- Si lo estoy viendo, sino soy siega, no se que estabas pensando al vestirte como Alicia en el pais de las maravillas, pero mirate hasta orejas de conejos tienes, que van ha pensar los vecinos que eres una excentrica de lo más extraña.
-¡Ma! ¿No puedes ver que soy la princesa de los conejos?. No soy Alicia.
-¿¡Maya!?. (mi madre suspira, mostrando su descotento). Ya tienes 17, eres casí una adulta, debes dejar esas niñerías, vamos que se nos esta haciendo tarde. 😤
-¡Ma! 🥺 ( pero ella simplemente sale de la casa, sin siquiera dirigirme la palabra, no me queda más que seguirla).
Cruzamos al el otro lado de la calle, que es donde sean mudado nuetros nuevos vecinos. Es una casa hermosa, de dos niveles, de color azul claro, pero lo que más llama la atención de está, es su hermoso jardín; que contiene una hermosa variedad de orquídeas de diferentes colores, no sabía que hubiera tantos colores de estas hermosas flores.
Aproximadamente, como un mes antes de que se mudaran, un equipo de diseño y jardinería remodelo la casa y todo su entorno. Deben de ser una familia con buenos ingresos, a diferencia de mi casa que nunca se a remodelado y mirando nuestro jardín, parece como que no vivieran personas.
Debería ayudar a mamí, podando el jardín, aunque me duela admitirlo, casí no ayudo con las labores del hogar, y viendo el contraste que hacen estos dos lugares me hace sentir avergonzada.🙇♀️ Debería ayudar más a mamá, ya que papá no la ayuda, porque el ¿cómo decirlo? Vive de la caridad y trabaja para la caridad. De repente escuchó una voz que me llamá y me saca de mis cavilaciónes.
-Maya, Maya, Mayaaaaaa🖐(mi madre pasa su mano por delante de mi cara, como si espantará moscas). Llamándo a Maya, desde la base.
-Lo... lo siento😳.(odio, odiooo, lo odioooo, cuándo me pasa esto, que quedo como si perdiera la señal y no oigo ni escuchó lo que pasa en mí entorno y que me pasara justo ahora🤦♀️.Quisira que se abrá un hoyo y me tragué.)
-¿Estás bien, cariño?. (Me pregunta mi madre, con cara de preocupación).
-¡Estoy bien!.(De repente levantó la cabeza como si me acordara que estamos en frente de la casa de los nuevos vecinos; al mirar hacia arriba me topo con un chico de cabello negro, naríz perfecta y rostro divino, con unos ojos de un profundo color rojo carmesí, me quedo asombrada por su color e intensa mirada, creo que tienen que ser postizo, al meno que nuestro nuevos vecinos sean vampiros, pero ahí no que da la cosa no tiene camisa, solo viste un patalón corto de deporte ajustado que marca algunos buenos lugares, es alto, pero muy alto, sus piernas musculosa son muy largas; vuelvo y subo la mirada por esos hermosos cuadritos, hasta llegar a su boca carnosa, que muestra una leve sonrisa de desagrado, como si yo le diera asco, gesto que me devuelve a la realidad.)
- Ma, ese tipo tiene conjutivitis en los ojos deberiamos volver ante de que se nos pegue tan contagiosa enfermedad.( Lo miro a los ojos de la misma forma en la que el me mira; aceptó que el tipo ta bueno, pero hay limites que por muy rico bizcocho, que este, no me puedo dejar humillar por nadie, si yo no me doy mi valor, nadie me lo va dar).
-Maya (mi mamá suspira como si no supiera que hacer conmigo). -Estás decida a volverme loca hoy al parecer.
-Discupe a mi hija, se cayó de la cama cuando pequeña, por eso su cabeza no funciona bien.(mi mamá me mira con ojos de advertencia, gesto que hace que rico bizcocho se burle, por lo tanto mi digna persona procede disimuladamente a mostrarle mi dedo corazón.
