Todo esto es mío ¡Devuélvanmelo!"

Josephine respondió con voz frívola y burlona: "En tus sueños".

"Ustedes ...", Elizabeth miró a las personas que estaban alrededor y apretó los puños con fuerza clavando profundamente sus uñas en las palmas sin sentir dolor alguno y dijo:"¡Esperen y recuperaré lo que es mío!"

A Charlotte se le acabó la paciencia y le gritó a la sirvienta que estaba a su lado: "¿Qué estás esperando? Date prisa y échala".