- No se preocupe señora los niños son así de traviesos y caprichosos.
-No soy una niñaaa, tú... tú... tú eres el niño, que andas por ahí disfrazandote de vampiro deportita.
-Lucas ¿quién es?( se oye una voz que proviene de atrás del chico vampiro, que de repente se asoma por encima del hombro de este, y oh por Dios, es la mujer más hermosa que alguna vez ví; su pelo es de un color rojo inteso, parece que es el color favorito de está familia, sus ojos son verde como la esmeralda, de naríz y rostro fino, labios rojos como la cereza, piel clara, de estatura media; no aparenta más de treinta años, de verdad que es muy bella.)
-Hola, buen día, ¿en que podemos ayudarles?(Sonrié gentilmente, y nos mira con curiosidad.)
-Buenas tardes, somos los vecinos del frente y vinimos a darle la bievenidad a la comunidad(dice mi mamá, y le tiende un plato, que yo no había notado, hasta ahora) -Son unas galletas de chocolates que hice para darle la bievenidad.
- Oh, gracias.(Contesta la mujer y toma el plato de manos de mi madre) - A mi hijo le gustan mucho las galletas de chocolate.
- Oh, donde están mi modales (dice mi madre y procede a presentarnos) -Yo soy Mary Parker y está es mi hija Maya.
-Sabrina Sayer y este es mi hijo Lucas(Le dice la mujer a mí madre.
Me sorprende que este chico sea su hijo, porque la mujer no aparenta más de treinta, y hablando de él, esta muy callado, lo observo disimuladamente y notó que tiene los ojos puestos en mis orejas de conejo y me sonrojo 😳 de la verguenza, la idea que tenía al vestirme así, era que mí madre se enojará y viniera sola a darle la bievenidad a los vecinos, no pensé que me obligaría a venir de esta manera; no me puedo quejar, fue mi culpa a vestirme así, ya lo único que me queda es aguantarme.
-Su hija viste de una forma particular(dice Lucas con una mirada de burla en sus hermosos ojos, que sólo quiero sacar de sus cuencas. Aunque lo que más quiero es partir su arrogante cara y borrar esa sonrisa engreida. Siento mi mano elevarse, pero mi madre nota mi enojo y me sujeta.) -En serio muy particular 😏.
- Sí... si le gusta disfrazarse; no tenemo que ir, los dejamos para que terminen de desempacar(dice mi madre, mientras me jala por el brazo con ansiedad, porque nota que puedo causar problemas en cualquier momento.)
-Oh, muchas gracias por la visita y las galletas, cuando todo este organizado las invitare a cenar.(dice Sabrina, con una sonrisa amable.)
- ¡Ok, sera un placer!. (Grita mi madre, ya que nos encotramos del otro lado de la calle, de lo rápido que ella me arrastro.)
Mi madre siempre ha tenido miedo de mis ataques de ira, ya que una vez estaba tan enojada con una profesora del jardín de niños, porque está siempre me mandaba al frente de la clase a recitar las vocales, se la tenía conmigo y un día que estaba particularmente molesta me negue y ella llamó a mi madre y le dijo que era una niña problemática y mal educada, solo recuerdo que mientras hablaba con mi madre me subi a la mesa, no se como llegué hay, ya que tan solo tenía cinco años, pero agarre su cabello y me aferre como una araña a el; en el tira y jala cuando por fin mi madre logro que me alejara, tenía el cabello de la profesora en mi manos y me sorprendí porque tenia mucha fuerza; subí la vista y ella estaba roja de la ira y gritaba devuelme mi peluquín, mientras que mi madre se disculpaba una y otra vez, despues de esto me expulsaron y nunca volví a verla.
Volviendo al presente lo último que veo del chico del frente es sus sónrisa arrogante, antes de cerrar la puerta de su casa. En lo único que pienso es en vengarme y quitar esa sónrisa de su cara, así que ya veremos quién ríe al final🤨.